Legisladores estadounidenses condenaron el 12 de abril el último ataque a la imprenta de The Epoch Times, en Hong Kong. Los congresistas dijeron que no sería una sorpresa que el Partido Comunista Chino (PCCh) estuviera detrás del incidente en un intento por silenciar los reportajes que critican al régimen.
En las primeras horas del lunes, cuatro hombres con máscaras, dos de los cuales empuñaban mazos, irrumpieron en el almacén de impresión y destrozaron maquinaria y computadoras durante unos dos minutos antes de irse con una computadora. Ningún empleado resultó herido durante el incidente.
Los intrusos causaron grandes daños y la edición de Hong Kong de The Epoch Times se ha visto obligada a suspender sus operaciones en el futuro inmediato.
En un ataque que se produjo hace menos de 18 meses, cuatro intrusos enmascarados prendieron fuego a la misma instalación de impresión durante el apogeo de las protestas a favor de la democracia en la ciudad. Esos perpetradores nunca fueron capturados.
«Los repetidos y violentos ataques contra The Epoch Times conmocionan la conciencia», dijo el representante Devin Nunes (R-Calif.) a The Epoch Times en una declaración enviada por correo electrónico. «Claramente, el Partido Comunista Chino y sus matones callejeros no pueden tolerar que ningún medio de comunicación informe los hechos sobre las depredaciones del Partido».
Con gran parte de los medios de comunicación de Hong Kong inclinándose a favor de Beijing en los últimos años, la edición en Hong Kong de The Epoch Times es uno de los pocos medios independientes de la ciudad que cubre los abusos del PCCh en China continental, Hong Kong y en el extranjero.
Nunes añadió: «En un momento en que los medios de comunicación corporativos de Estados Unidos han adoptado el eslogan «decir la verdad al poder», sin aplicarlo realmente, The Epoch Times tiene el valor de hacerlo realmente, y están pagando un alto precio por mantenerse fieles a sus principios».
El representante Scott Perry (R-Pa.) describió al régimen del PCCh como un “gobierno de matones» que «se basa en la intimidación, la extorsión y la violencia para reprimir la libertad y a aquellos que luchan por la verdad y el autogobierno por consentimiento».
«No sería sorprendente que el PCCh estuviera detrás de un ataque de este tipo, ya que constantemente buscan apagar cualquier luz que exponga el oscuro mar de represión que mantiene a flote a su gobierno ilegítimo», dijo Perry en una declaración enviada por correo electrónico.
El representante Jim Banks (R-Ind.) dijo que el ataque era «reprobable».
«La libertad de prensa en Hong Kong está siendo atacada por el Partido Comunista Chino», dijo Banks en una declaración.
La libertad de prensa en Hong Kong se ha erosionado gradualmente desde que la ciudad fue transferida del gobierno británico al PCCh, en 1997. Tras haber sido un bastión de la libertad de prensa en Asia, la ciudad, en 2002, cayó del puesto 18 en el Índice Mundial de Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras, al puesto 80 en la actualidad. La caída fue el resultado de la «presión de Beijing», según la organización sin fines de lucro.
Mientras tanto, la imposición por parte del PCCh de una ley de seguridad nacional draconiana ha provocado temores por una mayor presión a la libertad de prensa en la ciudad. La ley, que entró en vigor en julio, castiga lo que Beijing considera actos de secesión, subversión, terrorismo o colusión con fuerzas extranjeras, con una pena máxima de cadena perpetua. Desde entonces, decenas de figuras a favor de la democracia, incluido el magnate de los medios, Jimmy Lai, han sido acusados o condenados en virtud de la legislación o de leyes similares.
El mes pasado, el régimen chino introdujo cambios radicales en el sistema electoral de la ciudad que redujeron drásticamente la representación democrática, mientras buscaban asegurar que los «patriotas» leales a Beijing gobiernen la ciudad.
El representante Brian Babin (R-Texas) dijo en un comunicado que el robo fue otro intento del régimen para «silenciar las voces de los que dicen la verdad en Hong Kong».
“Rezo por mis compañeros amantes de la libertad que viven bajo el régimen represivo del PCCh”, agregó. «¡Que se mantengan firmes y valientes en su búsqueda de la verdad!»
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