La decisión del presidente Donald Trump de suspender la financiación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sido elogiada por numerosos legisladores de Estados Unidos, ya que el organismo está siendo objeto de un creciente escrutinio por sus vínculos con Beijing y su manejo de la pandemia.
El 15 de abril Trump declaró que la financiación se detendría durante 60 a 90 días en espera de una revisión «para evaluar el papel de la Organización Mundial de la Salud en la mala gestión y el encubrimiento de la propagación del coronavirus». Estados Unidos es el principal donante de la OMS, con una contribución de más de 400 millones de dólares en 2019, según las estadísticas del Departamento de Estado. Esa cifra es aproximadamente el 12 por ciento del presupuesto de la OMS.
Si bien la medida provocó críticas de algunos en la comunidad internacional, entre ellos el secretario general de las Naciones Unidas y el ministerio de Relaciones Exteriores de China, fue bien recibida por varios legisladores republicanos y activistas de derechos humanos, que criticaron a la agencia por su papel en la ayuda al régimen chino para disminuir la gravedad del brote durante sus primeras etapas.
«¿Quién sabe cuánto mejor estaría el mundo ahora si China hubiera sido honesta? ¿O si la OMS no hubiera repetido como un loro las mentiras del régimen?», dijeron los miembros republicanos del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes en un tuit. «El presidente tiene razón al detener la financiación de la OMS hasta que podamos llegar al fondo de su respuesta al virus y su relación con Beijing».
Who knows how much better off the world would be now if China had been honest?
Or if the WHO hadn’t parroted the regime’s lies?
The president is right to halt WHO funding until we can get to the bottom of its virus response & relationship with Beijing.pic.twitter.com/3PTr9kYNAj
— Oversight Committee Republicans (@GOPoversight) April 14, 2020
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«Los dólares de los contribuyentes estadounidenses no deberían ir a una organización más preocupada por satisfacer al Partido Comunista Chino que por proteger la salud mundial», escribió en Twitter el representante Guy Reschenthaler (R-Pa.).
Thanks to @realDonaldTrump for withholding funds from @WHO.
Last week, I introduced HRes917 w/ 38 colleagues calling for just this.American taxpayer dollars shouldn’t go to an organization more concerned with appeasing the Chinese Communist Party than protecting global health. https://t.co/TQQzqXqDH8
— Rep. Guy Reschenthaler (@GReschenthaler) April 14, 2020
Otros legisladores, incluyendo los senadores Rick Scott (R-Fla.) y Josh Hawley (R-Mo.), y los representantes Jim Banks (Rep.-Ind.), Jim Jordan (Rep.-Ohio), y Greg Steube (Rep.-Fla.), también apoyaron el recorte de fondos. Recientemente escribieron una carta a la OMS pidiendo que divulgue información sobre su «respuesta fallida y retrasada».
El comité de supervisión principal del Senado también dijo que investigaría la respuesta a la pandemia de la OMS.
Durante unas tres semanas después de que la OMS fuera notificada del brote el 31 de diciembre de 2019, el organismo hizo eco de las declaraciones de los funcionarios chinos de que no había pruebas o un bajo riesgo de que el virus fuera contagioso. Sin embargo, un creciente conjunto de evidencias muestra que el régimen chino era consciente de que el virus se estaba propagando entre seres humanos mucho antes de que confirmara públicamente la transmisión de persona a persona el 20 de enero.
Recientemente, una funcionaria de la OMS, la Dra. Maria Van Kerkhov, especialista en enfermedades respiratorias, dijo que sospechaba «desde el principio» que podía haber habido una transmisión de humano a humano cuando la organización fue notificada por primera vez.
La organización también ha sido criticada por el trato que da a Taiwán, al que ha excluido de la lista de miembros a instancias del régimen chino, que considera a la isla autogobernada como parte de su territorio. Taiwán, una isla autogobernada con su propio gobierno elegido democráticamente, dijo que ha sido privada de información oportuna para luchar contra el virus.
Los funcionarios de Taiwán también han acusado a la OMS de ignorar su solicitud de información enviada el 31 de diciembre de 2019.
El activista democrático de Hong Kong, Joshua Wong, calificó a la OMS de «brazo de la diplomacia china» y la reprendió por dejar de lado a Taiwán.
The WHO is an arm of Chinese diplomacy under the guise of liberal internationalism or global governance. Transnational cooperation is of course crucial to combating pandemics, but the institution in question is the anthesis of it, as the shunning of Taiwan makes painfully clear. https://t.co/00MYt2lBfo
— Joshua Wong 黃之鋒 ? (@joshuawongcf) April 14, 2020
Marion Smith, directora ejecutiva de la Fundación Conmemorativa de las Víctimas del Comunismo, una organización sin fines de lucro con sede en Washington, dijo en una declaración que Estados Unidos no debería restablecer la financiación de la OMS hasta que su director general, Tedros Ghebreyesus, sea reemplazado.
«China ha estado engañando al resto del mundo sobre el brote que se originó en Wuhan y solo ha podido salirse con la suya debido a la complicidad de la OMS en el encubrimiento de las mentiras», dijo Smith.
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