La ex primera dama Michelle Obama dijo a la gente que se conectó ayer lunes a la emisión del inicio de la Convención Nacional Demócrata de 2020 que Donald Trump es el presidente equivocado para Estados Unidos e instó a la audiencia virtual a votar por el posible candidato presidencial demócrata Joe Biden.
«Así que si toman una cosa de mis palabras de esta noche, es esta: si piensan que las cosas no pueden empeorar, créanme, sí pueden; y lo harán si no hacemos un cambio en estas elecciones. Si tenemos alguna esperanza de acabar con este caos, tenemos que votar por Joe Biden como si nuestras vidas dependieran de ello», dijo Obama.
La ex primera dama pronunció el discurso culminante de la noche de apertura de la convención, en la que participan varios políticos demócratas clave, entre ellos el senador de Vermont Bernie Sanders, la senadora de Minnesota Amy Klobuchar y la gobernadora de Michigan Gretchen Whitmer.
Obama dijo que cuando el presidente Barack Obama y el vicepresidente Biden dejaron el cargo, la administración había logrado un récord de creación de empleo y «aseguró el derecho a la atención médica para 20 millones de personas».
«Cuatro años después, el estado de esta nación es muy diferente. Más de 150,000 personas han muerto, y nuestra economía está en ruinas debido a un virus que este presidente minimizó durante demasiado tiempo. Ha dejado a millones de personas sin empleo», dijo la ex primera dama.
El presidente Donald Trump prohibió los viajes desde China mientras los demócratas del Congreso se centraban en el impeachment. Después de la prohibición de viajar, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), animó a la gente a visitar el Barrio Chino de San Francisco. Más tarde dijo que lo hizo para «poner fin a la discriminación» contra los estadounidenses de origen asiático.
La campaña Trump, en una declaración sobre la apertura de la convención, dijo que la «convención dejó fuera el hecho de que Joe Biden aumentaría los impuestos a más del 80 por ciento de los estadounidenses (…)».
«También faltaba su política de fronteras abiertas, con amnistía y permisos de trabajo para 11 millones de extranjeros ilegales. No se mencionó el deseo de Joe Biden de recortar los fondos de la policía, de eliminar diez millones de empleos en el sector energético con un nuevo acuerdo ecológico, o de dar atención médica gratuita a los extranjeros ilegales, pero para ser justos, fue solo la primera noche», dijo Hogan Gidley, secretario de prensa nacional de la campaña Trump 2020, en un comunicado.
«Los demócratas pueden tratar de ocultar la peligrosa verdad con un anuncio publicitario producido por Hollywood, pero no pueden ocultar el hecho de que Joe Biden es presa de la izquierda socialista radical».
Al igual que muchos de los demás oradores que intervinieron durante la noche de apertura, Obama dedicó una parte importante de su discurso a la cuestión del supuesto «racismo sistémico» en los Estados Unidos.
«Y cuando los horrores del racismo sistémico sacudieron nuestro país y nuestras conciencias, millones de estadounidenses de todas las edades, de todos los orígenes se levantaron para marchar unos por otros, clamando por justicia y progreso», dijo Obama, refiriéndose a la ola de protestas y violentos disturbios que barrieron la nación tras la muerte de George Floyd bajo custodia policial.
«Esto es lo que seguimos siendo: gente compasiva, resistente y decente cuya fortuna está ligada a la de los demás. Y ya es hora de que nuestros líderes reflejen una vez más nuestra verdad».
La ex primera dama mencionó brevemente un conjunto de relatos desacreditados de los medios de comunicación, incluyendo comentarios editados de Trump sobre la violencia en Charlottesville, el sesgo de los medios de comunicación sobre los niños en jaulas y el uso de municiones antidisturbios para dispersar a los manifestantes violentos cerca de la Casa Blanca.
«Ellos ven a nuestros líderes etiquetando a sus conciudadanos como enemigos del estado mientras envalentonan a los supremacistas blancos que llevan antorchas. Ven con horror cómo se arranca a los niños de sus familias y se los arroja a las jaulas, y cómo se utiliza el gas pimienta y las balas de goma contra los manifestantes pacíficos para una sesión de fotos», dijo Obama.
En lugar de «envalentonar a los supremacistas blancos que portan antorchas», el presidente condenó el racismo y la intolerancia y dijo que tanto los grupos que apoyan como los que se oponen a la retirada de una estatua confederada en Charlottesville incluyen «gente buena».
Gran parte del primer relato sobre los «niños en jaulas» giraba en torno a fotos tomadas durante la administración Obama. Al igual que la administración Obama, la administración Trump detuvo a los niños migrantes, pero ninguna de las dos administraciones los puso en jaulas.
La ex primera dama tampoco mencionó que los «manifestantes pacíficos» habían, según el fiscal general William Barr, herido a 150 agentes de las fuerzas de seguridad antes de ser dispersados con gas pimienta y balas de goma.
El discurso de Obama fue probablemente el más apasionado de la noche. Apeló a los votantes a nivel personal. Señaló que odia la política, pero insta a la gente a votar porque ama «este país con todo mi corazón, y me duele ver a tanta gente sufriendo».
Cuando pidió a la gente para que votara por Biden, un político de carrera, Obama describió al exvicepresidente como un hombre del pueblo debido a los muchos seres queridos que perdió, incluyendo su esposa, su hijo y más tarde su hijo mayor, Beau.
«Así que Joe conoce la angustia de sentarse en una mesa con una silla vacía, y es por eso que da su tiempo tan generosamente a los padres afligidos», dijo Obama.
«Ahora bien, Joe no es perfecto. Y él sería el primero en decírselo. Pero no hay un candidato perfecto, no hay un presidente perfecto».
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