Estos cariñosos abuelos de Texas encontraron una forma creativa de acompañar a sus nietos en la celebración del Día de Acción de Gracias.
Como la pandemia del virus del PCCh ha pospuesto sus planes familiares, Missy y Barry Buchanan decidieron no dejarse derrotar. En cambio, enviaron dos fotografías en tamaño natural, una a su hijo en Texas y otra a su hija en California, para tener la satisfacción de compartir con sus cuatro nietos.
«Decidimos que no queríamos arriesgarnos a enfermarnos», dijo Missy, de 69 años, a Today Parents. «Entonces empecé a pensar, ‘¿Cómo puedo hacer que aún sea divertido?'».
La hija de la pareja, Mindy Whittington, no se sorprendió cuando su madre le dijo que llegaría un paquete grande, porque ella envía regularmente regalos para su hijo de 3 años, Noah. Sin embargo, cuando el paquete llegó, el contenido generó risas.
«Lo abrimos juntos y no podíamos parar de reírnos», dijo Mindy a CNN. Feliz con el inesperado regalo, Noah le dio a sus recortes de cartón de 1.80 metros de «Ama» y «Poppi» un gran abrazo.
Noah, que habla con los recortes de cartón de sus abuelos, no los ve desde la Navidad de 2019. Según su madre, al niño le gusta tener los recortes en su dormitorio durante la noche.
Por otro lado, en Texas, la otra rama de la familia solo ha logrado tener visitas con distanciamiento social al aire libre con sus queridos abuelos desde la primavera debido al virus del PCCh (Partido Comunista Chino), conocido comúnmente como el nuevo coronavirus.
En Texas, su hijo Matthew y su hijo de 10 años, Oliver, estaban divididos al abrir el paquete. El dúo padre e hijo preparó entonces sus divertidísimos recortes de cartón listos para saludar a los hermanos Quintín, de 12 años, Clara, de 6, y a la madre de Oliver. «Todos estaban algo confundidos y riendo, y fue una escena divertida», recordó Matthew.
«No han podido darle un abrazo a sus abuelos desde, como, marzo», reveló.
Los niños mayores han disfrutado tomándose fotos con sus Ama y Poppi en varios lugares de la casa e incluso del jardín. «Nos trasladaban al gallinero, a la cocina y a la chimenea», dijo Missy, una escritora, a Good Morning America.
No hace falta decir que los divertidos recortes han ayudado a quitar el estrés de la pandemia este año, dijo Missy.
«El amor de la familia no va a cambiar, estemos o no estemos allí», compartió Missy. «Nos recvuerda que todavía hay algo para reírnos».
La tecnología ha ayudado a la familia a mantenerse en contacto durante la pandemia, por lo cual todos están agradecidos. Con la gratitud en mente, la familia planea hacer una videollamada en el Día de Acción de Gracias y reconocer el amor que continúan compartiendo durante estos tiempos sin precedentes. Missy también planea preparar un festín para ella y su esposo, incluyendo pavo asado y pasteles de nuez, aunque sea para que coman solo ella y Barry.
«Creo que deberíamos tener la mentalidad de simplemente, tratar de hacer lo más positivo que podamos de esto», razonó Missy. «No va a durar para siempre, y todos volveremos a estar juntos otra vez, esperemos que sea pronto».
Los recortes, aseguró, se quedarán hasta la Navidad.
«Los abuelos pueden abrir el camino con esto», dijo Missy a Today Parents. «Podemos mostrarle a los demás cómo se puede estar seguro y aún así celebrar. Creo que se están divirtiendo más con los recortes de lo que lo harían si hubiéramos estado allí en persona!».
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