A los 18 años, un joven yacía en su cama de hospital viendo a su madre desahogar su agonía y su decepción frente a otro visitante. El adolescente tenía suerte de estar vivo.
Christopher Dickie era drogadicto, sufrió una sobredosis y sobrevivió. Al final de la escuela secundaria, ya había sido arrestado 14 veces y había perdido 20 empleos.
Desde la cama del hospital, vio a su mamá intentando comprender cómo su dulce hijo había cambiado tan drásticamente. Era incomprensible para ella. Sabía que algo tenía que cambiar.
«Me sentía desesperado. No había salida», dijo a Love What Matters, añadiendo que sabía que las palabras de su madre eran «las cosas que diría en mi funeral».
En ese momento, si alguien le hubieras dicho a Christopher que iba a dejar las drogas y que se abstendría de consumir durante los siguientes 13 años, probablemente no lo habría creído.
Sin embargo, al entrar en un proceso de recuperación, cambió de opinión. Dijo que antes «despreciaba estar sin consumir y no podía imaginar una vida sin drogas y alcohol».
«Eso es lo más loco de esta enfermedad», añadió. «A medida que mi vida se iba oscureciendo y reduciendo, mi mente seguía diciéndome que lo iba a resolver y que iba a estar bien. Sin embargo, algo me llamó la atención. Estas personas [que también se estaban recuperando] eran como yo, pero completamente diferentes al mismo tiempo. Tenían trabajos, familias, responsabilidades, y eran tranquilamente felices».
«Yo, en cambio, quería arrastrarme fuera de mi piel estando sin consumir. Tenía que averiguar qué les había sucedido. Ese fue mi comienzo, mi esperanza».
Christopher empezó a lograr cosas en la vida que se habían quedado en el camino —lo que le impulsó a seguir su proceso—, como obtener el GED (un examen de educación general), una maestría y mucho más.
Dickie, que ahora tiene 38 años, no solo se ha mantenido alejado de las drogas, sino que también fundó los Centros de Recuperación de Natural State en Arkansas, ayudando a otras personas a superar la adicción.
También cofundó un programa de entrevistas llamado «Recovery Clinic» por «el impacto negativo que la pandemia ha tenido en la comunidad de recuperación».
Los Centros del Control de Enfermedades (CDC) declararon en un comunicado de prensa de diciembre de 2020 que «ocurrieron más de 81,000 muertes por sobredosis de drogas en los Estados Unidos en los 12 meses previos a mayo de 2020, el mayor número de muertes por sobredosis jamás registrado en un período de 12 meses». Aunque las sobredosis estaban aumentando antes de la pandemia, los CDC afirman que «las últimas cifras sugieren una aceleración de las muertes por sobredosis durante la pandemia».
«El año de la pandemia ha sido duro para todos», dijo Dickie a The Epoch Times. «Y ha sido realmente duro para la comunidad en recuperación y para las personas que luchan contra la adicción, porque a medida que se cierran las cosas, se crea el elemento de aislamiento».
«Así que le pido a los lectores que si conocen a alguien que esté luchando, se pongan en contacto con nosotros, podemos ayudar».
El mensaje de Dickie y su equipo es sencillo: «No estamos hechos para vivir en la oscuridad».
El objetivo de Natural State Recovery es ayudar a los adictos en recuperación, conectándolos con muchas oportunidades disponibles tras dejar una vida de adicción.
«Esencialmente somos un programa de recuperación construido POR personas que se han recuperado a largo plazo PARA aquellos que buscan recuperarse», dijo. «Estoy agradecido por convertir mi dolor en un propósito».
Añadió que la adicción es una de las enfermedades más difíciles de combatir porque es «una de las únicas enfermedades que afectan a la salud espiritual, mental, física y emocional de la persona».
Por eso, Dickie y su equipo crearon un programa integral para personas en crisis y que están luchando contra la adicción. Compraron un campus de instituto abandonado y lo remodelaron para convertirlo en un centro de tratamiento.
Natural State Recovery ofrece muchas actividades, y cuenta con un campo de fútbol, una pista de atletismo, un gimnasio de baloncesto y una perrera para los que les gusta la terapia con animales. Los que están pasando por un trauma pueden encontrar actividades recreativas en cualquier momento.
Dickie dice que «los centros de Natural State Recovery representan el mayor programa del Estado de Arkansas. No hay nada como nosotros».
Entre los planes futuros del centro se encuentra la expansión a otros estados.
«Queremos ayudar a los demás a nivel nacional», dijo.
Un centro de recuperación y una comunidad de apoyo le han permitido a Dickie convertir su desesperación por una nueva vida en algo diferente. Reconoce que escuchar y aceptar las sugerencias de la familia, los entrenadores, los mentores y otras personas ha enriquecido el programa que ha desarrollado.
Ahora, anima a otros a aportar lo que puedan a la causa.
«He conseguido ser un padre, un hijo, un empresario, un voluntario, un mentor, un líder de la comunidad, un defensor y trabajador de la política, un graduado universitario y la lista sigue creciendo», dijo.
No está mal para alguien cuyo grupo de estudiantes de la escuela secundaria lo votó como «el más probable para terminar en el ‘Cops’ (la policía)».
Si conoce a alguien que está luchando contra la adicción, póngase en contacto con www.naturalstaterecovery.com.
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