Dos policías de Texas recibieron la ayuda de un buen samaritano cuando un coche robado dio lugar a una persecución en el suburbio de White Settlement, en Fort Worth.
Un automovilista dio un paso adelante y ayudó a uno de los oficiales mientras perseguía al sospechoso, lo que terminó con su detención.
El 18 de junio, una cámara de matrícula localizó un coche robado y los dos oficiales respondieron. El video de la cámara de control muestra a ambos policías interceptando a un hombre sospechoso en un Ford Focus rojo. El hombre se bajó y condujo a los oficiales en una persecución a pie durante unos 800 metros por el barrio.
Pero con las temperaturas de Texas subiendo hasta los 90 grados, uno de los policías, el cabo Jon Porter, se quedó atrás; su compañero, el oficial Samuel Brown, continuó la persecución.
Entonces, un transeúnte que iba en su coche se acercó y le dio un aventón a Porter. Las imágenes de la cámara corporal muestran al conductor ofreciéndose a llevarlo, al oficial aceptando y a él subiendo al asiento trasero.
(Cortesía del Departamento de Policía de White Settlement)
En 20 segundos, alcanzaron al oficial Brown, que —a pesar de tener un solo brazo— había llevado al sospechoso al suelo y le estaba poniendo las esposas.
«Miro por encima de mi hombro tratando de ver quién viene hacia mí, y entonces veo a Porter saltar del coche», dijo más tarde el oficial Brown a Fox 4. «Fue bastante divertido».
El sospechoso, Joshua Taylor Brown, de 31 años, fue acusado de uso no autorizado de un vehículo, posesión de una tarjeta de crédito robada y evasión de la detención.
El jefe de policía Chris Cook trató más tarde de identificar al buen samaritano que ayudó a los policías. Recurriendo a las redes sociales, encontró al exguardia de seguridad Jimmy Davis.
Davis había visto al sospechoso pasar corriendo por delante de su casa y decidió intervenir.
«Le dije a mi mujer: ‘Voy a entrar en el coche y a seguirlo'», dijo. «Mi intención era impedir que el tipo fuera más allá. Hice lo que tenía que hacer, y lo volvería a hacer también, si tuviera que hacerlo».
El jefe Cook reconoció la actuación de Davis y le entregó una muestra de agradecimiento. «No todos los días alguien se lanza a echar una mano así», dijo el jefe Cook.
El oficial Brown, un novato con poco más de cuatro meses en el cargo, recordó haber visto a Davis y a Porter detenerse durante el arresto. «Ni siquiera pensé mucho en ello hasta que volvimos aquí, y me dije: ‘¿De verdad se metieron en el coche de otra persona?'».
Anteriormente, en el sur de California, al oficial Brown le dijeron que el trabajo policial estaba fuera de su alcance.
Dijo a Fox 4: «Es una historia aburrida. Nací con un brazo».
Ahora, en Texas, se encuentra en su ambiente.
«Estuve emocionado todo el tiempo», recordó. «Vivo para este tipo de cosas».
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