John Sims, de Tucson, Arizona, no esperaba que la compra de su nueva casa viniera con un artefacto extraordinario de la era de la Guerra Fría. Pero cuando el amigo de quien había recibido la casa dijo que podría tener un refugio de lluvia radiactiva en el patio trasero, se vio obligado a cavar más profundo.
Al finalizar la venta en el 2015, John, un capitán del departamento de bomberos, respondió pidiendo en broma una pala. «Lo desenterraré ahora mismo», dijo, según el Arizona Daily Star.
Entonces John se hizo con la planificación original de la casa, lo que demostró que había algo más en su jardín.
Le llevó meses excavar por varios lugares alrededor de su jardín en el caluroso verano antes de que encontrara algo. John pagó a un profesional para que comprobara con los detectores de metales dónde estaban los mejores lugares para excavar.
Después de semanas de excavaciones fallidas, estuvo a punto de abandonar el proyecto por completo. Hasta que por fin encontró una tapa metálica, que resultó ser la entrada al refugio de lluvia radiactiva, que, según la información de que disponía, había sido construido en 1961 por una empresa llamada Whitaker Pools.
Al descubrir la tapa, confesó que «esperaba que no fuera una fosa séptica». Comprensible.
Cuando comenzó a explorar el refugio subterráneo de casi 1 metro de altura, como bombero, John desconfiaba de los peligros que acechaban en el aire y de la posibilidad de quedarse atrapado en el espacio confinado.
«Sé demasiado acerca de los espacios confinados, y estaba solo en casa», dijo el diario Arizona Daily Star. «Especialmente si la tapa se caía, no había forma de levantarla por debajo».
El búnker consistía en una escalera cilíndrica de concreto con una escalera de caracol descendente de acero que conducía a una pequeña cámara cerrada de concreto con una cúpula de fibra de vidrio.
«Realmente esperaba que fuera un pequeño microcosmos… una cápsula del tiempo llena de cajas de defensa civil, detectores de radiación y catres y cosas por el estilo», dijo.
En un post de Reddit, en el que se recogieron más de 500 comentarios de otros usuarios interesados, declaró que tenía previsto restaurar el refugio a su «antigua gloria» y que le gustaría llenarlo con objetos de esa época histórica, como jarras de agua de la defensa civil. Publicó varias actualizaciones en su cuenta de Reddit y de sus esfuerzos para reconstruir el refugio de lluvia radiactiva.
Primero se deshizo de los escombros acumulados en la base de la escalera y luego vertió concreto para reconstruir la escotilla demolida antes de restaurar completamente la escalera en el 2017. La escalera era su principal prioridad para entrar y salir del pequeño confinamiento.
John también adquirió varios artefactos de esa época, como latas de raciones de supervivencia y detectores de radiación, que quería colocar en el refugio de lluvia radiactiva para poder convertirlo en un valioso activo histórico.
Según John, Whitaker Pools construyó entre 15 y 20 de estos refugios alrededor del área de Tucson. Fue un esfuerzo de defensa civil en respuesta a la crisis de los misiles cubanos, que fue un período muy incierto en la historia de Estados Unidos. Pero a medida que la amenaza fue disminuyendo, la gente empezó a abandonarlos y a olvidarse de ellos.
Por muy obsoleto que sea, John Sims ciertamente encontró que valía la pena reconstruir lo que ciertamente es una reliquia histórica única con una historia fascinante detrás, y eso obviamente vale algo para un solo hombre.
¿Te gustó este artículo?
Entonces, te pedimos un pequeño favor. Compártelo en tus redes sociales, apoya al periodismo independiente y contribuye a que tus amigos se enteren de las noticias, información e historias más interesantes. Tardarás menos de un minuto. ¡Muchas gracias!
¿Alguna vez te imaginaste una carrera de motos con un policía?
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.