Imagina que entras en una habitación de hotel que acaba de ser desocupada. Encuentras una cama sin hacer y sábanas arrugadas. Tal vez se ha dejado una luz encendida. Pero junto al lavabo y la ducha es algo que apenas se ha usado. Es una barra de jabón y una pequeña botella de champú para el huésped. Tal vez lo hayan usado por una noche o un par de noches, pero ahora lo han dejado atrás.
Parece bastante inútil tirarlo, pero ¿qué más se puede hacer con él?
Bueno, una pequeña compañía llamada Clean World, ha estado salvando millones barras de jabón, y a través de esto, han estado salvando millones de vidas en el proceso.
Shawn Seipler era un empleado con sede en Florida de una exitosa empresa de tecnología que viajaba regularmente por su trabajo. Shawn estaba fuera por negocios y hospedado en un hotel cuando se tomó un momento para pensar en el jabón de su baño. «Llamé a la recepción del hotel y les pregunté qué pasa con el jabón cuando termino de usarlo», dijo Shawn al diario The Daily Telegraph.
The shameful secret behind what happens to all your leftover hotel toiletrieshttps://t.co/BdyoUs7h2y pic.twitter.com/i6g1bcQXz3
— The Telegraph (@Telegraph) May 12, 2017
Cuando se enteró de que simplemente lo estaban tirando a la basura, su mente se dirigió naturalmente a todos los hoteles en los que se había alojado durante su carrera y a todas esas barras de jabón que habían tirado a la basura.
En un mundo donde 1800 millones de personas carecen de servicios básicos de higiene, según World Health Organization (Organización Mundial de la Salud), este jabón podría ser de gran ayuda. En un mundo donde la diarrea y otras enfermedades causadas por una higiene deficiente se encuentran entre las principales causas de muerte, especialmente entre los niños pequeños, Shawn sabía que tenía que haber una manera mejor. «Tuve un momento de inspiración».
Así comenzó su nueva vida como empresario social y fundador de la organización sin fines de lucro Clean the World. La compañía ha lanzado el primer proyecto centrado en el reciclaje de productos de hostelería. Como señalan en su sitio web, los hoteles son lugares cruciales para empezar porque «más de 2 millones de barras de jabón de hotel parcialmente usado se tiran todos los días en Estados Unidos».
Mientras tanto, la World Health Organization (WHO) ha declarado que el acceso al jabón y a la educación en higiene podría significar la diferencia entre la vida y la muerte de los niños. Pero, ¿cómo llegaría el jabón de los hoteles estadounidenses a los niños pobres de los países en desarrollo, especialmente cuando algunas de las barras de jabón ya han sido utilizadas, aunque sea un poquito?
Al principio, la técnica de Shawn era ciertamente de bricolaje, como dijo a Telegraph. En el garaje de un miembro de la familia, Shawn dice que él y sus voluntarios «se sentaban en cubos de pepinillos con peladoras de papas y raspaban el exterior de las barras de jabón para limpiarlas en la superficie».
Después de limpiarlas, «contamos con trituradoras de carne para moler el jabón, cocinas para hervirlo en una pasta y moldes de jabón, en los que vertimos la pasta».
Desde los primeros días del 2009, la empresa ha crecido y crecido a medida que más y más hoteles de todo el mundo se han convertido en socios en la lucha por proporcionar higiene a los más pobres del mundo.
Empezar en Florida fue un gran activo, ya que Shawn pudo conseguir que las masivas compañías de hospitalidad de la zona, incluyendo Disney, donaran su jabón usado. Ahora, la compañía también tiene centros de procesamiento en otras grandes ciudades que tienen un gran tráfico de hospitalidad, como Hong Kong, Montreal, Las Vegas y Ámsterdam.
Mientras que algunos hoteles han comenzado a hacer más, como el reciclaje interno o el rellenado de contenedores con suministros a granel, Shawn sigue recomendando que los huéspedes preocupados por los residuos permanezcan activos. «Llévalos [jabón y champú] a casa contigo», aconsejó a los viajeros en el Telegraph. «Úsalos en casa o dónalos a un refugio para desamparados».
Hoy en día, Clean the World utiliza avanzados procesos automatizados para reciclar y reenvasar el jabón y los productos de higiene donados para crear kits de higiene que distribuye en todo el mundo a niños y familias necesitadas.
Como señala su página web, la empresa «ha distribuido más de 50 millones de barras de jabón en más de 127 países». Pero no lo van a dejar así. La compañía se asegura de realizar talleres con organizaciones locales para enseñar a la gente la importancia de la higiene y cómo sacar el máximo provecho de los kits donados.
También se han diversificado para ayudar a las personas del mundo en desarrollo a tener un mejor acceso al agua potable, cuya ausencia es una de las principales causas de enfermedad, junto con la falta de productos de higiene.
«Aún no hemos terminado». Desde sus humildes inicios en el baño de un hotel hasta una empresa que trabaja con los más grandes nombres de la industria hotelera, Clean the World tiene una visión: «Estamos liderando una revolución global en higiene».
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