Un ayudante del sheriff que recibió un disparo en la cabeza mientras perseguía a un sospechoso sobrevivió desafiando el pronóstico de sus médicos de que no se recuperaría.
El 16 de noviembre, el cadete Lucas Watts y su compañero perseguían una camioneta Chevy después de que el conductor huyera de un control de tráfico en la carretera S. Highway 11 a la altura de Mt. Pleasant Road, en Greenville, Carolina del Sur. De pronto se produjeron disparos y el cadete Watts, de 27 años, recibió un disparo en la frente. El conductor de la camioneta huyó del lugar.
Según un comunicado de prensa de la oficina del sheriff del condado de Oconee, el cadete Watts fue trasladado al hospital y la búsqueda del sospechoso continuó.
Más tarde, el sospechoso fue localizado, abatido y detenido por los agentes. El cadete Watts fue trasladado a un centro de traumatología del cercano condado de Greenville.
Cuando el sheriff del condado de Oconee, Mike Crenshaw, llegó al lugar de los hechos, recibió un mensaje del sheriff del condado de Greenville, Hobart Lewis, informándole de la sombría noticia.
«Él me dijo que había hablado con parte del personal [del hospital] de allí, y le habían dicho que la herida del cadete Watts no se podía sobrevivir y que no iba a lograrlo», dijo el sheriff Crenshaw a Fox 5, añadiendo que la esposa del cadete Watts no se enteró del pronóstico de su marido antes de entrar en la habitación del hospital. Ella insistió en que quería ver a su marido y creía que estaba bien.
Sin embargo, las cosas cambiaron a mejor después de que la esposa del cadete Watts entrara en la habitación.
«Yo no fui testigo personalmente, pero la familia me lo contó», dijo el sheriff. «Ellos dijeron que cuando ella entró, ella le tocó el pecho y su cuerpo empezó a moverse (…) El médico estaba allí y vio que era el primer movimiento desde el momento en que le habían disparado».
«Es un milagro de Dios que el cadete Lucas Watts haya sobrevivido a su herida de bala en la cabeza. No se movió durante más de dos horas desde el momento en que le dispararon hasta que su esposa le tocó el pecho y empezó a moverse. Actualmente respira por sí mismo, pero necesitará rehabilitación por la lesión cerebral traumática», dijo el sheriff Crenshaw en una declaración a The Epoch Times.
El cadete Watts ha servido en la Oficina del Sheriff del Condado de Oconee (OCSO) desde marzo de 2020, estando dos años y medio en la Oficina del Sheriff del Condado de Anderson. Estaba asignado al equipo Pro-Active Community Enforcement de OCSO y a la Unidad Marina en el momento del tiroteo.
Una vigilia de oración tuvo lugar fuera de OCSO el 17 de noviembre. En una actualización, el Sheriff Crenshaw explicó que se ha creado un fondo, donde el 100 por ciento de las donaciones recaudadas van directamente al cadete Watts y su familia. Desde entonces, el fondo ha recaudado más de USD 170,000 de los USD 200,000 que se han fijado como objetivo.
Se solicitó a la oficina del sheriff del condado de Greenville, en Carolina del Sur, que condusca la investigación oficial del tiroteo.
«En nombre de los hombres y mujeres de la Oficina del Sheriff del Condado de Oconee, me gustaría dar las gracias a todos los que han orado por Lucas, su familia, nuestros ayudantes y todas las fuerzas del orden en este momento», dijo el sheriff Crenshaw.
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