Un par de estudiantes universitarias de Virginia pensaban que eran completas desconocidas cuando estaban sentadas una al lado de la otra en un autobús del campus.
Pero después de entablar una conversación casual, descubrieron que tenían cosas increíbles en común: ambas eran adoptadas y procedían del mismo orfanato en China.
Las dos estudiantes dicen que su encuentro fue totalmente la voluntad de Dios.
Ally Cole, de 21 años, se sentó junto a Ruby Wierzbicki, de 19 años, en abril. Intercambiaron los perfiles de sus ciudades de origen: Ally es de Maryland y Ruby, de Nueva Jersey.
Entonces se dieron cuenta que ambas habían sido adoptadas de China a Estados Unidos. En un país de 1440 millones de habitantes, la probabilidad de proceder del mismo lugar es prácticamente nula.
Pero así fue. Ambas nacieron en la ciudad de Jinan.
Además, coincidir en un campus universitario —la Universidad de Liberty, en Lynchburg, Virginia— era aún menos probable. Sin embargo, al buscar fotos, pusieron sus teléfonos uno al lado del otro y encontraron una prueba.
«Nos dimos cuenta que todo coincidía, y supimos que tenía que ser el mismo lugar», dijo Ruby al medio de comunicación de Liberty. Resulta que fueron adoptadas con apenas una semana de diferencia, en el Instituto de Bienestar Social de Jinan, hace 15 años. En aquel momento, Ally tenía 6 años, mientras que Ruby tenía 4.
Se bajaron del autobús del campus y empezaron a indagar sobre la increíble coincidencia; las estudiantes incluso se encontraban una al lado de la otra, sin saber quién era la otra niña en ese momento.
«Ruby tenía un montón de fotos mías que nunca había visto antes y fotos en las que estábamos juntas», dijo Ally. «Incluso teníamos una amiga común del orfanato, Emma, con la que cada una tenía fotos».
Ruby dijo que se sorprendieron mucho.
Ally coincidió: «Creo que me sorprendió conocer a alguien de mi pasado. Creo que no me di cuenta hasta después de ir a clase».
La joven de 21 años ya había hecho las paces con el espacio en blanco de su pasado, pero aceptó rellenar algunas de las piezas que le faltaban con su nueva amiga Ruby, considerando la oportunidad como una bendición.
Ambas estudiantes también habían elegido inicialmente otras universidades antes de interesarse por Liberty, una universidad cristiana evangélica privada, durante una visita a College For A Weekend. Ruby estudia ciencias del deporte, mientras que Ally estudia diseño gráfico.
«Dios realmente tiene nuestras vidas según su plan y bajo su control», reflexionó Ruby.
«Hay personas con las que he hablado de esto y han dicho: ‘Qué casualidad'», continuó. «Pero nosotras pensamos que esto es 100 por ciento Dios».
«No hay manera de que dos personas que estuvieron en el mismo orfanato en un país diferente puedan terminar de alguna forma en la misma universidad al mismo tiempo, y que no sea Dios».
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