Factores estresantes en tu vida pueden hacer que desarrolles una crisis de identidad, ¿quién eres?

Estás en un momento de tu vida en el que te cuestionas, ¿quién eres? o quizás cuestionas, ¿cuál tu propósito en la vida, o cuales son tus prioridades? Si es así, puedes estar pasando por lo que algunos llaman una crisis de identidad.

El término «crisis de identidad» proviene del psicólogo del desarrollo y psicoanalista Erik Erikson. Quién Introdujo la idea sobre la crisis de identidad en los adolescentes, así como la crisis de la mediana edad. Se piensa que las personalidades se desarrollan al resolver las crisis en la vida.

Si está experimentando una crisis de identidad, puede estar cuestionando el sentido de tu vida o tu propia identidad. A menudo, esto puede ocurrir debido a grandes cambios o factores de estrés en la vida, o debido a factores como la edad o el avance de una determinada etapa (por ejemplo, la escuela, el trabajo o la infancia).
Esto es lo que necesitas saber acerca de las crisis de identidad y lo que genera:

Síntomas de una crisis de identidad

Tener una crisis de identidad no es una condición diagnosticable, por lo que no hay «síntomas» típicos, como en el caso de un resfriado o de una gripe. Por eso, Te presentamos las señales que debes tener en cuenta, si estás experimentando una crisis de identidad:

• Cuestionas quién es eres

• En general o con respecto a ciertos aspectos de la vida, como las relaciones, la edad o la carrera

•Experimentas un gran conflicto interno con respecto a quién eres o tu rol en la sociedad

• Recientemente se produjeron grandes cambios que afectaron el sentido de tu vida, como un divorcio

• Cuestionas tus prioridades, espiritualidad, creencias, intereses o trayectoria profesional, que tienen un gran impacto en cómo te ves a ti mismo

• Buscas un significado, una razón o pasión a tu vida

Es completamente normal cuestionar quién eres, especialmente porque cambiamos a lo largo de nuestras vidas. Sin embargo, cuando comienza a afectar tu pensamiento o funcionamiento diario, es posible que tenga una crisis de identidad

¿Es algo más que serio?

Cualquier tipo de crisis también puede provocarte un problema de salud mental.

Verte negativamente o a tu vida es un factor de riesgo que te hace vulnerable a la depresión.

Si tienes algún signo de depresión, considera buscar ayuda inmediatamente, sobre todo si estos signos van acompañados por pensamientos suicidas.

Los síntomas de la depresión pueden incluir:

• Estado de ánimo deprimido o sentimientos de desesperanza o inutilidad,

• Pérdida de interés en cosas que alguna vez disfrutabas

• Fatiga

• Irritabilidad

• Cambios en el apetito o en el peso

• Problemas de concentración, en los niveles de energía, motivación y sueño

Causas de una crisis de identidad

Aunque a veces se cree que sucede a ciertas edades, una crisis de identidad puede ocurrirle a cualquier persona, de cualquier edad, en cualquier momento de la vida.

Por lo general una crisis de identidad se asocia a problemas de salud mental debido a diversos factores estresantes de la vida. Estos factores estresantes no tienen por qué ser siempre malos, pero aun así pueden causar mucho estrés, lo que te hace cuestionar quién eres y qué cosas valoras y son importantes en en tu vida.

Entre los factores estresantes se puede incluir casarse o divorciarse, mudarse, experimentar un trauma, enfermarse o perder a un ser querido.

Tales factores estresantes pueden impactar en tu vida diaria y cómo te ves a ti mismo.

Un estudio reciente descubrió que los factores sociales, los niveles de estrés y los problemas de salud podrían influir en el desarrollo de lo que comúnmente se conoce como una crisis de mediana edad.

Tratamiento para una crisis de identidad

Cuestionarse quién eres parece estresante, pero en realidad puede ser algo bueno a largo plazo.

Conocerte mejor y adaptarte a los cambios puede ayudarte a crecer como persona.

A continuación, hay algunas cosas que puede hacer para superar una crisis de identidad.

Mira hacia adentro y explora

Tómate un tiempo para mirar realmente dentro de ti y pregúntate, qué te gusta y qué no.
Formúlate preguntas y ve si puedes responderlas con el tiempo y si las respuestas te ayudan a resolver las cosas. Recuerda, no tienes que tener todas las respuestas y estas pueden cambiar de un año a otro o de una década a otra.

Las preguntas pueden incluir:

• ¿Qué valoras en tu vida? ¿Hay algo que hagas en oposición a ello?

• ¿Qué cualidades y características te definen? ¿Cómo fuiste cambiando con los años?

• Si experimentas un cambio de vida importante: ¿Cómo cambiaron las cosas para ti? ¿Estás

contento con estos cambios? ¿Cómo puedes hacer frente a estas nuevas circunstancias?

• ¿Cuáles son tus intereses, pasiones y pasatiempos? ¿Haces lo que te gusta y si no, por qué?

• ¿Cuál es la razón? ¿Qué te ayuda a hacer frente a las dificultades?

• Lo que es importante para ti, con respecto a tus prioridades, propósito en la vida o sentido de identidad.

• ¿Hay algo que sientas que puedas hacer para mejorar tu sentido del yo?

Recupera la alegría y busca otras formas de superarte

¿Qué te hace feliz? ¿Qué le da a tu vida un sentido, un propósito y la alegría?

No necesariamente tienes que tener el trabajo perfecto, pero si no haces nada satisfactorio en tu vida, entonces esta podría ser la razón de por que te sientes en crisis.

Puedes encontrar satisfacción siendo voluntario, tomando un nuevo pasatiempo, conectándote con otros o haciendo cualquier otra cosa fuera de tu empleo. O bien, puede encontrar un nuevo trabajo, que tenga la combinación más apropiada para ti.

Encuentra apoyo

Tener un buen apoyo social puede influir en cómo manejas los grandes cambios, los factores estresantes o las cuestiones de identidad. Hay muchos lugares donde puedes encontrar apoyo.

Busca apoyo en amigos y familiares, en su comunidad o en iglesia, o incluso en un nuevo grupo, club o reunión que comparta tus intereses.

Si estás enfrentando algo específico, considera un grupo de apoyo, especialmente cuando se trata de un nuevo problema de salud. Los grupos de salud mental o la terapias individual, también pueden ser útiles.

Ignora la crítica interna y externa

Las expectativas de otras personas, así como las nuestras, pueden tener un gran efecto en cómo nos sentimos. Sin embargo, la autopercepción mejora tu bienestar general. Gastar tiempo y energía en el pensamiento crítico es contraproducente.

Busca ayuda externa

Si el estrés llega a ser demasiado, considera buscar ayuda externa. Esto puede ser de un amigo o familiar de confianza, un profesional de la salud mental o un grupo que pueda ayudarte a resolverlo y enfrentar lo que te está sucediendo.

Nunca sientas miedo de pedir ayuda. La vida, especialmente los grandes cambios, pueden darte miedo, pero puedes atravesar todo.

Sácate la angustia

El sentido del yo y la identidad es importante para todos. Aunque tener una crisis de identidad puede hacer que te sienta perdido o frustrado, este tipo de crisis también puede ser de gran ayuda.

Cuestionar tu sentido del yo, tu propósito y lo que valoras puede ayudarte a comprender quién eres y quién serás. Recuerda, cambiar es parte de la vida y al mirar hacia atrás verá, que cambias todo el tiempo.

Si estás pasando por grandes factores estresantes en tu vida y siente que te encuentras en una grave crisis de salud mental, comunícate con un profesional que pueda ayudarte a superar lo que te sucede.

Jamie Elmer es un escritor y editor. Este artículo fue publicado originalmente en Healthline.com

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