Una mamá desconsolada por la muerte de su hija decidió ir más allá para poder pasar más tiempo con su pequeña fallecida y permaneció cinco días junto a ella en una fría habitación de hospital.
Darcy Roger, de seis años, deseaba profundamente conocer a su hermanita por nacer, y como Beatrice nació dos semanas antes de tiempo le dio la oportunidad de compartir unos días junto a la bebé. Pero cuando Darcy murió, la mamá de ambas sintió que necesitaban más tiempo juntas y tomar fotos para que la recién nacida sepa cuánto la quería su hermana mayor.
Darcy nació con un trastorno raro llamado Asociación VACTERL, que afecta a diferentes órganos del cuerpo. La niña había sufrido 20 operaciones durante su corta vida y estaba esperando una cirugía cardíaca cuando contrajo la infección que terminó con su vida.
Según Emily Nixon, la mamá de Darcy y Beatrice, de North Yorkshire, Reino Unido, Darcy estaba tan feliz cuando se enteró que se convertiría en una hermana mayor que quiso a Beatrice desde el primer día, motivo por el cual decidieron pasar cinco días con Darcy en una habitación con temperatura controlada en la planta baja del hospicio para niños Martin House, de acuerdo al Daily Mail.
“Tenemos que pasar tiempo con ella y tomar fotografías, incluidas algunas de ella con Bea para mostrarle cuando sea mayor », recordó Emily.
Emily quería que Beatrice sepa todo acerca de su hermana y de cómo la amó desde antes de nacer, de cómo pensaba siempre en ella «Ella era la persona más especial», dijo Emily que recordó cuando a Darcy le dieron dinero a para que lo gastara en lo que quisiera y eligió comprar unas zapatillas pequeñas para su hermanita por nacer.
«La casa está llena de fotos y parece que hay una conexión entre ellas. Si pones una foto de Darcy frente a Bea, sonríe como si supiera quién es”, comparte la emocionada mamá.
La salud de Darcy empeoró en 2018, pero el 24 de enero de 2019 se desmayó cuando la preparaban para ir a la escuela.
Fue internada de inmediato y luchaba por respirar, estaba tenido un paro cardíaco.
«Los médicos trataron de resucitarla y trabajaron en ella durante unos 45 minutos, pero no lo logró», relató Kristian, su padrastro.
Emily recordó: “Darcy se había sentado a hablar conmigo sobre jugar unas horas antes. Luego, en un instante, ella se fue. Lo recuerdo claramente, di un paso atrás para dejar que los médicos trabajaran en ella y ella estaba muy consciente de lo que estaba pasando”.
“Recuerdo que ella dijo: ‘¿Dónde está mi mamá?‘. Ella quería que yo estuviera delante de ella. En el momento en que falleció, me estaba mirando directamente a los ojos, como si supiera y no quisiera irse sin verme”, continuó.
“Bea estaba en la habitación con nosotros, así que todos estábamos con ella”, agregó Emily.
«Es tan devastador pensar que un momento Darcy estuvo en el hospital y no pensamos que ella estaba tan mal y al siguiente, nuestras vidas se volvieron patas arriba», expresó la afligida madre.
Ante semejante dolor, el equipo de duelo en el hospital dirigió a la familia a Martin House Hospicio para que pudieran pasar más tiempo con Darcy, según el Daily Mail.
“Cuando el hospicio mencionó llevarla allí, no estaba segura de poder sentarme con ella durante cinco días. No pensé que sería capaz de hacerlo, pero tan pronto como entramos en el hospicio, me sentí muy tranquila”, señaló Emily.
Cuando Emily le dijo por primera vez a Darcy que iba a tener una hermana pequeña, estaba tan emocionada que fue directamente a la escuela y se lo contó a todos sus maestros.
“Darcy siempre había querido ser una hermana mayor, todos sus amigos en la escuela tenían hermanos y hermanas bebés”, afirmó Kristian.
Bea nació dos semanas antes, el 19 de enero con un peso 3,6 kilos.
Debido a que era prematura, Emily y Bea pasaron dos días en el mismo Hospital de York.
Lamentablemente, esto significaba que Darcy solo disfrutaría un día en casa con ella antes que la llevaran al hospital.
“’Siempre decimos que Bea llegó dos semanas antes, por lo que tuvo la oportunidad de conocer a su hermana mayor, indicó Kristian.
Darcy era una niña muy protectora y quería ser la única que cuidara a su hermanita.
“Bea vino con nosotros cuando Darcy fue internada. Estaba realmente emocionada de tener a su hermanita allí. Cuando se sentía bien, se sentaba y la miraba, pero no tenía energía para poder abrazarla o levantarla, enfatizó el emocionado padrastro.
«Habría sido el séptimo cumpleaños de Darcy en agosto y este fue el primero que tuvimos sin ella, mencionó Kristian.
“La próxima Navidad es la primera de Bea, pero será la primera sin Darcy, así que no sé cómo lo haremos”, agregó.
“Todo es muy difícil. Tratamos de ser positivos y ponerle una cara valiente porque necesitamos seguir adelante por Bea, pero también hay mucha tristeza para todos nosotros”, añadió. “Sin embargo, estamos decididos a que Bea crezca conociendo a Darcy y cuánto la amaba su hermana mayor”.
«Y, a medida que crezca, veremos a nuestra amada Darcy viviendo a través de ella», concluyó Kristian.
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