Un arresto realizado desde la silla de montar, el 20 de marzo, no parecía fuera de lugar en Albuquerque, Nuevo México, donde la cultura vaquera todavía está viva y coleando.
Walgreens, en Central Avenue y Coors Boulevard, fue el escenario al que llegó un destacamento de policías montados de Albuquerque, poco antes de las 11:30 de la mañana de un miércoles, y encontró al personal llorando por un ladrón.
Unas fascinantes imágenes reales de la cámara corporal de un agente, difundidas por el Departamento de Policía de Albuquerque (APD), muestran momentos de tensión en los que el sospechoso huye de la tienda por una carretera muy transitada, mientras los policías le persiguen a lomo de sus corceles.
A partir de las llamadas de socorro del personal de Walgreens, en el video, nuestro agente a caballo les responde en la puerta desde la sombra del toldo: «¿Ha robado algo?»
Las mujeres responden: «¡Sí!»
El caballo del agente ya está en marcha.
Se dirigen hacia el este a través del aparcamiento hacia el bulevar de seis carriles. El sospechoso, vestido de negro en un día soleado, se mueve con prisa como si quisiera cruzar el centro de la concurrida carretera con varios agentes montados a caballo pisándole los talones.
Acercándose al sospechoso, ahora en la acera y a punto de salir a la calzada, nuestro agente le grita: «¡Alto! ¡Policía de Albuquerque! Queda detenido».
Los animales pesados empiezan a acorralar al hombre, que lleva zapatillas de deporte y una sudadera con capucha, que ahora está reduciendo la velocidad pero sigue abriéndose paso hacia Coors Boulevard a pesar del tráfico que se aproxima.
Siguiéndole por la carretera mientras el tráfico empieza a ralentizarse ante ellos, el agente continúa gritando desde lo alto de su caballo: «¡Deténgase o se usará la fuerza contra usted!».
(Cortesía del Departamento de Policía de Albuquerque)
A medida que la demostración de fuerza, por no hablar de peso, de los animales y los hombres armados empieza a hacerse notar, el sospechoso se arremolina decaído, algo esquivo, de vuelta a la acera donde los agentes hacen su parada.
«¡No es libre de irse!», grita nuestro agente, mientras otro desmonta y empieza a esposar al hombre. «Está detenido por presunto hurto».
En un comunicado de la policía, el hombre fue identificado como Mark Chacon, de 30 años, quien supuestamente robó mercancía de Walgreens por valor de 230 dólares y está acusado de hurto, eludir/evadir a la policía a pie y posesión de utensilios para el consumo de drogas.
La grabación de la cámara corporal que muestra la persecución de los agentes a caballo al sospechoso en su totalidad se publicó en la página de Facebook de APD.
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