«Antes de morir, necesito saber qué hice mal para sufrir así … Tomé dinero del bolsillo de mi padre. Mentí a la gente …» Un día de noviembre de 2019, Kim Gyeongil, de 67 años, caminaba solo por una calle de Seúl, cansado y melancólico, en desacuerdo con el bullicioso ambiente que le rodeaba.
Aturdido, Kim se movía con pasos pesados mientras los acontecimientos del pasado se arremolinaban en su mente como nubes. El que fuera un famoso disc jockey y productor de MBC (Munhwa Broadcasting Corporation), una popular cadena de televisión surcoreana, se había visto colmado de elogios y gloria cuando sus programas se convirtieron en los programas estrella de MBC.
Sin embargo, su vida tocó fondo cuando dejó la cadena de televisión a los 55 años, después de 30 años. Tras una serie de fracasos empresariales, la pérdida de su fortuna y el consiguiente estrés mental extremo, sufrió depresión, ataques de pánico, hipertensión y diabetes en 2017.
También le colocaron un marcapasos por anomalías cardiovasculares. Desde entonces, insomnio, palpitaciones, mareos, fatiga, irritabilidad, pánico, incapacidad para concentrarse y otros síntomas le acompañan a diario.
Tomar puñados de pastillas cada día no le aliviaba. Al cabo de dos años, estaba cansado de vivir a base de medicamentos. Acosado por pensamientos suicidas, Kim empezó a acumular somníferos cada día. Ese día tomó 50.
«Dé un paseo, es bueno para su salud», le aconsejó el médico. Ese día, Kim sintió la extraña necesidad de dar un paseo y, sin darse cuenta, pasó por delante de un tablón de anuncios sobre Falun Gong.
«¿Falun Gong? Había oído que Falun Gong era una buena forma de qigong, que es una manera de lograr la salud física y espiritual a través de la meditación y la cultivación espiritual».
«Cuando vi Falun Gong, me aferré a mi última esperanza y quise probarlo», dijo Kim recordando la escena.
Mientras caminaba hacia su casa, se dio cuenta de que el cielo sombrío se había vuelto claro y sin nubes.
Una vez en casa, abrió el libro que había recibido de un practicante de Falun Gong, Zhuan Falun (el texto principal de Falun Gong). Esa noche, leyó de una sentada todo el libro de 472 páginas, escrito en coreano.
«Estaba tan abrumado que lloré varias veces mientras leía el libro», dijo. «He sido guionista de televisión, planificador de música comercial y presentador de radio durante 30 años, especializado en escritura y composición musical, pero es la primera vez que veo un libro así».
«No es un libro corriente que enseña conocimientos. Siento que es una guía para mi vida, no solo para enseñarme las verdades de este mundo, sino también para abrirme un mundo desconocido».
Entonces visitó el sitio web de Falun Gong y empezó a aprender los ejercicios con los videos de enseñanza.
«Cuando aprendí el segundo ejercicio, hay un movimiento en el que dos palmas de las manos se enfrentan a dos orejas. En ese momento, sentí calor en ambas palmas. La energía fluía de las palmas a las orejas y éstas también se calentaron y me dolieron ligeramente. Era muy potente. Me sorprendió. Parecía extraordinario», afirma.
En abril de 2020 empezó a practicar Falun Gong oficialmente. Al cabo de un mes, su sueño volvió a la normalidad.
En agosto, ocurrieron milagros. La mayoría de los síntomas de Kim desaparecieron: Ya no estaba deprimido ni irritable, y podía concentrarse. Antes le daba miedo tomar el transporte público debido a los ataques de pánico, pero ahora podía tomar autobuses. Ya no jadeaba al subir escaleras y su estómago se sentía cómodo.
«También dejé de beber, algo que había hecho durante más de 40 años», dice alegremente. «También dejé de tomar todas las medicinas. Llegué a pesar siete kilos menos que hace cuatro meses, y estoy otra vez como un veinteañero».
En un chequeo rutinario en agosto, todo era normal para Kim, excepto la tensión arterial y el índice glucémico ligeramente elevados.
«Parecía increíble que una enfermera que conocía mi estado me preguntara qué me pasaba».
Gracias a la práctica de Falun Gong, no solo ha mejorado la salud de Kim, sino que su personalidad y su visión de la vida también han cambiado radicalmente.
«Mi familia fue la primera en sentir el cambio. Todos dijeron que mi personalidad había mejorado mucho. Ya no estoy irritable. Me he vuelto amable y considerado con los demás».
Kim practica Falun Gong desde hace casi tres años.
«He practicado mucho», dice. «Desde hace dos años, todos mis exámenes médicos periódicos han arrojado resultados normales. Ahora estoy sano y siento que me he transformado. Todos los que me rodean dicen que he rejuvenecido y sonrío más, que parezco muy cómodo y feliz».
Está científicamente demostrado que el qigong es eficaz en el tratamiento de muchas enfermedades.
El qigong reduce la depresión
Un metaanálisis de 2018 de 15 ensayos controlados aleatorizados encontró que los ejercicios de meditación, incluido el qigong, ayudaron a reducir significativamente los síntomas del trastorno depresivo.
Según el estudio, la meditación es fundamental para los efectos terapéuticos del tratamiento de la depresión, ya que puede constituir una alternativa útil a los principales tratamientos actuales de la depresión: la medicación y la psicoterapia. Dado que los ejercicios de meditación son seguros y están fácilmente disponibles, los médicos pueden considerar la posibilidad de recomendar ejercicios de meditación para el tratamiento de los síntomas en esta población.
Una revisión sistemática de 2021 de 18 ensayos controlados aleatorizados sobre los beneficios del qigong para la salud de las mujeres, concluyó que el qigong es seguro, factible y beneficioso para las mujeres en general, las mujeres maltratadas y las mujeres con problemas de salud. Resultó especialmente adecuado para los síntomas depresivos (63 por ciento de los sujetos), la calidad de vida (43 por ciento) y la fatiga (29 por ciento).
El qigong mejora la función cognitiva de los ancianos
Un estudio realizado en 2020 examinó el efecto del ejercicio de qigong en la función cognitiva de 74 personas mayores de 60 años en China que corrían el riesgo de sufrir deterioro cognitivo. El resultado demostró que un año de ejercicio de qigong era significativamente mejor que un año de estiramientos, no solo para prevenir la progresión del deterioro cognitivo, sino también para mejorar diversas funciones cognitivas.
El qigong reduce la presión arterial
Una revisión y metaanálisis de 2021 de siete ensayos controlados aleatorizados en los que participaron 370 personas demostró que el qigong puede reducir significativamente la presión arterial y puede utilizarse como terapia complementaria para tratar la hipertensión más compleja. Los resultados se publicaron en BMC Complementary Medicine and Therapies.
El qigong previene el estrés personal
Un amplio estudio controlado aleatorizado realizado en 2020 demostró que la práctica del qigong puede reducir los niveles de estrés, hipertensión, depresión y ansiedad, así como mejorar los sistemas cardiovascular y respiratorio, la función inmunitaria, la calidad del sueño y la función cognitiva.
Pruebas empíricas sustanciales demuestran que el qigong proporciona un medio eficaz de prevención del estrés personal, que los individuos pueden utilizar para recuperarse del estrés y de la actividad continuada, restablecer la homeostasis y el equilibrio psicosomático, así como mejorar su salud física y mental.
Los milagrosos beneficios para la salud de Falun Gong
Falun Gong fue presentado al público en 1992 por Li Hongzhi. Debido a sus efectos milagrosos para mejorar la salud y la moral de los practicantes, había atraído a cientos de millones de personas en China en el momento en que el Partido Comunista Chino persiguió a los practicantes en 1999.
En mayo de 1998, la Administración General del Deporte de China realizó una encuesta por muestreo entre los practicantes de Falun Gong. De los 12,553 practicantes de Falun Gong encuestados, 10,475, o el 83.4 por ciento, sufrían de más de una enfermedad antes de la práctica. Después de practicar durante un periodo de dos a tres meses a dos a tres años, la condición física de estos practicantes mejoró significativamente, con una tasa de recuperación y rehabilitación básica del 77.5 por ciento. Junto con el 20.4 por ciento de los que habían mejorado, la tasa de eficacia total era del 97.9 por ciento.
Según el informe de una encuesta realizada en 2002 por el profesor asociado Dr. Hu Yu-Whuei, del Departamento de Economía de la Universidad Nacional de Taiwán, el 70 por ciento de los practicantes de Falun Gong utilizaron solo una tarjeta de seguro médico un año después de practicar, casi la mitad de la tasa anterior a la práctica. La encuesta también mostró que Falun Gong tuvo un efecto significativo en el abandono de los malos hábitos, con tasas de abandono del tabaco, la bebida y el juego del 81.77 y 85 por ciento, respectivamente.
Falun Gong también tuvo un efecto significativo en el bienestar psicológico y emocional, y la satisfacción de los practicantes con su estado de salud aumentó significativamente del 24 por ciento antes de la práctica al 78 por ciento. Su satisfacción con su capacidad para realizar las actividades diarias aumentó del 36 por ciento antes de la práctica al 81 por ciento. Además, el 33 por ciento de los encuestados afirmó que tendía a sentirse nervioso o deprimido antes de practicar Falun Gong, mientras que menos del tres por ciento se sentía así después de practicarlo.
Esta encuesta de investigación académica se realizó en un muestreo por conglomerados de practicantes de Falun Gong en Taiwán. Se recogieron 1182 cuestionarios válidos de una quinta parte de las zonas rurales y urbanas, y las conclusiones se extrajeron mediante análisis estadístico.
Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de The Epoch Times.
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