En solo unos pocos meses, un chico de 17 años llamado Haven saldrá del sistema de hogares de crianza y se verá forzado a valerse por sí mismo. Ahora busca con desesperación una familia que pueda llamar suya.
El adolescente que vive en Oklahoma City se encuentra bajo la custodia del Departamento de Servicios Humanos de Oklahoma desde que tenía 12 años. Después de vivir en un refugio durante los últimos cinco años, dice que esta perdiendo la esperanza de que una familia lo adopte. Con su próximo cumpleaños número 18 en octubre de 2019, el tiempo se agota para Haven.
Haven dice que la vida en el refugio se siente limitada y frustrante.
«Se hace viejo», dijo a KFOR Oklahoma’s News Channel 4. «Solo estar ahí. No poder salir cuando yo quiera».
En la actualidad se encuentra allí con otros cuatro chicos que se encuentran en situaciones similares.
Obtener una licencia de conducir, agrega, le ayudaría mucho a sentirse más seguro e independiente.
Y como muchos adolescentes de su edad, también le encantan los videojuegos (Minecraft en particular) y pasar el rato con sus amigos.
Pero además de todo esto, la verdadera pasión de Haven es unirse algún día a las fuerzas armadas, ya que eso implicaría «formar parte de algo más grande que yo mismo», y que le permitiría «viajar por el mundo». Esa opción podría ser su enfoque principal si no encuentra a la familia que busca con desesperación. Ya tiene un pie en la puerta como oficial en entrenamiento.
«Estoy involucrado con el Cuerpo de Entrenamiento de Oficiales Subalternos de la Reserva, también conocido como AKA JROTC», explicó.
Sin embargo, este joven adolescente todavía comprende la importancia de tener padres amorosos que le sirvan de modelo y que puedan guiarlo y apoyarlo en sus primeros pasos hacia la adultez. Parece entender lo que se está perdiendo, quizás mejor que algunos de nosotros que siempre lo hemos tenido.
«Así puedes tener a alguien que te ayude, que este ahí para ti si necesitas ayuda», dijo a la KFOR. «No es solo hacer las cosas a ciegas, porque así es como te involucras en las drogas y cosas malas como esas».
En su actual y urgente situación, añade que no es quisquilloso con el tipo de familia que le gustaría, y en este momento dice que está buscando a «cualquiera que me acepte».
«En realidad no me importa. Siempre y cuando sea una familia que muestre amor por mí y esté ahí para mí», dijo Haven.
Para más información o si está considerando adoptar a Haven, llame a Tom Peterson al (405) 325 9398.
Conoce otra historia notable de 7 hermanos que encontraron juntos un hogar adoptivo después de años de negligencia y abuso:
Pareja de Arkansas adopta 7 hermanos y ellos dicen que ha sido «la mejor Navidad de su vida»
Terri y Michael Hawthorn pensaron que no estaban listos para adoptar un niño, y mucho menos siete. Sin embargo, todo eso cambió en ese año, y un 3 de diciembre de 2018, después de una larga batalla judicial, un juez finalizó los papeles de adopción de los siete hermanos muy sonrientes.
Hace unos años, la pareja, de Arkansas, decidió tratar de adoptar a los niños que necesitaban hogares del sistema de hogares de crianza del estado, una decisión que con el tiempo se convirtió en un compromiso mucho mayor.
«Nuestras primeras palabras fueron:`Vale, lo haremos durante un par de años, pero no adoptaremos'», dijo Terri, quien, junto con Michael, ya eran padres de una hija llamada Micah.
Eventualmente, aunque, los Hawthorns cambiaron de opinión, y el pasado abril, decidieron adoptar a dos niñas: las hermanas Korgen y Haizlee. Este no era aún el final de su misión de cuidar a niños necesitados; las dos niñas también tenían otros cinco hermanos que todavía estaban en el sistema de hogares de crianza, y los Hawthorns estaban decididos a llevarlos a su hogar también.
Antes de su adopción, los siete hermanos y hermanas pasaron por mucho, cambiando de casa y de escuela durante tres años en el sistema estatal. Según sus propias palabras, a menudo se quedaban sin comida ni cama para dormir.
«Las únicas veces que teníamos para comer era cuando nuestros vecinos nos daban una bolsa de papas fritas», dijo uno de los cinco hermanos, Kyndal, que por fin se unió a la familia Hawthorn en diciembre. «No teníamos un abrelatas, y nos daban las latas que no sabíamos como abrir. Así que a veces simplemente no comíamos».
Pero el proceso de adopción no fue del todo fácil, ya que Terri y Michael lucharon durante meses antes de que la corte al fin aprobara los papeles. Sin embargo, se convirtió en «el mejor regalo de Navidad» que los hermanos podían pedir, cuando finalmente se dieron cuenta que tenían un hogar con dos padres cariñosos que los cuidaban.
Cuando llegué aquí estaba como, «Dios mío, tenemos nuestras propias camas», dijo Layna, una de las hermanas que recientemente se unió a la familia Hawthorn.
«Esta es la mejor Navidad que podría tener, sabiendo que tengo una mamá y un papá», agregó Kyndal.
Micah, que es mayor que sus hermanos y hermanas recién adoptados, tomó varias fotografías memorables del gran día, cuando se pararon frente al estrado en el juzgado y en el porche delantero de su nueva casa.
«Son una bendición», dijo Terri. «Todos los días estos niños se despiertan, se ríen, están felices, y ves las sonrisas en sus caras, eso es lo que hace que esto valga la pena».
No hay mejor historia para mostrarnos lo afortunados que somos al tener miembros de nuestra familia que nos aman, pues no todos son tan afortunados. Qué mejor momento que la temporada navideña para compartir tiempo con ellos y mostrar aprecio hacia sus seres queridos. ¡Este fue sin duda el caso del hogar Hawthorn esta Navidad!
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