La justicia es ciega, ¡al menos debería serlo! Sin embargo todos esperamos algún tipo de trato preferencial, especialmente si nuestros parientes son los que nos juzgan. Eso pareciera algo bastante natural y razonable, aunque no en todos lo casos.
Un padre de Rhode Island, Nueva Inglaterra, se presentó en la corte por una infracción de estacionamiento pero resultó que su propio hijo fue más duro que el juez que presidía su caso.
La respuesta del niño, dura pero justa, provocó que toda la sala de audiencias irrumpiera en risas y obligó al juez a buscar una solución indulgente que hizo que todos, especialmente el niño, sonrieran al final.
El juez Frank Caprio es conocido por dictar sentencias creativas, es juez en ejercicio en el Tribunal Municipal de Rhode Island desde 1985. Aunque su juzgado parezca normal, sus sesiones son un tanto fuera de lo común.
A través de los años, los afortunados ciudadanos cuyos casos fueron presididos por el juez Caprio, han llegado a respetar su toque personal y sus técnicas creativas y humanas de sentencia. Muchas veces pide a los hijos de los acusados que suban al tribunal, participen en el juicio y lo aconsejen.
La bondad, indulgencia y prácticas poco ortodoxas del juez Caprio se expuso plenamente en un caso judicial que no se olvidará por un buen tiempo.
A principios de 2017 el juez Caprio pidió a Jacob de cinco años, hijo de un hombre acusado por mal estacionamiento, que lo acompañara al tribunal. El acusado se encontraba ante la posibilidad de ser sancionado con una multa de entre 30 y 90 dólares, o a la desestimación de la misma.
Así que mientras Jacob escuchaba las posibles opciones, seguidamente y como era su estilo, Caprio le preguntó al niño qué debía hacer.
«Tengo tres opciones», explicó el juez a Jacob, según USA Today. «Puedo multarlo con USD 90, puedo cobrarle USD 30, o no cobrarle nada. ¿Qué crees que debería hacer?».
Jacob pensó por un momento… ¿Crees que este chico exoneraría a su padre de cualquier maldad? ¡Este no fue el caso!
«USD 30», contestó Jacob, (…) haciendo estallar en risas a los presentes en la corte por la respuesta completamente inesperada.
A pesar de la recomendación de Jacob, el juez tuvo otra idea y reformuló la aplicación de la sentencia.
Caprio le preguntó a Jacob si había desayunado, y el niño contestó que «no», entonces el juez continuó su diálogo con el niño comentándole su nueva propuesta:
«Supón que hago un trato con tu padre», le dijo amablemente el juez a Jacob: «Si te lleva a desayunar, yo descarto la multa».
El pequeño aceptó encantado la propuesta y su padre también.
Pero resulta que Caprio no había terminado con la sugerencia de cómo debía implementar la multa y tenía una recomendación para el pequeño ya que su padre iba a ahorrar tanto dinero.
Judge Allows a Little Boy to Choose His Father’s Punishment in Court For a Parking Violation https://t.co/0myW3xhbWH pic.twitter.com/IAeelpQvnd
— Laughing Squid (@LaughingSquid) 31 de julio de 2017
Caprio enfatizó a Jacob que no tenía que hacerle fácil la cosa a su padre: «Quiero que pidas muchas cosas», siguió el juez. «Porque está ahorrando 30 dólares. ¿Es un buen trato?».
A Jacob le pareció bien, y contestó: «sí, porque me encanta el tocino». …Y realmente, ¿a quién no?
¡Mira en el siguiente video a este niño dictando la sentencia a su padre!
Esto pasa cuando el papá cuida a los hijos…
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.