La mujer en este conmovedor video demuestra que se necesita más que biología para ser madre; requiere amor, cuidado y compromiso.
Cuando Karla Robinson se casó en 1989, se convirtió en madrastra de una niña de 3 años llamada Jessi Coleman.
Durante ese tiempo, observó que Jessi tenía muchas marcas extrañas en su cuerpo cada vez que regresaba de las visitas en la casa de su madre biológica.
Aunque Jessi no es su hija biológica, Karla la trata como si lo fuera, ya que cree que su hijastra «nació en su corazón».
Queriendo adoptar oficialmente a Jessi, Karla escribió una emotiva carta al juez Russ Vaclaw del juzgado del condado de Washington en Bartlesville, Oklahoma, el 15 de mayo. Y al día siguiente, el juez Vaclaw convocó a Karla y Jessi a su tribunal.
Ajena a lo que está pasando, Jessi escucha atentamente al juez Vaclaw.
«Siempre me sorprende cómo tanta gente ama a un niño, que no necesariamente nació de ellos, de la misma manera en que un niño puede ser amado», dice el juez Vaclaw.
Cuando Jessi se da cuenta de que su madrastra la está adoptando, rompe en llanto.
Ambas mujeres lloran porque se las pronuncian legalmente como madre e hija después de 29 años.
«No tenía que ser mi sangre para ser mi hija», dijo Karla a la agencia de noticias Caters .
Mira el video a continuación:
Pide que su padrastro la adopte
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