Muchos escritores de salud hacen que el tema del azúcar sea tan complicado que nadie puede entenderlo. Es muy simple. El azúcar… es azúcar, es azúcar. Tu cuerpo trata el azúcar de una manzana, de la misma manera que trata a todas las demás fuentes de azúcar. La diferencia es que una manzana también contiene fibras que disminuyen el aumento de azúcar en la sangre después de comerla.
Algunas personas creen que la miel es más saludable que el azúcar. Nos dicen que la miel es una fuente rápida de energía y una rica fuente de minerales y, que encima, engorda menos. Todas estas afirmaciones son falsas.
En lo que al cuerpo se refiere, no hay diferencia entre la miel y el azúcar de mesa. La miel contiene dos azúcares simples llamados glucosa y fructosa. El azúcar de mesa tiene las mismas dos azúcares, solo que ellas están unidas para formar un doble azúcar llamado sacarosa. En tu cuerpo, ellas terminan exactamente de la misma manera. Una vez que la sacarosa, el azúcar doble llega al intestino, se desdobla en: glucosa y fructosa.
La miel y el azúcar de mesa son procesadas en tu cuerpo de la misma manera, y la miel no puede ser una fuente más rápida de energía. Una propaganda para la miel afirma que “onza por onza, la miel tiene menos calorías que el azúcar refinada”.
Esto es cierto pero engañoso, porque la miel contiene agua que no tiene calorías, y el azúcar refinada tampoco. Una cucharada de azúcar de mesa tiene 64 calorías, mientras que una cucharada de miel contiene agua, de manera que solo tiene 46 calorías, pero las dos engordan por igual. Tu añades endulzantes por el sabor, no por una medida cuidadosa, y vas a utilizar el mismo número de calorías para obtener el mismo grado de dulzura al utilizar azúcar o miel.
Es ridículo decir que la miel es una excelente fuente de minerales como el hierro y el calcio, mientras que el azúcar no. Para satisfacer tus necesidades de hierro, tendrías que tomar 10 tazas de miel al día, y para calcio, deberías tomar 40 tazas.
Usando el mismo razonamiento, tu cuerpo maneja al azúcar blanca granulada de mesa, de la misma manera que al azúcar morena, azúcar turbinada, jarabe de arce, jarabe de maíz y cualquier otro azúcar. Azúcar morena es un poco menos refinada que el azúcar blanco, pero en importancia nutricional no tiene diferencia.
No hace ninguna diferencia en tu cuerpo si el azúcar extraído viene de la remolacha, caña de azúcar, flores, manzanas, uvas, dátiles o árboles de arce. Si eres diabético, almacenas grasa principalmente en el abdomen, tiene niveles de triglicéridos elevados en la sangre, tiene un nivel bajo del buen colesterol HDL; y si estás tratando de perder peso, debes limitar los carbohidratos refinados e incluir todos los azúcares que han sido extraídos de sus fuentes vegetales.
Este artículo fue publicado originalmente en www.drmirkin.com.
Las opiniones expresadas en este artículo son opiniones del autor/s y no necesariamente reflejan los puntos de vista de La Gran Época.
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