Ella era una joven izquierdista que creía que todos los republicanos eran «malas personas», pero después que Donald Trump fue electo en 2016, Ashley Smith abandonó el barco progresista y sumó a una nueva persona a las filas de la derecha. Se convirtió en influencer de redes sociales, donde comparte sus puntos de vista conservadores recién descubiertos con marcada precisión e ingenio.
Smith, de 31 años, ahora produce videos breves y contundentes sobre su fascinante, aunque doloroso, éxodo de la izquierda para tener “una visión mucho más completa de las realidades del mundo”.
También se divierte bastante desmantelando posociones progresistas que no pueden resistir ante la lógica, echando abajo el castillo de naipes de la izquierda.
Aquí tenemos una pizca de ese contenido que desmantela esta mujer oriunda del sur de Michigan:
“La gente me pregunta todo el tiempo por qué la gente de izquierda está enfadada. Ya sabes, viniendo de la izquierda, supongo que soy una fuente bastante buena”, dijo Smith.
“Uno: disonancia cognitiva que, por si no sabes, es la incomodidad que uno siente por tener pensamientos o creencias contradictorias.
“Además, cada tema de la izquierda se convierte en un tema cargado de emociones. Todo es una forma de algún tipo de injusticia. Y si realmente crees que están ocurriendo todos estos tipos de injusticia en el mundo, te enojarás por eso”.
Cómo empezó: mentalidad de víctima, lágrimas de izquierda y Trump
Su corazón comenzó en el lugar correcto. Fue adoptada por miembros de su familia después de la muerte de sus padres. Smith creció sientiéndose «realmente pobre» y llegó a creer que «todo el mundo es víctima de sus circunstancias». Después de la muerte de su padre adoptivo, ella y su madre perdieron su casa y “prácticamente todo”. La idea del socialismo le empezó a sonar bastante bien. A sus veintitantos años, Smith creía en la compasión. Quería que cuidaran a los demás como nadie lo hizo con ella.
Las primeras fracturas en la cosmovisión de Smith aparecieron después de que su esposo votara por Trump en 2016. “Me lo dijo después de que les supieron los resultados de las elecciones, y fue porque yo estaba como histérica”, dijo a The Epoch Times. “Cuando finalmente lo declararon, simplemente me derrumbé”. Aunque no estaba tan a la izquierda como ella, también había hecho un cambio político. Ahora quería tener conversaciones productivas con su esposa. “Realmente sentí que cada vez que se demostraba que estaba equivocada sobre algo, me quitaban la alfombra”, dijo. “Pasé por este proceso en el que toda mi visión del mundo, esencialmente, se estaba desmoronando a mi alrededor”.
(Cortesía de Ashley)
Años más tarde, en un video, Smith respondió a la pregunta de un internauta: ¿Por qué no «rompes con tu novio que tiene una opinión diferente»? Smith respondió: “¿Sabías que las escuelas de sectas alientan a sus miembros a exiliar a las personas de su vida si no están de acuerdo con lo que dicen? Así solo estás promoviendo cámaras de eco”.
“¿Alguna vez pensaste que a veces las personas simplemente se aman y no quieren que la política se interponga en su relación?
“¿Sabes cuál es el verdadero miedo? El miedo real es que empiezas a tener conversaciones y luego empiezas a cuestionar”.
Eso podría llevar a hacer una investigación, lo que podría llevar a que uno cambie de opinión.
“Y si hay algo que la izquierda no quiere que hagas, es que cambies de opinión”, agregó.
En sus primeros años, cada vez que Smith se encontraba con ideas de izquierda, a menudo pensaba: “Oh, eso tiene sentido. Sí, solo voy a seguir eso”, pero nunca se detuvo para sondear más profundamente al nivel granular para inspeccionar la verdad por sí misma. Ahora, con su marido, se obligó a escuchar. “Realmente comencé a exponerme a otras perspectivas”, dijo. Mencionó voces que alguna vez despreció, como Ben Shapiro. “Pensé que eran malas personas, pero me obligué a escuchar para entender realmente lo que se decía”.
Una de las grandes y finas fracturas que se desgarró por completo para Smith se produjo cuando escuchó un debate sobre los derechos de la Segunda Enmienda. Una vez fue una «gran defensora» de la reforma de armas, pero comenzó a investigar astutamente hechos y afirmaciones sobre el asunto ella misma y tuvo una epifanía. “La mayoría de las muertes por armas de fuego en realidad son suicidios”, dijo. Las estadísticas revelaron que en 2021 hubo 26,328 suicidios relacionados con armas de fuego en Estados Unidos, lo que representa el 54 % de las muertes del país causadas por armas de fuego. Por el contrario, el mismo año hubo 20,958 asesinatos relacionados con armas de fuego, que comprenden el 43% del total.
Luego estaba la línea de falla notoria que superpone lo que ella ahora llama “compasión con armas”, relacionada con el tema de la inmigración. Durante sus años de izquierda, recuerda Smith, el tema candente del día era la guerra en Siria, que provocó que miles de refugiados inundaran Europa o buscaran emigrar a los Estados Unidos. Ella estaba totalmente a favor entonces, pero no ahora. “Existe el potencial para los delincuentes, existe el potencial para una gran cantidad de trata de personas y contrabando de drogas”, dijo. “No pensaba en nada de eso. Solo pensaba: ‘Bueno, pobre gente, están tratando de escapar y venir aquí en busca de una vida mejor’”.
Para la entonces izquierdista Smith, era solo otra reacción instintiva.
A quién apoya: ¿Trump o DeSantis?
En cuanto a los acontecimientos mundiales actuales, Smith dice que no apoya la participación de Estados Unidos en la guerra de Ucrania. Dice que gran parte de nuestro dinero se está «desperdiciando» y que podría usarse mucho mejor aquí. Podría ser para nuestros veteranos o proteger nuestra frontera.
En cuanto a la división eterna sobre política y elecciones, le preguntamos a Smith —que no mantiene lealtad a ningún partido político y se identifica como una «conservadora independiente»— si apoya a Donald Trump o a Ron DeSantis, candidatos presidenciales del Partido Republicano. Respondió que le gusta el que tiene «decoro», que «predica con el ejemplo». “Creo que DeSantis ha mostrado un buen historial en Florida”, dijo. “Creo que es un poco menos divisivo y creo que Trump es bastante egoísta. Nunca me ha gustado la forma en que habla.
“Votaría por [Trump para presidente si ganara la nominación republicana]. Solo que no sería mi preferido”, dijo.
La exizquierdista tiene toda la complejidad y los matices de quien no finge. Sin embargo, con todos los farsantes en TikTok, hay muchas razones para ser escépticos. Smith tiene su cuota de detractores. Un internauta la acusó de mentir acerca de no ser cristiana para obtener “influencia en Internet”.
Con su estilo quirúrgico habitual, desmanteló la crítica así:
“Realmente no te culpo, porque mucha gente miente en internet para llamar la atención”, dijo en un video. “Pero mi primer pensamiento sería: no debería ser muy devota en ningún tipo de fe o religión si mintiera sobre eso y lo negara para llamar la atención en línea”.
Una vez que se describió a sí misma como «atea militante». Pero desde que hizo su cambio político, Smith ha renovado su postura religiosa.
“Solo en los últimos dos años llegué a un lugar mucho más neutral y digno que soy ‘agnóstica’, porque creo que existe la posibilidad de que algo gobierne el universo; pero qué es eso, no lo sé”.
“He conocido a un buen número de conservadores agnósticos. Ellos existen”.
El nombre «Smith» es un seudónimo. Pidió que no se publicara su apellido por razones de seguridad. Para alguien que está desarmando la máquina de guerra izquierdista desde adentro, el doxing es un problema real con riesgos. Sin embargo, Smith, madre de dos hijos, ha compartido fotos de ella y su familia.
Es una defensora de la familia nuclear y los roles de género tradicionales de marido y mujer. “No es posible para todos ni para todas las familias, pero creo que produce los mejores resultados para los niños, para las familias en general”, dijo. “Soy mamá y ama de casa… Me encanta ese arreglo, y creo que a mis hijos les va mucho mejor estando conmigo todo el tiempo para poder atender sus necesidades”.
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