Madre decide tener un hijo con labio hendido y ahora es un joven de 18 años, sano y feliz

Por SWNS
03 de junio de 2024 4:06 PM Actualizado: 03 de junio de 2024 4:06 PM

Una madre llamada «cruel» por elegir la vida para su hijo, que tenía un labio leporino grave y poco común, dice con orgullo que nunca lo reprimió. Ahora tiene 18 años y está prosperando.

Zac Coates nació con labio y paladar hendido Tessier —una afección causada por los tejidos faciales que no se unen adecuadamente durante el desarrollo.

Coates nació con labio y paladar hendido. (SWNS)

Esto dejó Coates con una grave desfiguración facial, le faltaba un párpado y no veía con su ojo derecho.

Su madre, Joanne Lythgoe-Frank, ahora de 58 años, originaria de Manchester, vivía en Chipre cuando quedó embarazada de Coates.

A las 22 semanas de gestación, a la Sra. Lythgoe-Frank le dijeron que su hijo tenía una anomalía de hendidura. Los médicos le preguntaron si quería interrumpir su embarazo. Sin embargo, para Lythgoe-Frank, esa «nunca fue una opción».

Coates con 1 día de nacido. (SWNS)

A las 24 semanas comenzó a sufrir de presión arterial alta y desarrolló una preeclampsia severa.

La Sra. Lythgoe-Frank fue llevada de urgencia para una cesárea de emergencia y  Coates nació el 24 de febrero de 2006, pesando 1 libra y 5 onzas.

«Recuerdo que me dijeron: ‘Tu pequeño no va a sobrevivir, tiene problemas. Quizá sea mejor que no sobreviva'», dijo Lythgoe-Frank.

Horas después de dar a luz, la llevaron a ver a su bebé.

«La cara de Zac estaba toda vendada», dijo. «Se consideraba algo que se esconde en Chipre».

(SWNS)

Le dijeron que Coates tenía un 20 por ciento de posibilidades de sobrevivir y no le permitieron verlo bien hasta que logró llevarlo en avión al Reino Unido, dos semanas después.

Allí, Coates recibió un diagnóstico oficial y la Sra. Lythgoe-Frank pudo abrazarlo por primera vez.

«Mi reacción inicial fue de sorpresa por la magnitud de la enfermedad», dijo. «Fue diferente de lo que esperaba —mucho más grave».

Cuando Lythgoe-Frank lo abrazó por primera vez, su instinto le dijo que estaba a punto de morir.

Coates fue dado de alta después de seis meses en el hospital, pero se sometió a su primera cirugía a los 9 meses para reparar su paladar y su labio.

Desde entonces, está yendo y viniendo al Reino Unido para recibir nuevas cirugías y poder reconstruir su rostro. En total, fué sometido a 16 intervenciones.

En su cirugía más reciente, en octubre de 2023, los médicos reconstruyeron su mejilla utilizando hueso de su cráneo.

Durante los 17 años que vivió en Chipre, su madre nunca lo escondió ni lo protegió de otras personas. En cambio, ella lo animó a convertirse en un hombre seguro de sí mismo.

(SWNS)

«Traté de inculcarle a Zac: ‘Eres diferente, pero debes aceptarlo y estar orgulloso de tus diferencias'», dijo.

Coates nunca ha sido intimidado y maneja las miradas y los comentarios de la mejor manera que puede. La primera vez que asistió a la escuela, no quería que sus padres estuvieran allí porque tenía confianza en sí mismo.

«Llegó a casa y dijo que una chica había llegado corriendo y lo había llamado monstruo», dijo Lythgoe-Frank. «Hizo una mueca, sopló una frambuesa y dijo: ‘Soy un monstruo'».

Después de este incidente, la madre habló con la escuela y sugirió un libro que podrían leer a sus compañeros para ayudarlos a comprender la condición de Zac.

«Nunca más tuvimos ningún problema después de eso», dijo.

Coates en su cumpleaños número 18. (SWNS)

«Siempre fui una persona bastante segura y extrovertida», dijo Coates. «Si te abrazas a ti mismo, eso te ayudará. Al descuidar quién eres, eso te entristece».

«Yo diría que la confianza no surge por sí sola. Lo ganas con el tiempo».

Una vez, cuando la familia entró en un restaurante local en Chipre, todos se quedaron en silencio al ver a Coates. Sin embargo, este tipo de cosas nunca desanimaron su espíritu.

El año pasado, el dúo de madre e hijo regresó al Reino Unido de forma permanente. La Sra. Lythgoe-Frank ahora trabaja a tiempo parcial como recepcionista y vive en Faringdon, Oxfordshire.

En abril de 2024, Coates acompañó a su madre al altar cuando se casó con su pareja de cinco años, James Frank, de 58 años, un ingeniero aeronáutico.

Actualmente, Zac está aprendiendo a tocar la guitarra porque aspira a estar en una banda de rock. Este joven de 18 años, feliz y sano, está deseando asistir a la universidad para estudiar producción cinematográfica en septiembre.

Con información de The Epoch Times.


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