La mamá de Dakota del Sur pensó que los cálculos renales eran la causa de su dolor cuando hizo el viaje al hospital a principios de este mes. No habría sido la primera vez. Fue un shock cuando la pareja se enteró de que estaban a punto de dar la bienvenida a algunos nuevos miembros a la familia.
Después de un par de años, Dannette y Austin Giltz corrieron al hospital en el pequeño pueblo de Sturgis.
«Comencé a tener dolores, me imaginé que eran cálculos renales porque ya había pasado por ellos antes», dijo Dannette.
Rápidamente se enteraron por el médico que no eran cálculos renales en absoluto; Dannette de hecho estaba entrando en trabajo de parto, no solo eso, sino que el médico les dijo que iba a tener gemelos.
Al menos eso es lo que pensaron al principio. Al dar a luz al segundo bebé, el médico se dio cuenta de que no eran todos ellos. Mientras Austin estaba ocupado en su mecedora tratando de encontrar nombres para los recién nacidos, el personal médico pidió otra manta.
«Su reacción es como, ‘disculpa, devuélvelo, no, me dijeron que tengo gemelos, no trillizos'», contó Dannette. «Ella estaba como, ‘no, hay tres bebés aquí, hay trillizos‘».
Pero no se podía volver a poner al bebé en su sitio. Los tres nuevos hermanos fueron bautizados como Blaze, Gypsy y Nikki. Lo que antes era una familia de 4 es ahora una familia de 7.
Sin embargo, lo más increíble de todo fue cómo Dannette había llegado a las 34 semanas de embarazo de alguna manera sin darse cuenta de ello, hasta el punto de entrar en labor de parto y dar a luz. Ella seguía conmocionada mientras daban la bienvenida a sus nuevos bebés al mundo.
«Nunca se ven trillizos concebidos naturalmente, y mucho menos pasar 34 semanas sin saberlo», dijo Dannette a WKYT en una entrevista. «Así que, todo el mundo está como si no pudiera creerlo. Todavía estamos en shock, créeme».
«Voy al médico pensando que me operarán de cálculos renales y terminaré dando a luz con una cesárea esa noche. Es una locura».
La carga adicional de tres bocas más que alimentar podría haber abrumado a los padres si no hubiera sido por el apoyo de su comunidad. Los Giltzes dicen que están agradecidos y que probablemente ningún otro lugar que no sea la Comunidad de Black Hills habría sido tan solidaria.
«Es increíble en un pueblo pequeño cuánta gente se reunirá para hacer cosas que no se esperan», dijo Dannette.
Por otro lado, lejos de ser una carga, la noticia llegó en respuesta a las oraciones de un miembro de la familia. Ronnie Giltz, el hijo de la pareja, había estado deseando tener algunos hermanos nuevos.
«Una vez vi una estrella fugaz y deseé un hermanito», dijo Ronnie, «y deseé como dos hermanas para mi hermanita porque ella siempre quiso una hermanita, yo sabía que este día siempre iba a llegar».
Ronnie obtuvo la respuesta a su deseo, y algo más.
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