Una mujer embarazada de Irak que había vivido guerras nunca había llorado tanto en toda su vida como cuando descubrió que su bebé en gestación nacería con un grave defecto cardíaco y necesitaría varias cirugías en los dos primeros años de su vida.
Sin embargo, ocurrió un milagro inesperado que detuvo sus lágrimas y dio esperanza, no solo a la familia, sino a muchos niños de todo el mundo.
Dowaa Saleh, también conocida como la Dra. Doaa AlSamrae, estaba embarazada de 20 semanas y vivía en Dubai cuando recibió el diagnóstico de que su bebé padecía una cardiopatía congénita llamada atresia pulmonar con el tabique ventricular intacto. Su bebé nacería con una enfermedad llamada síndrome de medio corazón.
«El médico me dijo en ese momento, que mi hija necesitaría muchas cirugías después de nacer para poder vivir con medio corazón, que se le retrasaría en la vida y que podríamos perderla, con una esperanza de vida que oscilaría en los 30 años», explicó a The Epoch Times Saleh, que también es defensora de la salud y de los derechos de las mujeres y los niños.
Los doctores le explicaron a Saleh y a su esposo, Ali, que lo más probable era que músculo cardíaco de su hija se atrofiara porque una de las válvulas que lleva la sangre al pulmón estaba bloqueada. Esto detuvo el crecimiento del lado derecho del corazón.
Al escuchar esto, Ali preguntó a los médicos si se podía hacer algo para evitarlo, pero la respuesta fue «no». Mientras tanto, en casa, la pareja trató de obtener más información sobre la enfermedad en Internet.
En una ocasión, mientras estaba sentada en casa, con los ojos cerrados por la desesperación, Saleh recordó de repente una escena de la serie dramática médica «Anatomía de Grey».
La Dra. Arizona Robbins y la Dra. DeLuca, dos personajes ficticios de la serie, habían operado a un bebé dentro del vientre materno.
Saleh, que siempre ha sido fan de «Anatomía de Grey», había visto el episodio meses antes.
«Esta escena fue muy especial», dijo Saleh. «Hacen cirugías para los bebés cuando la madre está embarazada. ¿Podrían hacer algo por mi bebé? Inmediatamente hice una búsqueda (…) y la cirugía estaba ahí para salvar a mi hija».
La nueva visión de Saleh la llevó a buscar inmediatamente un hospital que pudiera ayudarle. Como se trataba de un procedimiento relativamente nuevo y muy avanzado, había muy pocos lugares que pudieran ofrecer este tipo de intervención cardíaca fetal.
Sabiendo que disponían de muy poco tiempo, la pareja intentó contactar a diferentes hospitales en países de todo el mundo y pasaron dos largos días sin dormir hasta que obtuvieron una respuesta.
Finalmente, recibieron un correo electrónico positivo del Hospital Rainbow Babies and Children’s de Cleveland, Ohio.
El Dr. James Strainic, cardiólogo pediátrico y director de la Colaboración de Cardiopatías Congénitas del hospital, reconoció el llamado de una madre desesperada.
«No me conocía», dijo Selah. «Era alguien del otro lado del mundo, pero lo supo: se trata de una madre que quería salvar a su hija».
Antes de asegurar algo, Strainic coordinó con el Dr. Mohammed Souliman —un médico con el que había trabajado antes en su carrera— para obtener imágenes claras y evaluar el caso con detenimiento. Al poco tiempo, los padres recibieron un correo electrónico que los hizo saltar de alegría al confirmarles que podía realizar la operación.
«Fue uno de los mejores momentos de mi vida, porque al menos había esperanza», dijo Selah.
Tras la noticia, todo transcurrió bastante rápido. Selah tuvo que viajar a Estados Unidos a las pocas semanas para someterse a la rara intervención. Sin embargo, con el apoyo de su familia, la pareja realizó el casi imposible viaje de 7000 millas con su pequeña Leen a Estados Unidos.
En la mente de la pareja también le perduraba el temor de que había un 10 por ciento de probabilidad de que el bebé no sobreviviera a la operación.
«Fue muy duro viajar sola», dijo, «pero fuimos a por ello».
Sin embargo, al llegar a Estados Unidos, Strainic y su equipo les hicieron sentir como en familia.
«Se preocuparon por nuestra hija, por nuestros miedos en este momento tan difícil», dijo Selah. «Supongo que esa es la hermosa imagen de la humanidad, cómo somos iraquíes, ellos son estadounidenses, no nos conocemos, pero nos unimos para salvar a esta niña».
La cirugía fue extremadamente complicada y en ella participaron varios médicos, enfermeras y miembros del personal.
«El procedimiento al que se sometió [la niña en gestación] fue una ‘valvuloplastia pulmonar intrauterina'», dijo Strainic a The Epoch Times. «Es muy delicada. Con una aguja especial, pinchamos el abdomen de la Dra. Dowaa, cruzamos el espacio amniótico, atravesamos el pecho y llegamos al corazón del feto».
«Esto se hace con guía ecográfica y es mínimamente invasivo. Luego pasamos un catéter especial con un globo en el extremo a través de la aguja. Cuando el globo atraviesa la válvula atascada, lo inflamos. Esto fuerza la apertura de la válvula atascada y permite que la sangre avance y promueve el crecimiento del músculo de la cámara de bombeo derecha».
Saleh, que estaba observando todo en la pantalla de la ecografía, describió el momento en que se abrió la válvula cardíaca de su hija: «Cuando la abrieron, todo el equipo gritaba de felicidad y yo lloraba porque podía ver que la sangre de su corazón fluía correctamente y empezaba a crecer de nuevo».
Según Strainic, el trabajo en equipo y la comunicación fueron cruciales.
«Congenital Heart Collaborative es lo que nos permite hacer esto», dijo. «Se trata de una asociación entre dos hospitales separados por unos 320 kilómetros que trabajan juntos para ofrecer este valioso y raro procedimiento».
Cuando Saleh regresó a Dubai, la familia tuvo que afrontar nuevos retos. Stainic dijo a la pareja que existía la posibilidad de que, al final del embarazo, la conexión entre el corazón y los pulmones volviera a cerrarse.
Pero los médicos del Hospital Infantil Especializado Aljalila de Dubai se prepararon. Al segundo día del nacimiento de la hija de Saleh, realizaron una operación a corazón abierto para revertir con éxito el peor escenario de reconexión de la válvula.
La pareja llamó a su hija «Nadine», que significa «esperanza», ya que creen que su historia está generando conciencia sobre las cardiopatías congénitas y la posibilidad de una cirugía milagrosa en el vientre materno.
Poco después de nacer Nadine, la familia se trasladó a Canadá, donde descubrieron que tenía otra enfermedad que le afectaba los huesos de la cabeza. Fue necesario volver a operarla, esta vez en el Hospital Infantil de Montreal.
«El reto para los padres que se enfrentan a una cardiopatía congénita es que el niño puede tener otras afecciones», dijo Saleh. «Nuestra bebé milagro sobrevivió a tres cirugías hasta su primer cumpleaños, pero después de eso, estaba perfecta».
Saleh se refiere a Nadine, que ahora tiene 3 años, como un «milagro internacional», ya que héroes de la salud de Dubai, Estados Unidos y Canadá han hecho todo lo posible por ayudarla.
Actualmente, Saleh está estudiando comunicación sanitaria en la universidad de Ottawa y la familia está compartiendo la historia de Nadine en las redes sociales para crear conciencia sobre las cardiopatías congénitas y recaudar fondos para la investigación médica y las fundaciones que ofrecen tratamientos médicos a los bebés con problemas de corazón.
Trasla invitación para aparecer en Good Morning America, Saleh y Ali recibieron un mensaje de video sorpresa del actor italo-canadiense Giacomo Gianniotti, que interpreta al Dr. DeLuca en «Anatomía de Grey».
«Giacomo nos dijo que él y todo el reparto estaban muy contentos de conocer la historia de Nadine y cómo esa escena ayudó a salvar su vida», dijo Saleh. «Estamos muy agradecidos con el equipo de ‘Anatomía de Grey’. Siempre he sido una seguidora. Pero nunca esperé que mi vida se cruzara con ‘Anatomía de Grey’ así un día».
Strainic, también se sintió conmovido por la historia.
«Es increíble que las relaciones que establecemos al principio de nuestras vidas puedan dar lugar a que un paciente viaje más de 11,000 kilómetros para someterse a un procedimiento que le altere la vida», dijo Strainic. «Es algo increíble y asombroso».
«Siempre me asombra lo que una madre puede hacer para proteger a su hijo. La Dra. Dowaa hizo muchos sacrificios».
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