A medida que la pandemia del virus del PCCh continúa alterando el modo de vida normal, son los ancianos vulnerables los que están enfrentando la mayor parte del aislamiento y la incertidumbre.
Sin embargo, una mujer china de 74 años del condado de Montgomery, Maryland, recibió recientemente el reconocimiento y los honores del gobierno del condado por el servicio desinteresado que prestó a sus vecinos ancianos en medio de tiempos tan difíciles.
Ya sea ayudándolos con sus compras, ofreciéndoles un paseo al banco, o dándoles cortes de pelo gratis y la lista de sus actos de bondad continua…
Wang Chunrong, exdirectoa de una empresa de contabilidad en China, vive en un edificio de apartamentos en Gaithersburg donde también viven más de 100 personas mayores de diversos grupos étnicos, reportó Minghui.org.
Después de haber escapado de China para evitar la persecución religiosa, Wang llegó a Estados Unidos hace unos años. Supo muy bien cómo se sienten los inmigrantes ancianos al estar en un nuevo entorno mientras intentan aprender un nuevo idioma y desplazarse.
«Fui perseguida en China por practicar Falun Dafa, pero América me ha dado protección».
— WANG CHUNRONG
Sin embargo, la creencia de Wang en los valores universales de la práctica espiritual de Falun Dafa de ser veraz, compasiva y tolerante la impulsaron a cuidar bien de los necesitados en su nueva comunidad.
Falun Gong, o Falun Dafa, es un grupo espiritual perseguido en China, y en todos los medios de comunicación chinos se puede encontrar la propaganda difamatoria contra la práctica por parte del Partido Comunista Chino (PCCh).
Este antiguo sistema de cultivación de mente y cuerpo se hizo público en China en 1992. A finales de la década de 1990, más de 70 millones de personas practicaban sus ejercicios de movimiento lento y meditación en China. Sin embargo, siete años después de hacerse público, en julio de 1999, la práctica pacífica fue prohibida por el PCCh, por temor a que la base moral de la práctica espiritual fuera una amenaza a la ideología comunista de lucha de clases y odio. El PCCh inició la persecución a decenas de millones de practicantes de Falun Dafa, y desde entonces, una gran cantidad de practicantes han sido arrestados y torturados, y Wang era una de ellos.
Engañados por las invenciones y la cobertura mediática difamatoria en contra Falun Gong, algunos chinos del condado de Montgomery solían evitar a Wang al principio. Sin embargo, con el paso del tiempo, las bondadosas acciones de Wang se ganaron el respeto de sus vecinos y del personal administrativo del edificio de apartamentos.
El 11 de agosto de 2020, el Consejo del Condado de Montgomery le otorgó a Wang un certificado de reconocimiento por sus ocho años de contribuciones desinteresadas a la comunidad local.
«La Sra. Wang es una persona que sigue inspirando a otros», dijo el personal de gestión del apartamento donde reside Wang, según Minghui.org.
«Debido a que tiene un corazón tan bondadoso, Dios siempre la protegerá. Estamos muy contentos que viva aquí, como una buena persona, en nuestra comunidad. Estamos muy agradecidos por las cosas que ha hecho por nuestros residentes, especialmente en estos tiempos difíciles», añadió el empleado.
Encarcelada por su fe
Antes de huir de China, Wang era presidente de los contadores públicos certificados de Dalian Xincheng en la provincia de Liaoning y una contadora senior con 40 años de experiencia.
Wang dijo que la empresa llevaba a cabo sus negocios con honestidad, siguiendo los principios básicos de Falun Dafa de «Verdad, Benevolencia y Tolerancia».
Ella se negó a aceptar sobornos o falsificar cuentas. Como persona clave de la empresa, era muy respetada y sus clientes la tenían en alta estima.
En agosto de 2007, la policía saqueó la oficina de Wang y la arrestó a ella y a algunos de sus empleados. La policía alegó que Wang había prestado asistencia financiera a otros practicantes de Falun Dafa. Las autoridades se adelantaron a auditar su empresa durante unos tres meses y no encontraron pruebas de ninguna irregularidad, informó Minghui.
Sin embargo, Wang fue sentenciada a tres años y cuatro meses de prisión. El arresto llevó al cierre de su negocio, y más de 50 empleados se quedaron sin trabajo.
Wang no fue la única arrestada y sentenciada. Sus dos hermanas menores, quienes también eran exitosas en sus carreras, una como supervisora de enfermería y la otra como empresaria de un negocio de exportación e importación, fueron arrestadas y sentenciadas por practicar Falun Dafa. El marido de la hermana menor fue hostigado por la policía por su creencia en Falun Dafa y murió en 2002; lo encontraron inconsciente en su casa con una herida en la cabeza y con el gas encendido.
Después de su liberación, Wang seguía siendo vigilada por la policía. Al darse cuenta que la podrían arrestar de nuevo, no tuvo otra opción que huir. Wang y sus dos hermanas escaparon de China y ahora viven en Estados Unidos.
Valorando su libertad y respetando la oportunidad de poder vivir en una sociedad abierta, Wang y sus hermanas continúan hablando en nombre de los miles de practicantes de Falun Dafa que siguen detenidos y perseguidos en China por su fe.
Como Wang ha sido víctima de las brutalidades del régimen comunista, su fe en los principios universales de «ser verdadero, bueno y resistente» ha sido inquebrantable. Su comportamiento bondadoso y su persistencia inalterable le han otorgado la admiración de los integrantes de su comunidad.
Aunque Wang se alegró mucho al recibir el reconocimiento del gobierno del condado, también se alegró de contribuir al país que le ha dado la oportunidad de vivir en una sociedad libre.
«Fui perseguida en China por practicar Falun Dafa, pero América me ha dado protección», dijo.
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Una introducción a Falun Dafa
A través de sus principios Verdad, Benevolencia y Tolerancia, es posible mejorarse como persona y elevarse continuamente dentro del ambiente de la sociedad.
Más información http://es.falundafa.org
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