Amber Rachdi, de Portland, Oregon, tenía la cara de un ángel, pero debido a su obesidad mórbida, no podía valerse por sí misma, y mucho menos realizar tareas simples. Afortunadamente, se unió al programa de televisión «Mi vida de 270 kilos» del canal TLC y emprendió un viaje para salvar su propia vida.
Amber siempre había sido considerada obesa. Cuando tenía 5 años, pesaba aproximadamente 73 kg; cuando cumplió los 16 años, ya no podía caminar sin ayuda y tenía que usar una silla de ruedas para desplazarse.
Después de varios años lidiando con la ansiedad, la baja autoestima y de comer en exceso, Amber entró al programa de televisión «Mis 270 kilos de vida» («My 600-Lb Life») de TLC en 2014 y tomó la valiente decisión de someterse a una cirugía de bypass gástrico, y a hacer cambios drásticos en su estilo de vida.
Sabía que tenía que cambiar, o de lo contrario no viviría para ver su cumpleaños número 30. Además, sentía que no estaba a la altura de las expectativas de sus padres.
«Veo mucha lástima en la cara de mi mamá cuando me mira y no puedo soportarlo», dijo.
Cuando Amber se unió al reality de TLC, pesaba aproximadamente 298 kg. Debido a su peso, ni siquiera podía hacer tareas simples como pararse sobre sus piernas. Tenía que sentarse después de estar de pie solo media hora.
«Todo me duele, me duele la espalda, me duelen las canillas», dijo Amber en un vídeo filmado para el programa. «Estoy muy limitada en lo que puedo hacer y a dónde puedo ir. Me siento atrapada», agregó.
Desde que abandonó la universidad hace años, estuvo desempleada. Incapaz de moverse, estuvo confinada en su casa durante varios años en Troutdale, Oregon.
Salió de la casa solo cuando su entonces novio Rowdy la llevó al supermercado para comprar más comida. Navegaba por los pasillos del supermercado en una motocicleta.
Al llamarse a sí misma un «desagradable y asqueroso monstruo», Amber dependía de sus padres y de su novio para cocinar sus enormes porciones de comida cuatro o cinco veces al día para alimentar su estómago, que «nunca estaba lleno».
Ella dependía de la comida como una forma de combatir su ansiedad. «Tengo mucha ansiedad y estoy en paz cuando como», dijo. «Podía estar enferma, pero aún así comía algo si lo ponían delante mío», agregó.
Durante el programa, Amber se sometió a una cirugía de bypass gástrico para limitar la cantidad de alimentos que pudiera comer, así como a estrictas dietas y sesiones de terapia. Consiguió perder aproximadamente 121 kg.
«Tengo esperanza. Ahora el mundo está abierto para mí. Ya no soy Amber de una habitación, de una casa», dijo según MailOnline.
Mom bought me a new dress! Pardon the weird baggy arms and neck skin – it happens. pic.twitter.com/MSjZvxDW6A
— Amber Rachdi (@AmberRachdi) April 14, 2015
¡En los últimos años, ella perdió más de 180 kilos!
«Pasé mucho tiempo sin gustarme, así que estoy documentando momentos en los que me siento bonita. He perdido más de 180 kilos, estoy volviendo a aprender mi reflejo», publicó en Instagram, junto con sus selfies.
En su viaje hacia la buena salud, Amber se ganó el respeto de miles de personas en las redes sociales, que la apoyaron en su misión.
El resultado final de su viaje es inspirador. Con un cuerpo más delgado, combinado con su gran instinto para el estilo y su maestría en el maquillaje, se ha transformado totalmente y se ve nada menos que hermosa.
Amber rezuma confianza en sí misma y ahora es capaz de vivir de forma independiente, conduciendo y comprando por sí misma. Incluso se comprometió en 2016 con otro hombre, y ahora están casados.
Su determinación ha cambiado su salud justo a tiempo. Ella está feliz de compartir su historia para ayudar a inspirar a otros a comenzar su propio viaje hacia la salud.
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Incluso años después de que la historia de Amber salió al aire en TLC, ella continúa siendo una inspiración para otros.
En un post de Facebook, ofreció algunos consejos sabios a las personas que están luchando con problemas de salud relacionados con el peso.
«No puedo ofrecer consejos reales sobre dieta o ejercicio más allá de esto: hablen con su médico. Hablen con un nutricionista. Midan y hagan un seguimiento de lo que comen HONESTAMENTE durante al menos una semana antes. Encuentren un compañero responsable. Pidan ayuda. Ustedes merecen aliados tanto personales como profesionales», escribió.
Como dice un dicho chino: «Para pasar por el viaje más difícil, solo necesitamos dar un paso a la vez, pero debemos seguir avanzando». El primer paso siempre es el más difícil, ya sea cambiar tus hábitos alimenticios, hacer más ejercicio, dejar de fumar o cambiar algunos otros hábitos de salud destructivos. Sin embargo, el resultado final valdrá la pena.
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