Cuando los médicos le dijeron a una joven de Los Ángeles que moriría si no bajaba de peso, ella se tomó en serio la advertencia. Después de someterse a una operación para perder peso que le salvó la vida y cambiar a una alimentación más saludable, ha perdido 150 libras (aprox. 68 kg).
Durante muchos años, Natalie Vargas, de 31 años, luchó contra los problemas de obesidad, debido que se entregaba a su adicción a la comida y tampoco hacía ejercicio. A los 28 años, su peso se había descontrolado y llegó a pesar 310 libras (aprox. 140 kg) y a usar talla 4XL.
En ese momento, los médicos le advirtieron que estaba en riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 y que incluso podría morir joven si no tomaba las medidas necesarias para hacer cambios relevantes.
«Supe que necesitaba un reinicio en mi vida y lo necesitaba ya», dijo Natalie, que ahora tiene 31 años, a The Daily Mail.
Poco después la joven, que trabaja como técnica en fabricación de productos farmacéuticos, empezó a hacer ejercicio y cambió las hamburguesas, las papas fritas y los refrescos por el pollo a la plancha, las verduras y los batidos de proteínas, y asistió al gimnasio dos veces al día durante 18 meses consecutivos. El régimen le funcionó bien y perdió 50 libras (aprox. 23 kg).
Pero de repente, tuvo que interrumpir sus entrenamientos debido a una lesión de rodilla causada por la obesidad. En ese momento a Natalie le plantearon dos opciones para operarse: una operación de rodilla o una operación de pérdida de peso que le ayudaría a eliminar la presión que tenía sobre sus rodillas.
Natalie eligió someterse a una gastrectomía vertical en manga, una opción que esperaba que le ayudara a obtener los resultados que deseaba.
«Sabía que necesitaba un cambio en mi vida», explicó. «Tenía miedo: miedo a morir. Miedo a no perder suficiente peso y a que mi última esperanza de perder peso fuera un completo fracaso».
Como ella esperaba, después de someterse a la cirugía el 6 de septiembre de 2019, la vida de Natalie cambió completamente.
Durante la cirugía, le retiraron el 80 por ciento del estómago, un paso que redujo significativamente su apetito, y la ayudó a alcanzar su objetivo de perder peso de manera más eficiente. Después de la operación, Natalie logró perder 100 libras (aprox. 45 kg).
Ahora pesa 160 libras (aprox. 72 kg) y usa una talla 10. Solo consume 1200 calorías al día, comparado con las 3000 calorías que consumía en su peso máximo.
Al lograr el peso con el que siempre había soñado, dijo: «He superado mis propias expectativas y conseguí más de lo que jamás pensé que podría lograr en un año».
«Fue el reinicio que necesitaba para empezar de cero y aprender a comer de nuevo. Esto cambió mi vida», añadió.
Después de la increíble transformación, el interés de Natalie por las actividades al aire libre también ha aumentado y ahora sale a trotar.
«Antes odiaba las actividades al aire libre y ahora no puedo esperar a mi próxima aventura», dijo Natalie. «Me convertí en la mujer que deseaba ser cuando era más joven: la mujer saludable que corre en la playa».
También ha estado compartiendo su experiencia de transformación en Instagram, con la esperanza de inspirar a otros a perseguir sus propios objetivos de perder peso.
Para cualquiera que desee alcanzar sus objetivos, Natalie compartió algunas palabras sabias basadas en su propia experiencia.
«Deje de ser su peor crítico», escribió en Instagram, «no se compare con los demás y concéntrese en sus propios objetivos y logros».
Natalie añadió que es importante rodearse de «gente que lo quiera ver triunfar».
«Elimine a los que arrojan sombra sobre su éxito», dijo. «¡Lo mejor es conocer a mucha gente en el camino que lo empuje a ser la mejor versión de sí mismo!».
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