Mujer sorprende a su padre al usar el vestido de novia de su madre fallecida

Por Deborah George
02 de enero de 2025 5:15 PM Actualizado: 02 de enero de 2025 5:15 PM

Cuando Annie Grace Means, de 24 años, decidió llevar el vestido de novia de su difunta madre el día de su boda, se sintió conmovida por el fuerte impacto emocional que tuvo en sus amigos y familiares, especialmente en su querido padre.

La historia detrás de la decisión de Annie comenzó con una angustia en enero de 2022. Su madre, Carly Barnett Mixon, contrajo una infección de las vías respiratorias altas y los médicos la dejaron en coma para que su cuerpo descansara. Por desgracia, contrajo una cepa grave de COVID mientras estaba en coma y pronto falleció. Su esposo, Chad Mixon y sus hijas, Annie y Callie, lloraron su pérdida.

«Era mi mejor amiga», dijo Annie, originaria de Opp, Alabama, refiriéndose a su madre. «Éramos como dos gotas de agua».

Annie y su esposo, Brandon Means. El día de su boda lució el vestido de su difunta madre. (Cortesía de Maclin Photo & Film)
Los padres de Annie, Carly y Chad Mixon, el día de su boda. (Cortesía de Maclin Photo & Film)

El vestido perfecto

Después de comprometerse, Annie centró su corazón en encontrar un vestido en David’s Bridal como homenaje a su madre, que también había comprado su vestido de novia en la tienda.

Visitó David’s Bridal en diciembre de 2023 y compró lo que creía que era el vestido perfecto. Sin embargo, a principios de 2024, se lo pensó mejor.

«Algo no encajaba», dice Annie, que se licenció en moda y actualmente trabaja como comercializadora visual para Nordstrom.

Aún así, Annie no tenía pensado ponerse el vestido de su madre hasta un fatídico día de primavera.

En abril, tras el fallecimiento de su abuelo materno, fue a su casa para el funeral y recordó que allí estaba el vestido de novia de su madre. Decidió probárselo y le quedaba perfecto.

Annie con el vestido de novia de su madre. (Cortesía de Maclin Photo & Film)

Cuando se puso el vestido, se emocionó. Un torrente de recuerdos acudió a su mente, entre ellos los recuerdos entrañables de su adolescencia cuando se probaba el vestido de su madre. Ahora, luciendo el vestido como futura novia, Annie sintió que el momento era «espiritual»

«Lo tomé como una señal de Dios y de mi madre de que están conmigo y de que esto es lo que debo hacer para honrar a mi mamá», dijo.

Annie (izq.) con su madre, Carly. (Cortesía de Maclin Photo & Film)

La revelación

Sólo unos pocos amigos y familiares conocían el plan de Annie antes de la boda. Su padre no tenía ni idea.

El gran día no tardó en llegar y Annie se aseguró de celebrar una «primera mirada» con su padre antes de la ceremonia. Chad, que seguía llorando la muerte de su esposa, se sintió emocionado al ver a su hija con el vestido.

«Dijo que al instante se le hizo un nudo en la garganta y no pudo contenerlo», dice Annie, añadiendo que su padre estaba conmovido tanto por el amor como por la pena.

Chad le preguntó a Annie si era el vestido de su madre sólo para estar seguro  y cuando ella le dijo que sí, se echó a llorar.

«Te pareces a ella», dijo en un vídeo.

Annie se emocionó. «Él lo apreciaba tanto como yo», declaró a The Epoch Times.

Cuando se le preguntó qué habría pensado su madre al verla con el vestido, Annie tuvo una respuesta definitiva. «Seguro que estaría encantada», dijo.

Vea el vídeo:

(Cortesía de Maclin Photo & Film)

Más tarde ese mismo día, una radiante Annie caminó hacia el altar y notó que varios miembros de su familia reaccionaban al reconocer su vestido.

Pero el día aún no había terminado. Después de homenajear a su madre en la ceremonia, Annie quiso seguir haciéndolo en el banquete.

A Annie siempre le gustó la foto de boda de su madre bailando con su abuelo, así que se las arregló para recrearla con el fotógrafo de la boda. Después de la ceremonia, mientras bailaba con su padre, Annie se aseguró de capturar una foto de ellos sonriendo a la cámara en medio del baile.

«Entonces le susurré al oído y le dije: ‘Sabes, acabo de recrear esa foto de mamá y Poppy’ y se volvió a atragantar», cuenta.

Annie baila con su padre, Chad. (Cortesía de Maclin Photo & Film)
Carly, la madre de Annie, baila con su padre. (Cortesía de Maclin Photo & Film)

«Escucha lo que el Señor te ponga en el corazón que hagas»

Annie disfruta ahora de la vida con su esposo en Grapevine, Texas. Aunque no se sabe si su hermana pequeña, Callie, continuará la tradición llevando el vestido de su madre en su propia boda, Annie tiene esperanzas.

«Espero que lo haga», dice. «Sería una tradición preciosa».

Annie con su marido, su padre y sus hermanos. (Cortesía de Maclin Photo & Film)

A otros que quieran honrar la memoria de sus seres queridos, Annie les dice: «Definitivamente escuchen a su corazón, escuchen lo que el Señor les ponga en el corazón que hagan».

Como persona de fe, Annie dice que no estaría donde está hoy sin Dios.

«Vas a tener grandes días como éstos en los que tienes tu boda o tienes un hijo y deseas que esos seres queridos estén allí contigo», dijo. «Pero saber en mi corazón que tengo la relación con el Señor que tengo y saber que ella está ahí arriba en el cielo con Él y que a través de Su salvación, podré verle a Él y a ella de nuevo algún día, es absolutamente increíble y reconfortante».


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