La imagen de un niño 6 años con su uniforme blanco de la escuela caminando solo por un campo helado y atravesando un puente roto sobre un arroyo, con el fuerte sol de verano, cautivó la atención de los medios de comunicación por el gran esfuerzo y sacrificio que hace para poder estudiar.
Axel Yamil Antúnez camina 3 kilómetros y cruza 2 arroyos para llegar a la Escuela Rural 196 en la provincia argentina de Misiones. Evidentemente, nada la detiene.
La foto fue tomada por Noelia Bairros, una de las maestras de la escuela rural, pero quien la publicó en Facebook fue Antonio Espíndola, otro docente que al verla supo el efecto que provocaría, precisó Clarín.
La imagen está acompañada por un nota que dice: «Se sienten las mañanas heladas en la hermosa Misiones. Pero se calienta el pecho con orgullo cuando se aprecia esta imagen de los alumnos llegando a la escuela», y concluye con fuerte mensaje: «Algunos figurarán por tomar escuelas, pero este solo merece aplausos porque la escuela se abrirá por y para él. Escuela 196, Picada Caa Guazú, Leandro N. Alem».
Noelia, la maestra que tomó la foto, asegura que solo es posible caminar todos esos kilómetros bajo la helada porque en la escuela está la contención y cariño. «Me gusta el desafío de trabajar en esta zona, uno transita el sacrificio del chico», dijo la maestra según Clarín.
Ahora la foto del niño junto a su pequeño hermano cruzando un puente roto sobre un arroyo con el fuerte sol de verano se hizo eco debido al sacrificio que hace Axel para llegar a estudiar.
La impactante foto se viralizó en redes sociales, generando diversos comentarios y hasta el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, salió a elogiar al pequeño estudiante misionero.
La fuerza incansable de este niño de seis años tocó el corazón de muchas personas que se acercaron para brindar su solidaridad a los 30 niños de la escuela 196 que viven en la misma situación que Axel. Pero sobre todo, todos querían ayudar y conocer al pequeño héroe.
Axel ya está en segundo grado y la directora lo califica como un excelente alumno. Casi nunca falta y comparte pupitre con su hermano Alan que este año comenzó primero. Es que en la Escuela 196 los chicos aprenden en los denominados “grados acoplados” debido a la escasa cantidad de alumnos, de acuerdo a Clarín.
“A él le gusta ir a la escuela. Nosotros queremos que estudie para que tenga una vida menos sacrificada”, aseguran con convicción Miguel y Ramona, los padres de Axel.
Este pequeño guerrero tiene siete hermanos y las condiciones en las que viven no son las mejores. Sin embargo, la publicación llegó hasta el Intendente de la localidad de Alem quién ayudó a la familia de Axel a terminar su casa que antes tenía piso de tierra y tablas rotas.
La familia sobrevive a través de un pequeño salario y de sus sembradíos. Axel asegura que ayuda en la siembra a su papá. Este año plantaron maíz, poroto y mandioca en un sector de la chacra donde prepararon la tierra con un precario arado tirado por un noble caballo. La intención de Miguel era ampliar su sembradío y para eso limpió un sector que estaba cubierto de monte. La leña todavía está apilada, a la espera de que aparezca algún comprador. “Si vendía la leña compraba el herbicida y las semillas”, explica su padre.
Ramona Fleitas, la mamá de Axel, se mostró preocupada porque los chicos cruzan por dos puentes peatonales que ya muestran cierto deterioro: el paso del tiempo hizo que algunas tablas se soltaran y quedaran huecos que podrían provocar alguna caída al cauce.
No hay duda que si Axel continua con las mismas ganas de estudiar, con su gran sacrificio logrará grandes cosas en su vida porque es notable el corazón y la voluntad de estudiar que le pone día a día para aprender.
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