Siendo hijo de una madre adoptiva, hay dos maneras de pensar para estos niños. Algunos son inmensamente curiosos en ver cómo es su familia de sangre, mientras que otros están muy contentos con sus familias adoptivas y no tienen ganas de buscar a sus parientes biológicos.
Todo cambió para Zachary, un adolescente de 18 años, quien entraría en la segunda categoría, al saber que tenía una abuela de sangre que padecía cáncer de pulmón.
Estaba en estado terminal. Sin saber cuánto tiempo le quedaría de vida, su deseo antes de morir era ver a su nieto al menos una vez antes de partir.
La madre adoptiva de Zach (quien desea permanecer anónima) le dijo a Zach la noticia, dándole la opción de visitarla o no.Zach no dudó para nada, y el 23 de diciembre 2017, estaba en la casa de su abuela Sheila Gibson.
La madre biológica de Zach, Candice, le abrió la puerta y le presentó a varios de sus parientes, incluyendo a un tío, un primo, y un perrito. La presentación más notable fue, por supuesto, con Sheila. Cuando Zach se presentó, ella se cubrió los ojos y lloró. Luego se apresuró a darle un fuerte abrazo a Zach.
“¡Oh por dios!… ¡Muchas gracias!”, dijo con un brazo alrededor de la cintura de Zach.
Ella continuó abrazándolo y expresándole su gratitud por varios minutos. Candice se dio cuenta y le dijo a su madre, “No podía pensar en un mejor regalo para Navidad que este”.
Cuando la madre de Zachary compartió un video en la página de Facebook Love What Matters, se convirtió en todo un suceso con más de 7 mil likes, y recibió muchos comentarios dándoles su apoyo:
«¡Qué gran madre eres! Lo que ha hecho tu hijo es un perfecto ejemplo de eso. ¡Felicitaciones a ambos!», comentó un usuario.
«Me gustaría agradecer a la madre biológica por darlo desinteresadamente para que la madre adoptiva pueda darle amor y apoyo…», dijo otro usuario.
La vida increíble que ha recibido se manifiesta en el hecho de que él pudo encontrar amor y compasión para darle a su abuela biológica este verdadero regalo. Dios lo bendiga a él y su familia.
Mira el video a continuación:
Encuentro padre e hijo, no se han visto en 37 años
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