Padres comparten cómo «Dios intervino» para ayudar a prevenir el aborto de su hijo hace 18 años

Por Louise Bevan
22 de agosto de 2020 6:02 PM Actualizado: 22 de agosto de 2020 6:02 PM

Chastity y Kirk Barker, de San Antonio, Texas, están casados desde hace casi 18 años y tienen dos hijos juntos, llamados Cameron y Caitlin.

Cuando Chastity  enfermó durante su primer embarazo, la vida de Cameron casí deja de existir. Sin embargo, en lugar de seguir el consejo de su médico y abortar, la pareja decidió quedarse con el bebé. Hoy en día, Cameron, de 17 años, es un «ejemplo» de la misión de los Barker: ayudar a otras madres a elegir la vida y a confiar en Dios.

El bebé Cameron con su madre, Chastity Barker, en el hospital. (Cortesía: Kirk Barker)

Una decisión imposible

En enero de 2002, Chastity se enfermó mientras estaba embarazada de su primer bebé. «Perdió 42 libras en un mes», dijo Kirk a The Epoch Times. «Durante ese mes, estuvo hospitalizada la mayor parte del tiempo. Finalmente, el doctor le dijo: ‘Mira, no hay nada más que podamos hacer'».

A los futuros padres les dijeron que, si no terminaban con el embarazo, la vida de Chastity estaría en riesgo. «El doctor no quería trabajar», especuló Kirk. «Nunca le dio un diagnóstico oficial y todas las enfermeras lo presionaban para que hiciera análisis de sangre».

«Estaba asustada», recordó Chastity, aludiendo a ese momento. «Quiero decir, no quería tener [el aborto], pero tenía miedo de morir».

El bebé Cameron con su madre, Chastity Barker, en el hospital. (Cortesía de Kirk Barker)

Aunque Kirk no quería pasar por el procedimiento en ese momento, era una decisión difícil como esposo de elegir entre la vida de su pareja y la vida de su hijo no nacido. «Mirando ahora hacia atrás, desearía que haber confiado más en Dios», dijo. «Y aunque no lo hicimos, todavía nos afecta hoy en día».

Temerosos por la salud de Chastity, la pareja hizo caso al consejo de su médico y reservó una interrupción.

Sin embargo, el día de la cita, un extraño en la acera intervino. Un manifestante provida que encontraron rezó por la pareja en problemas. Sin embargo, Chastity y Kirk, se dirigieron a la recepción de la clínica, pero luego vino la segunda intervención del día; antes de que la pareja fuera a firmar, se les entregó lo que ahora llaman un «certificado de defunción» para su hijo no nacido.

Fue la gota que colmó el vaso.

«Dios intervino en mi vida», dijo Kirk. «Nos levantamos y salimos, y dos semanas después, Dios la sanó. Hoy tenemos un increíble hijo de 17 años que acaba de graduarse de la secundaria».

El joven Cameron. (Cortesía: Kirk Barker)

Dándole la bienvenida a Cameron

Cuando la pareja decidió continuar con su embarazo, pase lo que pase, la familia de Chastity fue muy comprensiva. Sus seres queridos se unieron para hacer lo mejor posible para asegurar la salud y el bienestar de la futura mamá.

Chastity llegó a término con su salud y la de su bebé intactas. Indujeron el parto y dio a luz a Cameron por cesárea.

«Cuando nació, no lloró», recordó Chastity. «Solo sentí que, ya sabes, todo estaba bien. No hubo complicaciones porque estaba preocupada por eso […] Era un bebé tan bueno».

Cameron y su hermana, Caitlin. (Cortesía: Kirk Barker)

Kirk también sintió lo mismo que su esposa al ver a Cameron por primera vez.

«Fue muy emocionante ver a mi hijo», añadió Kirk. «Ya sabes, era muy activo en el vientre de mamá y era un niño muy activo».

Desde el nacimiento de Cameron, la pareja reveló que no ha tenido ninguna comunicación con el médico que recomendó el aborto. En un momento, Kirk compartió, que Chastity estaba redactando una carta, pero finalmente decidió no seguir adelante con el envío.

«Nuestros corazones estuvieron llenos de ira durante 13 años», explicó Kirk. «Estábamos realmente molestos con eso […] casi matamos a nuestro hijo. Y si no fuera por la intervención de último minuto, probablemente hubiéramos pasado por eso».

«Todos nos amamos»

En cuanto a Cameron, que apoya a sus padres en su esfuerzo por compartir su historia, admitió sentirse conmovido para lo que vivieron, pero se siente abrumadoramente agradecido por la decisión que tomaron su madre y su padre. «Estaba agradecido de que eligieran la vida por mí», dijo a The Epoch Times. «Porque no habría podido crecer, no habría podido experimentar eso».

«Jugar al fútbol, jugar a los videojuegos con mi padre, jugar con todos los juguetes que hice cuando era más pequeño», continuó, «como todos los recuerdos».

Todas las familias experimentan sus altibajos, «Pero al final del día», reflexionó Cameron, «todos nos amamos». Lo superamos».

(Cortesía: Kirk Barker)

Sin embargo, la complicación del embarazo de Chastity con su hijo no es la única prueba traumática que la familia ha tenido que soportar. El 2 de julio de 2019, la entonces joven de 14 años Caitlin, la hermana menor de Cameron, se enfermó repentinamente y fue llevada a la sala de emergencias. Su condición se deterioró rápidamente, y la enfermedad la dejó paralizada del cuello para abajo.

«Pasó 35 días con un tubo de respiración y un tubo de alimentación», recordó su padre. «Su ritmo cardíaco bajó tanto que casi tomaron la decisión de, ya sabes, tirar de los tubos.»Pero una vez más, Chastity y Kirk se apoyaron en su fe y perseveraron.

Después de 113 días en el hospital, Caitlin regresó a casa. Sin embargo, a través de esta dura prueba, la familia ha prometido ayudarla a reevaluar sus deseos, debido a sus contratiempos y «hacerla brillar».

«Empezó a habituarse a un brazo», explicó Kirk, «y hoy en día sigue luchando para acostumbrarse a ese segundo brazo. Pero no se ha rendido, ya sabes, es feliz».

(Cortesía: Kirk Barker)

Pregunte, busque ayuda y confíe

La familia Barker espera que su viaje inspire a otros padres a hacer preguntas, buscar ayuda y confiar siempre en Dios.

«No dejes que tu decisión se base en el miedo», imploró Kirk. «Sabes, hay muchas organizaciones de beneficencia y organizaciones que ayudarán a las mamás en el proceso [de explorar sus opciones], así que solo las animamos a escuchar nuestra historia y a buscar la ayuda que necesitan antes de tomar una decisión que podría afectarlas para el resto de su vida».

«Fui un no creyente la mayor parte de mi vida», admitió el padre de dos hijos. «Le di la espalda a Dios […], un día Dios me mostró que estaba equivocado, y así fui bendecido con la oportunidad de poder contarlo».

Cameron se graduó recientemente de la escuela secundaria. (Cortesía: Kirk Barker)

Los Barkers están agradecidos de haber elegido la vida ese día. Sin embargo, Kirk se da cuenta de que «no muchos niños son tan afortunados. Muchos niños no sobreviven a su cita con el aborto, por desgracia».

Además, el padre de dos hijos está agradecido por los momentos padre e hijo que de otra manera se hubiera perdido. Mientras tanto, ambos padres están orgullosos de haber asumido su «responsabilidad», como la llamó Kirk, de hacer todo lo posible para crear una vida para Cameron, en lugar de quitársela.

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