Hal Taylor es un maestro artesano de muebles y padre de tres hijos. Pero después de dar la bienvenida a su tercera hija, Rose, Hal descubrió que tenía un problema; a este padre le encantaba leer, pero tres niños no cabían en su regazo para los cuentos de la hora de dormir en la amada mecedora de la familia.
Sin embargo, Hal no tardó mucho en idear una solución ingeniosa; enfocó su atención en una silla nueva construida para cuatro personas.
Meses después, había logrado el objetivo que se había propuesto. Hal construyó una hermosa mecedora hecha a medida en la que podía caber él y todos sus hijos en sus asientos ingeniosamente dispuestos.
El artesano de Fredericksburg, con sede en Virginia, que ha sido un ávido lector desde su infancia, llama a su extraordinario diseño la «StoryTime Rocking Chair» («La silla mecedora de la hora del cuento»).
«Como no tenía un regazo lo suficientemente grande para tres, tuve que inventar algo», explica Hal en su sitio web. «Este es el ‘algo’ que se me ocurrió para leerle a mis tres hijos».
«Cuando tuve hijos, empecé a leerles desde muy temprano, antes de que nacieran», «esto continuó hasta que su capacidad de lectura eclipsó la mía».
Cuando Rose nació, demostró ser la ‘comunicadora’ de la familia muy rápidamente, hablando en oraciones completas con una dicción perfecta», contó el artesano.
«¡Bueno, no iba a ser dejada fuera del grupo de lectores!», bromea Hal. «Esto presentó un problema para mí porque esto significaba que Rachael, la mayor, tenía que quedarse de pie junto a la silla a la hora de los cuentos».
Hal no creía que este acuerdo fuera justo y fue entonces cuando se le ocurrió la idea: «Bueno, hago mecedoras, puedo resolver esto», reflexiona Hal.
Y así lo hizo. «Ahora, los tres niños podrían tener un asiento cómodo para leer», explica.
Hal compartió en Facebook una foto de la silla original en uso para él y sus tres hijos, Aaron, Rosie y Rachael. Los asientos elevados a ambos lados del asiento principal permitían a los hijos mayores de Hal acurrucarse cerca y ver por encima de los hombros de su padre mientras él les leía, mientras que el niño más pequeño se sentaba en su regazo.
En la foto, el papá y sus tres hijos tienen sonrisas radiantes en sus rostros.
Hal ha estado haciendo mecedoras desde 1992. «No soy una persona que lleva un registro del tiempo muy bien», dice Hal. «No es demencia; yo nací así. He oído de muchas fuentes que ‘el tiempo es una ilusión’, ¡y es fácil para mí creer!».
El fabricante de sillas ha dedicado su vida a perfeccionar la belleza y el confort de sus mecedoras. Después de años de perfeccionar su oficio, Hal ahora se especializa en aparatos ortopédicos flexibles para la espalda, reposacabezas curvados, el perfecto «radio de balanceo» y mecedoras hechas a medida para satisfacer todas y cada una de las necesidades de sus clientes.
Desde que la silla de la hora del cuento de Hal atrajo tanta atención en línea, el artesano ha hecho 35 réplicas adicionales, incluyendo cinco para la familia real de Abu Dhabi, dice.
Numerosos fans del trabajo de Hal han compartido sus ideas en Facebook. «¡Me encanta que sea una mecedora!», escribió uno. «Grandes recuerdos de mis dos hijas en la mecedora de mi abuela».
«Una hermosa reliquia para transmitir en la familia», comentaba otra persona, mientras que una elogiaba la artesanía de Hal, diciendo: «Maravillosa idea y hermoso trabajo».
«Gran idea, con un alto precio», se aventuró una persona, añadiendo: «Sería bueno hacer esto más asequible para las familias de trillizos, muchos de los cuales ya tienen problemas financieros».
The StoryTime Rocking Chair actualmente se vende por 7500 dólares.
Hal explica que el precio puede ser alto, pero está justificado; cada silla es realmente una labor de amor. Cada pieza de madera que va en la silla se elabora para que coincida con el resto. El asiento es «bilateralmente simétrico», continúa el artesano, y sus seis complejas articulaciones están cepilladas a mano.
Además, se necesitan más de 200 piezas de madera cortadas y moldeadas con precisión para completar los 19 soportes del respaldo de la silla. En general, cada silla StoryTime requiere una gran cantidad de materiales de alta calidad, un conjunto de habilidades especializadas y meses de arduo trabajo.
De hecho, deseoso de animar a otros en el arte de la fabricación de muebles, Hal ha escrito un libro llamado Rocking Chair University.
El libro incluye plantillas utilizables para una serie de sus diseños expertamente perfeccionados.
El taller de Hal sigue ocupado hasta el día de hoy, y el artesano sigue activo en los medios de comunicación social. Compartiendo una foto de sí mismo trabajando duro en su taller en diciembre de 2018, Hal subtituló bromeando: «¡No exagero en lo importante que es mantener una tienda limpia!».
Ese mismo taller ha visto miles de diseños ingeniosos y hermosos a lo largo de las décadas, casi 400 en total, pero la StoryTime Rocking Chair es sin duda la obra maestra de Hal. Todo comenzó con una niña pequeña y un cuento para dormir.
«He oído decir que los niños cambian tu vida más de lo que tú cambias la de ellos», reflexiona Hal. «Creo que eso es verdad».
Foto cortesía de Hal Russell Taylor (Website | Facebook)
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