Desde el momento en que nace una niña, el sueño de todo padre es llevarla al altar. Mark Williams, padre de Chloe, una niña de 4 años de edad, vio su sueño en peligro sin previo aviso un día antes de Navidad.
Mark y Michelle Williams llevaron a su hija al Hospital Arnold Palmer en Orlando, Florida, después de que sufriera vómitos, dolores de cabeza y problemas para caminar, señalo Huffington Post. Estaban petrificados, y el diagnóstico de Chloe los hizo caer en picada.
El Dr. Alex Levy, solo quería ayudar a la niña a sobrevivir, él fue quien asumió la gigantesca tarea de dar la noticia. Iba a ser la primera de muchas conversaciones que cambiarían la vida del médico de innumerables maneras.
«Cuando empecé a trabajar en el Hospital Arnold Palmer», dijo el Dr. Levy con franqueza, en un cortometraje titulado «Chloe’s Wedding Day», hecho para hacer una crónica de su viaje, «Siempre el más joven del equipo tiene que recibir llamadas en Navidad».
En el 2009, el Dr. Levy era el más joven. El 24 de diciembre, la pequeña Chloe era su principal carga y su mayor emergencia. Después de hacer una resonancia magnética del cerebro de Chloe, el corazón del joven médico se hundió. Chloe tenía un tumor cerebral maligno y canceroso.
«Recuerdo haber entrado en la habitación de la familia», recordó el Dr. Levy, «Para tener que decirles que su hija tenía un tumor cerebral». Algo que Mark Williams le pidió al joven doctor durante esa conversación se quedó con el Dr. Levy y resonó profundamente durante años.
«¿Podré alguna vez llevar a mi hija en su boda?», preguntó Mark, sinceramente. «No lo sé», contestó el doctor, recordando la conversación con Strong Films, el grupo que está detrás del cortometraje. «Pero vamos a hacer todo lo posible para que eso suceda», aseguró a los padres afectados.
Chloe paso por tres cirugías y 18 meses de quimioterapia para extirpar el tumor, «porque seguía creciendo de nuevo», dijo el Dr. Levy, quien compartió con un suspiro fuerte. Pero finalmente, funcionó.
La tenaz niña de 4 años entró en una remisión triunfal, regresó a la escuela e incluso le dio la bienvenida a su feliz y juguetona personalidad. El Dr. Levy fue tocado e inspirado por Chloe y sus dedicados padres. El doctor estaba orgulloso; quizás él mismo asistiría a la boda de Chloe algún día.
«Lo único que quiero es poder ir a su boda algún día», dijo el Dr. Levy. Pero Mark tenía algo más que decirle al hombre que había renovado la vida de su hija.
Mark quería que el doctor llevara a su hija al altar.
Este gesto de gratitud inconmensurable fue la manera en que Mark le hizo saber al Dr. Levy el impacto que había tenido en su familia, sus vidas y posiblemente su futuro. «Cuando ese papá me llame y me diga que lleve a Chloe al altar para su boda», continuó el Dr. Levy, «Probablemente me retire. No creo que pueda haber una mayor sensación de realización después de eso».
«Sin embargo, es la verdad», agregó, con las manos entrelazadas y mientras sus pensamientos se dirigían hacia lo desconocido. El cortometraje de Chloe fue subido a YouTube y, hasta la fecha, ha sido visto más de 9,2 millones de veces.
Sin embargo, trágicamente, después de cuatro años de salud y esperanza, el cáncer de Chloe regresó. La valiente niña y sus padres, alimentados por el amor y el deseo de seguir luchando, persistieron durante años.
Pero el 14 de julio del 2016, la niña que había luchado tan duro y durante tanto tiempo admitió que la lucha había terminado. Los devastados padres dieron a conocer la noticia de que su hija, Chloe Michelle Williams, había fallecido a la tierna edad de 11 años.
Sin embargo su inmenso espíritu vive en la pureza del gesto de su padre y un joven doctor transformados para siempre por las conmovedoras palabras de gratitud en una inolvidable Nochebuena en Florida.
Una chica que lucha contra el cáncer recibe el mejor regalo
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