Una pareja que deseaba tener una niña se llevó una gran sorpresa cuando se enteró de que estaba esperando no una, sino tres hijas–trillizas idénticas.
Heather Muscha Metcalf, de 31 años, nacida en Washington, y su marido, Tyler Muscha, de 37 años, están actualmente instalados en el estado natal de Tyler, Dakota del Norte, en la ciudad de Mandan. Heather tiene dos hijos de su anterior matrimonio: Teddy, de 10 años, y Henry, de 8. Pero la pareja, que lleva un año casada, también quería tener un hijo juntos.
«Esperábamos tener una niña, y ahora tendremos tres», dijo Heather a The Epoch Times. «Ha sido un embarazo totalmente natural».
La futura mamá compartió que ni ella ni su marido tienen antecedentes de gemelos o trillizos en su familia y su obstetra no mencionó nada acerca de que hubiera más de un bebé antes de que la pareja fuera enviada a hacerse una ecografía.
En la ecografía de Heather, de 8 semanas, el técnico localizó tres latidos y un posible cuarto.
«Estaba en estado de shock», dijo Heather. «Tyler estaba muy tranquilo y callado durante todo el proceso, y yo no paraba de preguntar a los técnicos: ‘Son solo dos, ¿verdad?’ ‘No más de tres, ¿verdad?
«Empezaron a etiquetar a los bebés de la A a la C y nos dejaron ver y oír los latidos del corazón, y luego un cuarto saco, el bebé D… Yo estaba tan temblorosa y no podía creer lo que estaba viendo… La idea de que hubiera múltiplos nunca se me pasó por la cabeza».
(Cortesía de Heather Muscha Metcalf)
En las semanas siguientes se confirmó que el cuarto bebé, un cuatrillizo fraterno, era idéntico.
Lamentablemente, Heather perdió al cuarto bebé entre las semanas 11 y 12 de embarazo por un fenómeno conocido como «síndrome del gemelo desvanecido». Su embarazo se clasificó posteriormente como un embarazo de trillizos monocoriónicos-triamnióticos, lo que significa que cada uno de sus tres bebés supervivientes tenía un embrión genéticamente idéntico, pero su propio saco gestacional.
Heather investigó en Internet la rareza de su embarazo. «Google dice que es uno entre 200 millones», dijo. La doctora Laura Knutson, ginecóloga de Heather, dijo a KFYR TV que la probabilidad de trillizos idénticos era «probablemente una entre 100,000, o incluso más rara».
Las trillizas de Heather son muy poco comunes, sobre todo porque comparten una misma placenta. Su embarazo también se considera de alto riesgo.
«Da un poco de miedo y me sentí muy abrumada al principio», dijo Heather a The Epoch Times. «No hay mucha información sobre trillizos para leer, pero hasta ahora lo están haciendo muy bien y ya son muy queridas».
La fecha oficial de parto de las trillizas es el 14 de enero de 2023. Pero debido a que comparten la placenta, se espera que nazcan a las 34 semanas, justo a tiempo para Navidad.
Dar a luz a trillizos no es algo sencillo. Heather sufrió hiperémesis gravídica –náuseas y vómitos intensos– además de hambre, hinchazón y agotamiento persistentes en las primeras semanas de su embarazo. Cada dos semanas se somete a una ecografía de dos horas de duración con su especialista materno-fetal para vigilar el síndrome de transfusión gemelo a gemelo (STG), una enfermedad poco frecuente que puede afectar a la absorción de nutrientes entre los fetos.
«Se aseguran de comprobar el flujo sanguíneo, los niveles de líquido amniótico y el peso», explica Heather. «Cada vez estoy más emocionada por conocerlas, pero también extremadamente agotada todo el tiempo… hasta ahora no ha habido signos de STG».
Heather tenía reservadas dos ecografías anatómicas de 4 horas de duración antes del parto, y compartió que sus trillizas «tenían un aspecto estupendo» en la primera cita.
«Las bebés han estado muy bien y están creciendo bien para ser trillizas», dijo. «Son bebés muy activas y siempre están en movimiento».
Heather, cuidadora de niños a domicilio, ha dejado de trabajar temporalmente debido a la demanda de su embarazo.
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