Para algunos dueños de perros, incluso ir a la tienda puede significar un triste adiós a su mascota. Entonces imagina cómo se sintió Debi Pentranck cuando su bull terrier, Zeus, salió y no regresó en dos años.
Un día, Debi, una residente de Ocala, Florida, había dejado a Zeus afuera sin correa. Aunque lo había hecho muchas veces en el pasado, siempre regresaba. Más tarde admitió que ella «simplemente hizo mal», porque esta vez nunca regresó.
Resultó que Zeus estaba deambulando por el área de Ocala cuando dos niños lo encontraron y pensaron que estaba extraviado. Luego ofrecieron a Zeus a un hombre mayor en el estacionamiento de un Burger King.
Los niños le dijeron que habían encontrado un perro callejero, y él terminó quedándose con el perro. Su nuevo dueño se mudó a Detroit poco después de encontrarlo, separando al perro y a Debi por más de 1600 kilómetros.
Debi colocó anuncios en toda el área, con la esperanza que alguien identificara a Zeus y la contactara. A pesar de algunas pistas y el contacto constante con el personal que la ayudó a publicar anuncios, no pudo encontrarlo durante dos largos años.
Luego, recibió una llamada.
Resulta que mientras estaba en Detroit, Zeus escapó de su nuevo dueño. Luego, Friends of Animals Metro Detroit, un refugio de animales local lo encontró otra vez solo y hallaron un microchip dentro de perrito.
El microchip tenía la información de contacto de Debi, lo que permitió que el refugio la llamara y le contara la fantástica noticia.
Debi dijo a Ocala.com que deseaba que «Zeus pudiera hablar con ella y contarle lo que sucedió». Con la noticia repentina, no es de extrañar que Debi no perdiera el tiempo manejando de Florida a Detroit tan pronto como pudo.
Cuando el hombre que se mudó a Detroit encontró a Zeus en el refugio de animales, escuchó toda la historia. Elaine Greene, quien es parte de Friends of Animals Metro Detroit, dijo que el hombre entendió que debía dejar que Zeus volviera con su legítima dueña era «lo correcto».
El reencuentro fue grabado en video, con Zeus corriendo a los brazos de Debi mientras lloraba lágrimas de alegría. «Te quiero mucho», le dijo a Zeus.
Quizás Debi nunca se hubiera reunido con Zeus si no hubiese tenido un microchip dentro.
Elaine destacó a WXYZ-TV Detroit lo importante que es tener a su perro con un microchip, ya que puede salvar a su perro si algo así sucediera algún día.
Mira el conmovedor reencuentro aquí:
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