En noviembre de 2018, por una razón desconocida, un pequeño pingüino azul llegó a Moncks Bay, Christchurch, Nueva Zelanda, sin su madre. Afortunadamente, la pequeña ave, recibió la ayuda de un amable transeúnte que colocó un adorable letrero de cartón en la playa para protegerlo de cualquier daño.
El 29 de noviembre de 2018, alrededor de la 1.30 p.m., Jeff Mein Smith estaba andando en bicicleta por Moncks Bay cuando se dio cuenta de que una multitud se reunía alrededor de un pingüino azul bebé en la grada.
El pequeño y solitario pingüino atrajo la atención de muchos transeúntes, pero sobre todo, los perros de la gente que se acercaban al pequeño, lo tenían aterrorizado.
«Aparentemente, al principio algunas personas dejaron que sus perros lo persigan», dijo Jeff a Stuff.co.nz.
Con la esperanza de tomar una foto del hermoso pingüino, Jeff se apresuró a ir a casa a buscar su cámara.
Cuando Jeff regresó, vio un letrero de cartón que fue creado por una pareja y colocado al lado del pequeño animal.
El letrero decía: «Hola. Estoy esperando a que vuelva mi mamá. DOC (Departamento de Conservación). Sabe que estoy aquí. Por favor, déjame solo. *Mantén a tu perro alejado. Gracias, Billy el pingüino azul bebé».
Para mantener al ave a salvo, la pareja también se había puesto en contacto con el DOC, y algunos residentes se reunieron para formar «una pequeña patrulla de protección de pingüinos».
La guardaparques del Departamento de Conservación (DOC), Anita Spencer, opinó que fue «bueno ver a la gente cuidando de nuestra vida silvestre costera».
«Es inusual que un pingüino azul esté al aire libre en la playa durante el día. Normalmente están en el mar o en madrigueras durante el día», señaló Anita.
El pequeño pingüino Billy podría estar esperando a que su madre regrese. Pero tristemente, eso puede que nunca ocurra. Según Anita, Billy es un ave joven, aparentemente de unos dos meses de edad,
Sin embargo, el considerablemente bajo peso de Billy lo hacía vulnerable para sobrevivir por sí solo. Así que el personal del DOC lo llevó al Centro de Rehabilitación de Pingüinos de Christchurch.
«Billy será llevado al centro de rehabilitación de pingüinos de Christchurch, donde será evaluado y atendido», dijo Anita.
En el centro de rehabilitación, se determinó que Billy pesaba solo 550 gramos, así que recibió líquidos, batidos de pescado, salmón y anchoas.
Los cuidadores querían asegurarse que el ave se haga grande y fuerte antes de ser liberado de nuevo a su hábitat natural.
Este pequeño pingüino, también conocido como kororā, es una especie nativa de Nueva Zelanda. Es el pingüino más pequeño del mundo, con una altura de apenas más de 25 cm y un peso aproximado de 1 kilogramo, como se indica en el sitio web de DOC.
Como los pingüinos pequeños están en peligro y son una especie protegida, Anita aconseja al público mantenerse alejado de estas aves y que evite que sus perros los molesten.
«En esta época del año, el pequeño pingüino,kororā, llega a tierra para reproducirse y es vulnerable a los ataques de los perros», escribió el DOC en una publicación de Facebook. «Si paseas a tu perro cerca de la costa: Ponle una correa en áreas donde pueda haber vida silvestre o nidos, aleja a tu perro de los nidos, advierte a los dueños de los perros cercanos de la ubicación y avísanos si ves gente o perros acosando a la vida silvestre».
Con la disminución de la población de pingüinos pequeños que viven en Nueva Zelanda, es reconfortante ver a los lugareños haciendo su parte para proteger a uno de sus pequeños miembros solitarios.
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