Estos dueños de este restaurante tienen el hábito de ayudar a los necesitados; son un brillante ejemplo de generosidad y un modelo a seguir para los demás.
El personal del restaurante Little Caesar’s en Fargo, Dakota del Norte, se dio cuenta de que una persona sin hogar había estado buscando entre su basura para encontrar algo de comer.
Sintieron compasión este ser humano y decidieron hacer algo al respecto.
Pusieron una nota en la ventana delantera, que decía: «Para la persona que revisa nuestra basura para su próxima comida, eres un ser humano y vales más que una comida del basurero. Por favor, ven durante las horas de operación por un par de rebanadas de pizza caliente y una taza de agua sin costo alguno. No se harán preguntas».
Sara Gross vio la nota y se sintió obligada a elogiar el restaurante en Facebook con una foto del cartel. La pizzería es propiedad de Mike y Jenny Stevens, y se han acostumbrado a ayudar con pizza gratis cuando pueden.
Jenny y Mike Stevens abrieron su franquicia de Little Caesars Pizza en mayo de 2015. Cuatro meses después de comenzar su negocio, Jenny y sus dos hijas estaban trabajando en un caluroso día de verano.
«Había un caballero mayor que estaba afuera en la acera, había estado sentado allí por dos o tres horas, y era verano, y simplemente seguíamos viéndolo y siguiendo, Dios, necesitaba que le dieran algo, y le trajimos una pizza entera, y una botella de Pepsi», dijo Jenny a KFGO.
El vagabundo estaba muy agradecido por su gesto amable. Para los dueños de la pizzería, su viaje de dar «despegó allí».
La pareja de Stevens hizo lo mismo una y otra vez. Sin embargo, pronto se dieron cuenta de que se podía hacer más.
«Es un poco triste cuando se ve a la gente revisando el basurero en busca de comida», dijo Mike, según Grand Fork Herald. «En un lugar como Fargo, donde tenemos una gran economía y mucha abundancia, todavía sucede».
En noviembre de 2016, la pareja extendió el alcance de sus pizzas gratuitas a través de refugios para personas sin hogar. La pizzería se ha asociado con Dorothy Day House en Moorhead, New Life Center, así como con el Ejército de Salvación en el pasado.
Ellos donan a los Salvos y a otros centros, incluyendo la entrega de pizzas que llevan más de 30 minutos fuera del horno a refugios para personas sin hogar, a menudo con notas inspiradoras escritas por clientes que se preocupan.
No sólo no se hicieron preguntas, sino que los propietarios también fueron generosos sobre la cantidad de comida que estaban dispuestos a dar.
«Si alguien viene y pide nuestras pizzas de donación, no les damos una porción, les damos una pizza entera», dijo Jenny a Today Food.
Cuando el clima es cálido en verano, el flujo de peticiones de pizza gratis puede ser bastante constante, según Jenny, que a veces también habla con ellos.
«Conmueven mi corazón, realmente lo hacen», dijo Jenny.
Las pizzas recién horneadas se venden por $5 dólares. Sin embargo, después de media hora, las pizzas ya no son aptas para la venta. Inicialmente, las sobras se daban a los empleados, pero cuando los empleados se cansaban de ellas, las sobras se tiraban. Con la colaboración de los refugios para personas sin hogar, las pizzas fueron congeladas después de 30 minutos de salir del horno y luego enviadas a los refugios, lo que redujo el desperdicio de alimentos.
La pizza donada se convirtió en una parte importante de un programa semanal en el New Life Center, que a Jenny le dijeron que es la noche favorita de las personas sin hogar.
«Esa es la noche de pizza y la noche de cine, puede sonar como una tontería, pero está haciendo una diferencia continua en la vida de estas personas», dijo Jenny.
Después de conocer las donaciones, los clientes de la pizzería también se unieron a su causa. Junto a la caja registradora hay una caja de donaciones, donde más del 15 por ciento de los clientes donaron para contribuir con su esfuerzo.
«Empezó como una idea tardía. Y parece que se está haciendo mucho más grande», dijo Mike, según The Daily Republic.
Durante este viaje, Mike falleció el 1 de diciembre de 2017, debido a la leucemia. Sin embargo, en lugar de frenar la ayuda a los necesitados, Jenny vio la continuación del proyecto de pizza gratis como una forma de recordar a su difunto esposo.
«Él realmente, realmente persiguió esto», dijo Jenny a Today Food. «Es una pequeña cosa que podemos hacer para marcar una gran diferencia en su día y seguir adelante. Tenemos que uniros para ayudarnos mutuamente. Lo hacemos porque parece que es lo correcto».
En octubre de 2018, Jenny creó una página GoFundMe para ayudar a recaudar fondos para la causa.
«Recibimos donaciones de la comunidad, pero hay una brecha entre cuánto damos y el costo de producir los alimentos. Hemos donado más de 140,000 rebanadas de pizza desde 2016. A un costo de 50 centavos la rebanada, es decir, 70.000 dólares en pizzas donadas. Esperamos recaudar fondos para el próximo año para poder seguir donando pizzas a nuestra hermosa comunidad», dice la descripción de la página.
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