La conexión con nuestras mascotas puede ser tan fuerte como el amor que sentimos por la familia cercana, y cuando los vemos sufrir es muy difícil dejarlos solos cuando tenemos que ir a trabajar.
En Italia, los permisos laborales solo son otorgados a las madres, padres o tutores en caso de enfermedad de sus hijos; sin embargo, el amor de Anna por su mascota logró romper los esquemas y consiguió un permiso laboral de dos días para cuidar de su perrita. Y no solo eso, gracias a su determinación, se está aprobando una nueva normativa laboral, según El Tiempo.
Anna, una bibliotecaria de la Universidad de Sapienza en Roma, solicitó dos días de permiso para poder atender a Cucciola, su mascota de 12 años que había sido operada de un carcinoma, pero su petición fue negada.
La mujer contó que debido a que Cucciola, su vieja perrita de raza setter tuvo que ser operada de cáncer de mama y necesitaba cuidados post operatorios, tuvo que verse obligada a buscar la manera de conseguir un permiso laboral para dedicarle dos días completos a ella, según publicó la Asociación LAV.
Ante la negativa, Anna acudió a la asociación protectora de animales (LAV), en busca de ayuda. Ella quería que además de tener dos días de permiso, su salario no fuera descontado esos días.
De acuerdo a LAV, las sentencias del Tribunal Supremo dejan claro que “No curar a un animal comporta delitos de abandono y maltrato”. El código penal italiano, también establece “una pena de un año de cárcel y una multa de mil a diez mil euros, a quien abandone a su animal o permita que sufra gravemente”.
Con esta ley en sus manos, Anna pudo respaldar su petición y sus jefes comprendieron la situación. Consiguió el permiso para cuidar a Cucciola, que ya se encuentra con una salud muy estable.
“Ahora con las certificaciones médicas y veterinarias necesarias, quienes se encuentren en la misma situación podrán citar este importante precedente”, dijo Gianluca Felicetti presidente de LAV, quien ayudó a la dama en disputa.
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