En 2015, una pequeña con síndrome de Down consiguió dos contratos de modelaje, todo gracias a su «pícara sonrisa». Las agencias no dudaron ni un minuto cuando se les informó de su discapacidad.
Connie-Rose Seabourne, de entonces 23 meses de edad, de Morley, en el Reino Unido, estaba destinada a convertirse en la siguiente modelo infantil más importante de Gran Bretaña tras ganar dos contratos de modelaje.
Después de que mucha gente le dijera a su madre, Julie Britton, de unos 40 años, que Connie-Rose debería convertirse en modelo, Julie decidió enviar las fotografías de Connie-Rose a tres agencias. Para su sorpresa y deleite, las agencias se pusieron en contacto con ella para organizar sesiones de fotos de prueba para ver cómo se desempeñaría la joven frente a las cámaras.
Al hablar con el Daily Mail, Julie dijo: «Envié un correo electrónico con una foto de Connie-Rose a una agencia de modelos para preguntarles si estaban interesados o si me engañaba a mí misma. Recibimos una respuesta de inmediato para decir que estaban definitivamente interesados».
«Cuando hablé con las agencias sobre su diagnóstico de síndrome de Down, nadie realizó ni un parpadeo. Creo que yo estaba más preocupada que nadie y ¡definitivamente no me molesta!», agregó.
Connie-Rose nació dos meses antes de tiempo y fue diagnosticada con síndrome de Down cuando tenía dos semanas de edad, pero Julie y su esposo no se sorprendieron.
«Se evaluó que yo estaba en mayor riesgo de tener un bebé con síndrome de Down cuando estaba embarazada y podría haberme hecho la prueba diagnóstica para averiguarlo, pero no la quería porque no era un problema», aseguró Julie.
«No nos molestó en absoluto. Tenemos amigos cuyos hijos han sido diagnosticados con síndrome de Down y no han tenido más que experiencias positivas de niños con el diagnóstico. Hay tanto apoyo ahí fuera que no es un problema. Es solo otro bebé que necesita ser amado», agregó.
Entonces, ¿cómo se desempeñó Connie-Rose durante las sesiones de fotos de prueba?
«A ella le encantaba. Ella sigue la dirección muy bien y se divierte mucho frente a las cámaras. Ya le han dado dos contratos, pero no podemos decir para qué. Le he hecho tantas fotos que ya está acostumbrada», dijo Julie.
Sin embargo, si su hija decide que no quiere ser modelo, Julie apoyará plenamente su decisión.
«Tan pronto que sea demasiado para ella o no le guste, pararemos. A la primera señal de que no está disfrutando, nos detendremos. Lo que ella quiere hacer es lo más importante en todo esto», dijo Julie.
Sobre la discapacidad de su hija, Julie dijo: «Hemos tenido tanto apoyo de tanta gente y muchas experiencias positivas. Creo que la gente podría estar un poco más informada sobre la terminología a utilizar. La discapacidad de Connie-Rose no define quién es ella».
«Tiene síndrome de Down, no es que sea el síndrome de Down. Ese es el mayor problema que enfrentamos, pero se trata de educación», agregó.
Julie también visitó los pabellones del hospital para ayudar a las familias cuyos hijos tienen síndrome de Down, ya que inicialmente podrían sentirse abrumados por el diagnóstico.
«Algunos padres al principio luchan con la idea del síndrome de Down y piensan que la vida no volverá a ser la misma. Trato de explicarles cuánto apoyo hay para ellos», dijo.
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«La inclusión e igualdad que mi familia ha experimentado ha sido asombrosa. Es absolutamente fantástico que Connie-Rose sea figura pública, es tan positivo», agregó.
¡Bien hecho, Connie-Rose! ¡Eres tan hermosa!
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