El 11 de septiembre de 2001 evoca un evento trágico en la historia reciente de Estados Unidos. Casi 3000 personas murieron ese día por ataques terroristas y miles más resultaron heridos. A pesar de lo impresionantes que puedan ser esos números, hubieran sido incluso más elevados si no fuera por personas como Bob, el bombero.
El heroísmo de Bob tuvo un alto costo personal
Bob fue el primero en responder durante el 11 de septiembre. Su trabajo era cuidar la ciudad de Nueva York y asegurarse que su gente estuviera a salvo. Bob fue un verdadero héroe pero, desafortunadamente, su heroísmo tuvo un costo. Enfrentarse a la tragedia cara a cara lo llevó a una espiral de depresión aparentemente interminable.
«Lo que Bob pasó el 11 de septiembre cambió todo su mundo», comentó la esposa de Bob, Diane, a Rachael Ray Show en 2018. «Se encerró en su pequeño mundo», continuó. «Dejó de hacer ejercicio; simplemente dejó de hacer todo lo que alguna vez le gustó o disfrutó», añadió.
Bob se volvió increíblemente aletargado. Simplemente se sentaba todo el tiempo sin ninguna voluntad de hacer nada. Como resultado, ganó casi 70 kilos de más. También desarrolló diabetes y apnea del sueño y necesitaba estar conectado a una máquina por la noche para ayudarlo a respirar.
«La transformación de este hombre grande y fuerte al que conocí, a un teleadicto que simplemente se dejaba llevar», lamentó Diane.
Cuando los gemelos comenzaron las visitas universitarias, Bob tuvo problemas para seguirle el ritmo al resto de la familia.
«Diría que definitivamente es uno de los momentos más tristes de su vida», admite su esposa tras 23 años de casados, porque tenía que detenerse y sentarse constantemente, aseguró a Rachael Ray Show.
Fue entonces cuando supo que necesitaba hacer un cambio.
Bob se unió a un centro de pérdida de peso y perdió 5 kilos durante su primera semana.
«Fue una pelea todos los días», admite Diane, pero hoy, después de perder 50 kilos, Bob se está acercando al peso que tenía cuando él y Diane se conocieron hace décadas.
Bob se veía genial entonces, pero ahora ninguna de sus prendas le quedaba bien. Necesitaba tomar prestado los lazos del cabello de Diane y formar una pequeña cola en la parte posterior para que encajara.
Si bien fue genial que Bob perdiera peso, tener una cola en la espalda todos los días lo hacía parecer bastante tonto.
Entonces, Diane nominó a Bob para un cambio de imagen en el Rachael Ray Show.
«Me encantaría verlo con un nuevo guardarropa: ropa que realmente le quede bien. Se merece esto. Ha trabajado mucho», destacó ella.
Con la ayuda del experto en estilo de vida Tommy DiDario, la presentadora Rachael Ray pudo darle a Bob la alta moda que se merecía. Cuando Bob se dirigió al escenario con un abrigo deportivo gris, pantalón azul marino y zapatos marrones, ¡su esposa casi no podía creerlo!
«¡Es increíble! ¡Increíble!», repetía Diane, cuando lo vio.
Bob también estaba contento con su nueva apariencia.
«¡Me siento fantástico!», exclamó. «Las cosas son diferentes», agregó.
Es genial ver la transformación de Bob después de casi dos décadas atrapado en una rutina. Ahora Diane puede decir que no solo está casada con un héroe sino también con un guapo que incendia.
Mira el increíble cambio de imagen de Bob en el siguiente video:
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