Soldado responde a pedido de ayuda de una madre. Pero cuando llega, derrite su corazón

El primer baile de padre e hija de Cayleigh Hinton en su escuela en Illinois, Estados Unidos, estaba a menos de un año de distancia cuando su padre, el Sargento del Ejército, Terrence Hinton, murió en un accidente de entrenamiento militar en Hawai.

Como no quería que su hija de 5 años se perdiera del gran evento, la madre de Cayleigh, Jillian Hinton, contactó a la Guardia Nacional de Illinois y pidió ayuda.

Cayleigh perdió a su padre en mayo del 2017.

Cayleigh dreams about her daddy all the time because she says he was a "good daddy" pic.twitter.com/sv1TpOR0t9

— Cristina Zambrano (@ZambranoABC7) February 8, 2018

El Sargento del Ejército, Terrence Hinton, sirvió múltiples giras en Afganistán e Irak antes de morir durante un ejercicio de entrenamiento en Hawai. Jillian lo llamó «alucinante».

«Fue tan impactante. Para él hacer dos giras y luego morir en el paraíso fue increíble «, le dijo a TODAY. «Ahora estamos en nuestro noveno mes, y parte de mí todavía siente que está en servicio. Cada día que pasa, la espera se hace mucho más grande».

Nueve meses después de que su padre falleciera, Cayleigh tuvo su primer baile padre e hija.

Antes del baile, Jillian se contactó con la Guardia Nacional de Illinois. Ella quería ver si alguien estaría dispuesto a llevar al baile a su hija de 5 años.

«Solo pensé en mis hijas y fue algo que realmente me conmovió», dijo el Primer Sgto. Joseph Bierbrodt, de la Guardia Nacional de Illinois, a TODAY. «Pensé: ‘Alguien tiene que acompañarla».

A pesar de que nunca había conocido a Cayleigh o su familia, el Sgto. Bierbrodt respondió ansiosamente a su solicitud.

El Sgto. Bierbrodt estuvo feliz de acompañar a Cayleigh a su baile.

En la noche del baile, el sgto. Bierbrodt apareció con un ramillete amarillo para Cayleigh y un perro de peluche gigante que había ganado en un parque temático unos años atrás.

Una vez que le preguntó formalmente a Cayleigh si iría al baile con él, los dos salieron a la calle hacia una limusina y fueron escoltados al baile por los bomberos, la policía y la Guardia Patriótica.

«Ella era simplemente la niña más linda, adorable y burbujeante», dijo Bierbrodt. «Tan pronto como la vi, se me derritió aún más el corazón».

Los dos pasaron la mayor parte del baile girando y girando alrededor del gimnasio de la escuela.

Aunque Terrence no estaba físicamente presente, tanto Jillian como Cayleigh sabían que él estaba allí en espíritu.

«Escuché a Cayleigh hablar con él cuando se estaba preparando y no tengo dudas de que lo tiene presente esta noche», dijo Jillian a ABC 7 Chicago.

El sargento Bierbrodt ayudó a que el primer baile de padre e hija de Cayleigh fuera memorable.

«Seré honesto, fue agridulce para mí no tener a Terrence aquí», le dijo Jillian a TODAY. «Sin embargo, al ver sus ojos brillar cuando vio la limusina y recibió las flores, mi corazón rebosaba de alegría. Me quedé allí sentada y los miré girar y me transporté a otro lugar».

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