Las abrazaderas son fáciles de conseguir; cualquier ferretería las vende, y es bueno tenerlas a mano para usarlas en caso de emergencia. ¿Pero qué pasa si alguien está tramando algo malo y tiene la intención de amarrar a una persona?
Si te encuentras en una desafortunada situación de estar amarrado con abrazaderas plásticas Tu primera reacción sería probablemente sacudir las manos con desesperación, tratando de librarte de las ataduras.
Sin embargo, eso no serviría de mucho; solo te causaría dolor y eventualmente hinchazón.
Un consejo útil sobre cómo soltar fácil y rápidamente las abrazaderas de sujeción de cables
La chica del vídeo, que tiene la cláusula de descargo de responsabilidad «Usa esta técnica a su propio riesgo», demuestra cómo manipularlas. Puede causar una pequeña cantidad de dolor y raspaduras en la piel, pero si tu vida estuviera en peligro, la incomodidad de romper los lazos no significaría nada.
Lo mismo sucede con la ruptura de las ligaduras si tus manos están atadas detrás de la espalda, solo tienes que levantar los brazos lo más alto que puedas y bajarlos rápidamente sobre el área de las glúteos, y se rompen, estás libre. ¡Ay!
Aunque puede ser útil para las abrazaderas de plástico, las abrazaderas reforzadas con metal son otra historia…
Mira la demostración de 49 segundos a continuación:
¿Habías visto estas reacciones del hielo seco?
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