Una familia de Alabama, Estados Unidos, se sintió nerviosa y desconsolada cuando solo meses después de haber sufrido un aborto espontáneo descubrieron que estaban esperando un bebé otra vez. Sin embargo a las 30 semanas, Courtney Waldrop fue madre nuevamente de lo que se conoce como bebé arco iris, ¡pero multiplicado por seis!
Un «bebé arcoíris» es un bebé que nace después de un aborto espontáneo, muerte fetal o muerte infantil. Según estadísticas recientes, aproximadamente entre el 15% y el 20% por ciento de todos los embarazos en Estados Unidos terminan con un aborto espontáneo cada año.
La mayoría de ellos ocurren dentro de las primeras siete semanas debido a que muchas mujeres no reconocen sus síntomas y no acuden por ayuda antes que algo salga mal. Además, otra desgarradora realidad es que para muchas familias el mayor riesgo de un aborto espontáneo significa que tal vez tengan que pasar por la misma tragedia más de una vez.
Después que Courtney diera a luz a su hijo mayor Saylor en 2008, la pareja sufrió consecutivamente la pérdida de tres embarazos. Aunque ella no tenía problemas para concebir, no podía retenerlos; y aunque la familia se sentía optimista con cada nuevo embarazo, sabían que había un alto riesgo médico de que algo saliera mal.
«Fue devastador porque puedo quedar embarazada tan fácilmente, simplemente no puedo aferrarme a ellos», contó Courtney a PEOPLE. «Fue molesto, pero lo habíamos experimentado antes y sabía que tenía un problema de salud que contribuyó a ello».
Ocurrido un tercer aborto espontáneo, la pareja optó por utilizar tratamientos de fertilidad. Cuando eran novios en la secundaria, siempre habían soñado con tener una casa grande, así que querían hacer todo lo posible para darle hermanos a Saylor.
Los tratamientos funcionaron, permitiéndoles tener a sus gemelos, Wale y Bridge.
Esta feliz pareja ya eran padres de tres niños y quisieron tener otro más; esta vez volvieron a la forma natural, pero lamentablemente se produjo un cuarto aborto espontáneo.
Su médico entonces optó por realizar nuevamente un tratamientos de fertilidad, esta vez dándole una dosis baja de medicamentos, para prevenir un embarazo múltiple.
Al igual que con sus gemelos, los Waldrops tuvieron éxito en concebir con los medicamentos de fertilidad, pero en lugar de tener el embarazo único pretendido, el médico de Courtney detectó seis ritmos cardíacos en el ultrasonido.
Naturalmente, la pareja estaba preocupada de que algo pudiera salir mal nuevamente, más los altos riesgos que los embarazos de sextillizos traen aparejados.
Después de hacer reposo en cama a partir de la semana 25 de embarazo, Courtney y Eric esperaron hasta la semana 30 donde bajaba el riesgo de complicaciones; y fue entonces que el 13 de diciembre, a sus 35 años, Courtney dio a luz a los seis bebés en un lapso de cuatro minutos, vía cesárea.
El grupo de seis bebés nació perfectamente dividido en dos bandos, con tres niños llamados Blu Wellington, Tag Bricker y Layke Bryars-y tres niñas, llamadas Rayne McCoy, Rivers McCall y Rawlings McClaine.
Aunque nacieron cerca de un mes y medio antes de tiempo, los seis son muy saludables y felices, y eso es una bendición para la familia Waldrop.
Según Cheatsheet.com, cuando se corrió la voz de que Courtney y Eric esperaban sextillizos, el pequeño pueblo de Alberstein, Alabama, se reunió para ayudar a aliviar la presión financiera de la pareja y fueron los que organizaron la fiesta de «revelación de género».
Además la familia Waldrop actualmente protagoniza el programa de TLC Sweet Home Sextuplets, donde puedes seguir la vida cotidiana de esta familia multitudinaria.
Hoy estos adorables bebés ya tienen más de un año y medio de vida y según relatan los propios Waldrops a PEOPLE: «¡Nuestros días son continuos y muy divertidos! Con tres niños grandes y seis niños pequeños, nunca habrá un momento aburrido en nuestra casa».
Bebés ven por primera vez y sus reacciones son de emoción total
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