Una bióloga marina y su equipo estuvieron encantados de encontrarse con una ballena 22.680 kilos, en una de sus aventuras de snorkel. Pero el deleite pronto se convirtió en un gran susto, cuando la ballena gigante comenzó a empujar contra ella con su cabeza.
Mientras que las cosas parecían que podrían haberse vuelto feas, resultó que la enorme ballena tenía otras intensiones y nadie resultó herido al final del día.
Un día de octubre de 2017, mientras la bióloga de ballenas Nan Hauser, de 63 años, hacía snorkel en el Pacífico Sur, una ballena gigante se le acercó. La ballena jorobada de peso pesado estaba tan cerca de ella que pudo capturar imágenes increíbles.
Sin embargo, el gigante mamífero comenzó a ponerse un poco violento y cuando te encuentras con algo que pesa más que dos autobuses escolares, sabes que no es hora de jugar.
La vida de Nan estaba en juego.
Nan dijo a Mirror: «Me mantuve calmada hasta cierto punto, pero estaba segura que se trataba de un encuentro mortal».
Su angustiado equipo, en un barco de investigación cercano, estaba preocupado por su seguridad. La bióloga comentó: «Detuvieron la filmación de sus drones porque no querían filmar mi muerte».
«Traté de alejarme de ella por temor a que, si me golpeaba demasiado fuerte, o me golpeaba con sus aletas o su cola, me rompiera los huesos y los órganos. Si me sostenía bajo su aleta pectoral, me habría ahogado».
Añadió: «No quería entrar en pánico, porque sabía que se daría cuenta de mi miedo». «Siento un vínculo muy cercano con los animales, así que, a pesar de mi temor, traté de mantener la calma y averiguar cómo alejarme de ella».
Pero como sea que lo intentara, la gigante no dejaba de empujarla, ni la dejaba ir.
Nan que estaba en las aguas de Muri Beach, Rarotonga, en las Islas Cook, relató: «Pasé 28 años bajo el agua con las ballenas y nunca tuve una ballena tan palpable e insistente en ponerme sobre su cabeza o sobre su vientre o sobre todo tratando de meterme bajo su enorme aleta pectoral».
La ballena la empujó durante más de 10 minutos, lo que le parecieron horas a Nan. Luego creyó ver a otra «ballena» a lo lejos, pero resultó ser un tiburón tigre de 4 metros de largo que estaba al acecho.
Finalmente se dio cuenta de que el mamífero gigante la estaba protegiendo de ser atacada por el tiburón. Ella dijo que había otra ballena golpeando el agua con su cola, tratando de desviar al tiburón.
Cuando regresó a su barco, se puede ver en las imágenes que la ballena incluso miró por encima del agua, quizás para asegurarse de que estaba a salvo.
Nan Expresó: «Las ballenas jorobadas son conocidas por su comportamiento solidario hacia otros animales, pero éste es el primer caso documentado de una ballena jorobada que protege a un ser humano de un tiburón bastante grande.
Mira el video a continuación:
Un hombre se encuentra con un Mero Goliat mientras pescaba en el mar
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