Los legisladores de la Cámara de Representantes de EE. UU. votaron a favor de una enmienda al proyecto de ley de energía que impediría al Departamento de Energía introducir normas de eficiencia energética que podrían prohibir la mayoría de las estufas de gas que se comercializan actualmente.
Más de una docena de demócratas se unieron a los republicanos para apoyar la medida, que forma parte de un paquete legislativo a favor de los combustibles fósiles liderado por los republicanos, la Ley H.R. 1, también conocida como Ley de Reducción de los Costes Energéticos, que el gobierno de Biden ha prometido vetar.
«Me alegro de que la Cámara haya aprobado mi enmienda a la ley H.R. 1 para impedir que @ENERGY prohíba el 50% de las estufas de gas del mercado», escribió en Twitter a última hora del miércoles el representante Gary Palmer (R-Ala.), que propuso la enmienda.
«Esta prohibición de facto de las estufas de gas fue apoyada por 181 demócratas que son cómplices de la búsqueda de Biden para controlar sus aparatos de cocina», añadió Palmer, presidente del Comité de Política Republicana de la Cámara de Representantes.
Se produce después de que el Departamento de Energía propusiera el 1 de febrero una norma que supondría la primera regulación de la eficiencia de los aparatos de cocina en Estados Unidos, estableciendo nuevos estándares tanto para las estufas eléctricas como para las de gas. Hasta la fecha ha recibido miles de comentarios. El plazo finaliza el 3 de abril.
Tras la propuesta de norma, el DOE actualizó a finales de febrero su análisis (pdf), según el cual aproximadamente la mitad de los modelos de cocinas de gas que se venden actualmente en el país no cumplirían la normativa.
La enmienda de Palmer prohíbe al secretario de Energía aplicar la norma propuesta por el DOE sobre estufas de gas, así como prohíbe cualquier otra norma similar que limite el acceso a las estufas de gas.
La votación sobre la enmienda de Palmer el miércoles fue 251-181 a favor, con 29 demócratas uniéndose a los republicanos en la cámara controlada por el Partido Republicano en la votación.
Alrededor del 38% de los hogares estadounidenses utilizan gas natural para cocinar, según la Administración de Información Energética. Eso supone unos 40 millones de cocinas de gas.
El DOE no ha sido la única entidad de la Administración Biden que ha estado apuntando a las estufas de gas.
En diciembre de 2022, Richard Trumka Jr., jefe de la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo (CPSC, por sus siglas en inglés), dijo que el gobierno federal debería prohibir las estufas de gas por motivos de salud. En enero, repitió esta opinión al afirmar que su agencia estaba considerando la posibilidad de prohibir las estufas de gas.
Un memorando filtrado mostró que Trumka, que fue nombrado por el presidente Joe Biden, quería prohibir las estufas de gas ya en octubre de 2022.
«Hay suficiente información disponible para que la CPSC emita [un aviso de propuesta de normativa] en [el año fiscal] 2023 proponiendo prohibir las estufas de gas en los hogares», dijo Trumka en el memorando.
Aunque la CPSC no ha propuesto una norma que prohíba las estufas de gas, a principios de marzo hizo una petición formal de información sobre los posibles riesgos para la salud de estos aparatos.
«Esta RFI no constituye ni propone una acción reguladora, sino que pretende informar a la Comisión y al público», afirma la solicitud, añadiendo que busca aportaciones y «soluciones propuestas» de partes interesadas como «consumidores, fabricantes, agencias gubernamentales, organizaciones no gubernamentales e investigadores sobre los peligros químicos crónicos asociados al uso de cocinas de gas».
Otros republicanos presentaron anteriormente proyectos de ley para bloquear preventivamente cualquier ley que restrinja las estufas de gas: la Ley para Salvar nuestras Estufas de Gas (pdf), presentada por la congresista Debbie Lesko (R-Ariz.), y la Ley para la Protección y Libertad de las Estufas de Gas (pdf), presentada por la congresista Kelly Armstrong (R-N.D.).
«¿En qué se centra la Administración Biden? En controlar el tipo de estufa que usan los estadounidenses», dijo Armstrong anteriormente.
«Esto es una incompetencia más de una administración que parece más interesada en dictar cada aspecto de nuestras vidas que en resolver problemas reales. Nuestros proyectos de ley dejan claro que los estadounidenses deben decidir si una estufa de gas es adecuada para sus familias, no el gobierno federal».
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