9 señales de alarma que indican el inicio de la diabetes

Opinión

La diabetes es una enfermedad moderna muy común, al igual que la obesidad. La medicina tradicional china (MTC) cree que la diabetes y la obesidad están estrechamente relacionadas —por lo general debido a una dieta inadecuada que conduce a daños gastrointestinales y trastornos metabólicos— y que el acondicionamiento dietético para los diabéticos es vital.

Una revisión de investigación publicada en Diabetes/Metabolismo Investigación y Revisiones en 2018 resumió los datos de la investigación académica sobre la diabetes y la obesidad. Combinando datos de Estados Unidos y Europa, el riesgo de diabetes tipo 2 en hombres obesos era siete veces mayor que el de las personas con peso normal, mientras que el riesgo de diabetes tipo 2 en mujeres obesas era 12 veces mayor.

Además, un número creciente de estudios también descubrió que la obesidad está estrechamente relacionada con el riesgo de desarrollar diabetes de tipo 1. Estudios recientes también se preocupan por la importancia de las funciones metabólicas proporcionadas por la flora intestinal, que puede desempeñar un papel clave en la obesidad y la diabetes. Esto concuerda con el punto de vista de la MTC, que considera el sistema gastrointestinal como el centro patológico por excelencia de la diabetes.

Mayor riesgo de diabetes en personas con obesidad abdominal

La MTC divide la obesidad en «grasa real» e «hinchazón» según la constitución del paciente. La grasa real se debe a una alimentación excesiva que supera la capacidad metabólica de las personas. Por otro lado, las personas hinchadas suelen decir que «hasta beber agua les hace engordar», y en realidad no comen tanto. Esto se debe a una disfunción endocrina y metabólica que provoca una disminución de la capacidad metabólica.

La obesidad intraabdominal (visceral) se refiere al tipo de obesidad en el que la grasa corporal se acumula principalmente en la cintura y el abdomen, dando lugar a una cintura de más de 90 cm en los hombres y de más de 80 cm en las mujeres, con una relación cintura/cadera de más de 0,90 en los hombres y de más de 0,85 en las mujeres.

Entre las personas con un índice de masa corporal excesivo y un perímetro de cintura anormal, el riesgo de diabetes aumenta significativamente. Una barriga grande indica un exceso de grasa y tejido adiposo blanco en la cavidad abdominal y las vísceras, que afecta a la funcionalidad metabólica y podría desembocar en un síndrome metabólico. Calificada como la «raíz de todos los males», la obesidad está estrechamente relacionada con la diabetes, la hipertensión, el trastorno del metabolismo lipídico, la aterosclerosis, la cardiopatía coronaria, la hiperuricemia, y es un desencadenante de muchas otras enfermedades.

Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que la diabetes está causada por comer en exceso y por lo que elegimos comer. Según la MTC, el centro patológico de la diabetes está en el tracto gastrointestinal, lo que indirectamente causa daños en el sistema digestivo auxiliar, como el hígado, la vesícula biliar, el bazo y el páncreas.

¿Por qué pierden peso los diabéticos?

En la antigua medicina china, la diabetes se denominaba «tres excesos y una deficiencia». Los tres excesos eran comer, beber y orinar en exceso, y la única deficiencia era la pérdida de peso.

En las personas con diabetes, la falta de insulina adecuada dificulta la capacidad del organismo para transportar la glucosa del torrente sanguíneo a las células para obtener energía. Como consecuencia, el organismo recurre a la descomposición de la grasa y el tejido muscular para generar energía, lo que provoca una disminución del peso corporal total.

Así pues, debido a esta deficiencia, parecería que los pacientes diabéticos deberían estar delgados. Pero hoy en día, la mayoría de los diabéticos son obesos y no presentan los síntomas de los «tres excesos y una deficiencia» como en la antigüedad. ¿A qué se debe?

Uno de los motivos es que ahora la mayoría de las diabetes se detectan en una fase más temprana y se cree que la obesidad es responsable del 80-85 por ciento del riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2. Así, a algunos pacientes les resulta imposible perder peso antes de que coman, beban y orinen en exceso.

Otra razón es el control eficaz de los síntomas mediante fármacos. La aplicación inmediata de fármacos hipoglucemiantes en cuanto aparecen los síntomas de los «tres excesos» es eficaz para suprimir el desarrollo de «una deficiencia».

Hay tres razones por las que los diabéticos pierden peso:

1. Enfermedad. Cuando los niveles de azúcar en sangre son elevados de forma constante, surge el estado de «tres excesos», que finalmente conduce a la transformación en el estado de «una deficiencia».

2. Hacer dieta. Cuando algunas personas se enteran que padecen diabetes, pueden tener dudas sobre lo que deben comer y beber, y es posible que pierdan peso de forma natural.

3. Efectos secundarios de los fármacos. Tomar durante algún tiempo determinados fármacos hipoglucemiantes, como la metformina, puede provocar una pérdida de peso.

9 pistas para la detección precoz de la diabetes

¿Cuáles son los síntomas que disparan la alarma de una posible diabetes?

1. Fatiga continuada.

2. Pérdida de peso inexplicable.

3. Infecciones repetidas, como prurito vulvar intratable, infecciones fúngicas vulvares y vaginales recurrentes o furunculosis recurrente (infección de los folículos pilosos).

4. Impotencia.

5. Poliuria (micción excesiva) y polidipsia (sed excesiva).

6. Glucemia en orina ocasionalmente positiva, pero glucemia en ayunas normal.

7. Hipoglucemia reactiva (descenso de la glucemia tras una comida). Palpitaciones, sudoración y temblores que se producen cuando el estómago está vacío.

8. Arteriosclerosis, cardiopatía coronaria y lesiones del fondo de ojo (superficie posterior de los ojos).

9. En los ancianos, los síntomas incluyen alteraciones sensoriales inexplicables, disfunción nerviosa autonómica, retención urinaria, incontinencia urinaria, enfermedad vascular de las extremidades inferiores, infarto de miocardio, enfermedad renal y accidente cerebrovascular.

Principios de la dieta diabética

1. Evite comer en exceso y demasiado rápido

Deje de comer cuando esté entre un setenta y un ochenta por ciento lleno y mastique bien.

2. La sopa primero

Si va a tomar sopa con la comida —tómela antes— aumentará la saciedad y le ayudará a perder peso de forma natural. La sopa después de comer puede provocar flatulencias, y no es buena para la digestión ni para el metabolismo.

3. Equilibre la carne y las verduras

Aumente el consumo de verduras y reduzca el de carne. Intente incorporar verduras en la mayoría de sus comidas, procurando una combinación equilibrada de carne y verduras.

4. Coma primero proteínas

Coma los alimentos en el siguiente orden: carne (consuma menos que verduras), seguida de verduras (consuma más que carne) y, por último, almidones. Las enzimas digestivas del estómago se utilizan principalmente para digerir las grasas y las proteínas. Si se come primero la carne, se aprovecharán mejor las enzimas digestivas y se evitarán las flatulencias. Comer primero los almidones puede hacer que suba rápidamente el azúcar en sangre. Al comer en el orden de carne, verduras y almidón, su azúcar en la sangre se mantendrá más estable, por lo que es más fácil perder el exceso de peso.

5. Coma la fruta adecuada en el momento adecuado

Incluya en su dieta frutas verdes y menos dulces, como cítricos, especialmente limas, limones, melocotones, kiwis, aguacates, guayaba, etc. Se recomienda comer fruta después de la comida y antes de la cena, como suele haber menos actividad después de cenar es difícil que el cuerpo consuma todo el azúcar de la sangre antes de acostarse.

6. Coma menos en la cena

Intente comer menos alimentos ricos en almidón por la noche y coma una cantidad menor en general.

7. Coma arroz blanco y mijo

El arroz integral está bien solo en ocasiones.

Observé en mi práctica clínica que cuando algunos pacientes diabéticos comen alimentos básicos como arroz integral o arroz de cinco cereales a largo plazo acaban con un mal control del azúcar en sangre. Como resultado, son más propensos a la deficiencia de qi (flujo de energía vital), la fragilidad, e incluso la pérdida de masa muscular, porque comer arroz integral más difícil de digerir constantemente consumirá demasiada energía del bazo y el estómago. Según la teoría de la MTC, «el bazo gobierna los músculos», y cuando el bazo tiene energía insuficiente, el volumen de los músculos también disminuirá.

A menudo aconsejo a los diabéticos que hagan su comida con la mitad de arroz blanco y la mitad de mijo cola de zorro. Los antiguos creían que el mijo podía curar la diabetes, estabilizar el azúcar en sangre y ayudar a mantener una buena fuerza mental y física.

Tratamientos de MTC para la diabetes

La diabetes puede tratarse eficazmente con hierbas medicinales y alimentos chinos. La mayoría de los medicamentos hipoglucemiantes de esta categoría son amargos, como el Rhizoma coptidis, y lo mismo ocurre con alimentos como el melón amargo. Lo amargo es lo contrario de lo dulce, y las hierbas y alimentos amargos pueden suprimir el apetito y reducir el metabolismo. Los estudios descubrieron que los polisacáridos de las hierbas medicinales chinas tienen un efecto antidiabético. Un estudio publicado en Reporte Científico en 2021 descubrió que 14 compuestos activos del Rhizoma coptidis pueden reducir el azúcar en sangre.

Además, la investigación también confirmó que los componentes de Rhizoma coptidis tienen propiedades antiinflamatorias.

En el tratamiento de la diabetes con MTC, además de controlar el azúcar en sangre, se tiene en cuenta la regulación de las vísceras del paciente, según su constitución individual. Para los pacientes que ya se encuentran en las últimas fases de la diabetes, los profesionales de la MTC emplean hierbas medicinales para tratar las deficiencias y los daños, y reponer los fluidos y la energía corporales. Para prevenir y tratar las enfermedades vasculares causadas por la diabetes, es necesario utilizar hierbas como la angélica y la semilla de melocotón, que son eficaces para promover la circulación sanguínea y eliminar el estancamiento sanguíneo.

La meditación, el mejor tratamiento para la neuralgia periférica

Muchos pacientes diabéticos sufren de mala circulación sanguínea periférica en las extremidades inferiores, y la piel de los pies a menudo se entumece, con frecuentes dolores nerviosos periféricos. La postura de meditación sentada con las piernas cruzadas es una forma eficaz de mejorar este aspecto. Mientras se está en esta postura, el flujo sanguíneo en las piernas se ralentizará. Cuando las piernas se desbloquean después de estar sentado en la posición cruzada por un tiempo, el aumento del flujo sanguíneo se produce al instante. Estas ráfagas de sangre son capaces de ayudar a romper los obstáculos de la circulación sanguínea periférica. Para algunas personas, sentarse en esta postura puede resultar doloroso al principio, pero requiere paciencia y perseverancia a lo largo del tiempo para que surta todo su efecto.

Además, una investigación reciente descubrió que la meditación— además de ser un ejercicio para la salud física y mental— puede ayudar a controlar el azúcar en sangre. Una investigación publicada en febrero en el Journal of Integrative and Complementary Medicine demostró que, en pacientes con diabetes de tipo 2, la meditación, el qigong y el yoga redujeron los resultados de la HbA1c (un análisis de sangre para determinar los niveles de azúcar en sangre) en una media del 0,84 por ciento, un resultado similar al de tomar el fármaco hipoglucemiante metformina. La hemoglobina glucosilada es un indicador importante de la diabetes, y los pacientes con diabetes de tipo 2 deben esforzarse por mantenerla por debajo del 7 por ciento.

Nota: Algunas de las hierbas mencionadas pueden sonar desconocidas, pero muchas están disponibles en tiendas de dietética y de alimentos asiáticos. Solo se sugiere una dieta medicamentosa para un buen cuidado diario de la salud. Como la constitución de cada persona y la susceptibilidad a las enfermedades son diferentes, consulte a un médico profesional para un plan de tratamiento específico.

Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de The Epoch Times.

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