El gobernador Greg Abbott elogió el domingo a Texas por su innovación en medio de la crisis mundial de escasez de chips que está afectando a la producción de automóviles y productos electrónicos de consumo, declarando que su estado será el «hogar de la fabricación de semiconductores en el futuro».
En una entrevista en el programa «Sunday Morning Futures» de Fox News, el gobernador republicano se refirió a la crisis de los chips, que se calcula que costará a la industria automovilística 210,000 millones de dólares a nivel mundial en pérdidas de ingresos en 2021, y dijo que Estados Unidos se había equivocado al subcontratar chips de países extranjeros como China.
«El país cometió un error en las últimas una o dos décadas al subcontratar la fabricación de todos estos suministros esenciales, ya sea ahora los semiconductores o podrían ser los suministros sanitarios que necesitábamos durante la época de la COVID, sea cual sea el caso, necesitamos no depender de China u otros países para nuestras necesidades esenciales, para cosas como los semiconductores», dijo Abbott.
«Esa es exactamente la razón por la que Texas está liderando el camino, convirtiéndose en el hogar de los semiconductores que van en todo lo que la gente utiliza», declaró el gobernador.
«No se trata solo de su iPhone o de su laptop o de lo que sea», continuó diciendo. «También está en todos esos vehículos que se están fabricando», añadió.
La escasez mundial de chips ha provocado que varias empresas recorten su producción, entre ellas General Motors, que hace unos meses anunció que recortaba la producción en seis plantas de montaje estadounidenses, así como la empresa matriz de Chrysler, Stellantis NV.
En agosto, Ford anunció que cerraría temporalmente su planta de ensamblaje de Kansas City, donde se fabrica su camioneta F-150, la más vendida.
Sin embargo, a otras empresas parece irles mejor. Abbott y Samsung Electronics anunciaron en noviembre que la multinacional surcoreana construiría en Taylor (Texas) una nueva planta de fabricación de semiconductores valorada en 17,000 millones de dólares, la mayor inversión extranjera directa registrada en el estado.
La nueva instalación de fabricación «producirá chips lógicos avanzados que impulsarán dispositivos de nueva generación para aplicaciones como el móvil, el 5G, la computación de alto rendimiento (HPC) y la inteligencia artificial (AI)», dijo Abbott, añadiendo que la medida elevaría la inversión total de la compañía en Texas a más de 35,000 millones de dólares desde 1996.
En otro lugar, el domingo, Abbott promocionó la política de no-vacunación de Texas por haber impulsado a nuevas empresas a trasladar sus sedes al Estado de la Estrella Solitaria.
Texas es uno de los varios estados de EE. UU. que ha presentado múltiples demandas federales contra la Administración Biden por su orden de vacunación contra la COVID-19, que exige a casi todos los empleados federales, incluidos los empleados federales civiles y los contratistas, que se vacunen como condición para el empleo.
Abbott dijo que «no puede haber órdenes que infrinjan la libertad individual», y añadió que «en parte, esa es la razón por la que hay tantas empresas que se están trasladando al estado de Texas».
El gobernador señaló que de enero a noviembre de este año, 70 empresas y corporaciones han trasladado su sede a Texas.
«Texas ha sido muy agresivo a la hora de desafiar legalmente todas estas órdenes que la Administración Biden ha puesto en marcha en relación con el COVID, y las hemos ganado todas en los tribunales, y ahora mismo en Texas no hay órdenes federales que se apliquen», dijo Abbott. «La única orden que se aplica es mi orden ejecutiva que dice que nadie en el estado de Texas puede ser obligado a vacunarse».
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