La abogada y portavoz del expresidente Donald Trump, Alina Habba, proclamó el domingo que las fechas fijadas en sus cuatro juicios penales no son realistas y vaticinó que serán reprogramadas.
Durante una entrevista dominical en Fox News, se le preguntó a la Sra. Habba cómo estaban tratando sus abogados de prepararse para los cuatro juicios en diferentes jurisdicciones mientras mantenían su campaña presidencial para 2024.
“Estas fechas de juicio se van a cambiar. No es realista. Es teatro”, dijo sobre el calendario actual del juicio. «Ningún juez va a decir que puedes estar en dos juicios a la vez en dos estados diferentes, porque muchos de ellos se superponen».
Los jueces, dijo, «se fijan en la fecha de inicio del juicio, pero se trata de juicios de cuatro a seis semanas como mínimo. Así que es imposible que no se solapen. Tendrán que llegar hasta octubre o noviembre del año que viene”.
La Sra. Habba, por su parte, dijo que todos los casos presentados contra el 45º presidente están diseñados para «atarlo» en medio de la campaña y mientras es actualmente el candidato del GOP más votado. «Intencionalmente esperaron años y años» para presentar cargos contra el expresidente, le dijo al medio.
Cuando se le preguntó cómo el presidente Trump enfrenta un máximo de 700 años de prisión por todos los cargos (federales y estatales) en su contra, dijo que es un intento de intimidarlo durante su campaña.
El presidente Trump enfrenta múltiples cargos en un caso electoral de 2020 presentado por el fiscal especial Jack Smith. Esos cargos incluyen conspiración contra los derechos, obstrucción e intento de obstruir un procedimiento oficial y conspiración para defraudar al gobierno de Estados Unidos, según una acusación revelada el mes pasado.
El equipo de Smith también acusó al expresidente de múltiples cargos relacionados con su presunto mal manejo de documentos clasificados después de que abandonó la Casa Blanca. En mayo, el fiscal especial afirmó que el presidente Trump había cometido delitos graves contra las leyes de seguridad nacional y conspiración para obstruir a los jueces.
A principios de este mes, en Georgia, la fiscal de distrito del condado de Fulton, Fani Willis, acusó al presidente Trump y a más de una docena de personas de conspirar ilegalmente para llevar a cabo una empresa criminal después de las elecciones de 2020 en el estado. El 25 de agosto, el presidente Trump fue ingresado en la cárcel del condado de Fulton y le tomaron una fotografía policial, que inmediatamente se volvió viral en las redes sociales.
Aproximadamente una hora después de que se difundiera la foto policial, el expresidente regresó a X por primera vez después de haber sido expulsado de la plataforma hace más de dos años, cuando se llamaba Twitter. Publicó la fotografía policial con un texto que acusaba a los fiscales de participar en interferencia electoral, y también dirigió a sus seguidores a un sitio web de donaciones.
A finales de marzo, el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, acusó al presidente Trump de cargos relacionados con pagos a un artista para adultos durante las elecciones de 2016. Se ha programado un juicio para marzo de 2023.
En los casos federales y en el caso Manhattan presentado por Bragg, el presidente Trump se declaró inocente. También ha negado categóricamente haber actuado mal en el caso del condado de Fulton, acusando a los fiscales de participar en una cacería de brujas por motivos políticos para interferir con su candidatura presidencial de 2024.
Harrison William Prescott Floyd, acusado de acosar a un trabajador electoral del condado de Fulton, no negoció una fianza con anticipación y permaneció en la cárcel después de entregarse el jueves. Los registros de la corte federal de Maryland muestran que Floyd, identificado como un exmarine estadounidense que participa activamente en el grupo Black Voices for Trump, también fue arrestado hace tres meses con una orden federal que lo acusa de confrontar agresivamente a dos agentes del FBI enviados para servirle con una citación del gran jurado.
Un abogado del Sr. Floyd no respondió a una solicitud de comentarios de The Epoch Times el 25 de agosto.
A continuación, se espera que el juez Scott McAfee, del Tribunal Superior del Condado de Fulton, fije las comparecencias de cada uno de los acusados en las próximas semanas. Será entonces cuando comparezcan ante el tribunal por primera vez y se declaren culpables o inocentes, aunque en Georgia no es infrecuente que los acusados renuncien a la comparecencia.
Al menos cinco de ellos están intentando llevar sus casos a un tribunal federal. Dos son exfuncionarios federales: El exjefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, y el exfuncionario del Departamento de Justicia de Estados Unidos, Jeffrey Clark, mientras que los otros tres son el expresidente del Partido Republicano de Georgia David Shafer, el senador estatal de Georgia Shawn Still y la expresidenta del GOP del condado de Coffee, Cathy Latham.
Un juez escuchará los argumentos sobre la solicitud de Meadows el lunes y sobre la de Clark el 18 de septiembre. Se ha especulado que el presidente Trump también intentará llevar su caso a un tribunal federal.
El abogado del expresidente, Steve Sadow, presentó el 25 de agosto una objeción a la propuesta de una fecha amplia para el juicio en octubre y una fecha de marzo que la Sra. Willis había sugerido previamente. Pidió que el caso de Trump se separe del abogado Kenneth Chesebro, otro coacusado y cualquier otro coacusado que presente una demanda de juicio rápido.
Associated Press contribuyó a este artículo.
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