El abogado especial John Durham se opone a la propuesta de que una fuente clave del expediente anti-Trump financiado por la campaña de Hillary Clinton utilice información clasificada.
Durham presentó la objeción en el tribunal el 16 de agosto.
La presentación estaba sellada, lo que significa que el contenido no es público.
Pero el título de la presentación dice que las objeciones se refieren al «uso, relevancia y admisibilidad» de la información clasificada.
Esto se produjo después de que Igor Danchenko, la fuente del expediente, informara al tribunal a principios de agosto de su intención de utilizar información clasificada en su próximo juicio, que está previsto que comience en octubre en Alexandria, Virginia.
Ese expediente también está sellado.
Los fiscales han entregado más de 5000 documentos clasificados y casi 61,000 documentos no clasificados al acusado antes del juicio, según una presentación del equipo de Durham. Los fiscales dijeron que los documentos clasificados producidos en ese momento «representan la mayor parte del descubrimiento de pruebas clasificado en este asunto».
Los fiscales pidieron una prórroga para presentar el resto, a lo que se opuso Stuart Sears, abogado de Danchenko.
Sears dijo que su cliente necesitaba tiempo para revisar los documentos clasificados y presentar la notificación de que pretendía utilizar información clasificada en su defensa.
Acusaciones
El entonces fiscal general William Barr nombró a Durham, un exfiscal de Estados Unidos, como abogado especial en 2020, ordenándole que investigara a las personas involucradas con las actividades de inteligencia asociadas a las elecciones de 2016 y a la administración del entonces presidente Donald Trump, incluyendo la operación del FBI apodada Crossfire Hurricane que se centró en la supuesta colusión entre los asociados de Trump y Rusia.
Durham también fue autorizado a investigar la indagación completada por el abogado especial Robert Mueller, que no encontró pruebas de colusión.
Crossfire Hurricane se basó en parte en el expediente que el exespía británico Christopher Steele, que favorecía a Clinton frente a Trump, recopiló en nombre de la campaña de Clinton y del Comité Nacional Demócrata. El expediente presentaba una serie de acusaciones sin fundamento, varias de las cuales han sido consideradas falsas por las autoridades estadounidenses.
Danchenko, ciudadano ruso que vive en Estados Unidos y exanalista de la Brookings Institution, era una de las fuentes de Steele.
Danchenko fue acusado en 2021 de engañar a los funcionarios del FBI cuando le preguntaron sobre la procedencia de la información que proporcionó a Steele.
Danchenko presuntamente afirmó haber obtenido información de Sergei Millian, un empresario estadounidense de origen belga. Pero la fuente real era Charles Dolan, un asociado de Clinton desde hace mucho tiempo, descrito en los archivos judiciales como PR-Ejecutivo-1 e identificado por el abogado de Dolan.
Las mentiras de Danchenko fueron pertinentes porque «la investigación del FBI sobre la campaña de Trump se basó en gran parte en los informes de la empresa para obtener las órdenes de la FISA sobre Asesor-I», o Carter Page, decía la acusación.
Danchenko se ha declarado inocente.
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