La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) solicita a un juez de Pensilvania que ordene a las autoridades del condado de Luzerne que restablezcan los buzones para depositar el voto por correo, según los documentos judiciales presentados el 1 de octubre.
La administradora del condado de Luzerne, Romilda Crocamo, ordenó en septiembre la retirada de los cuatro buzones que el condado ha estado utilizando en las últimas elecciones. Dijo que visitó los buzones y determinó que el condado no podía mantenerlos seguros.
«Si bien reconozco que los buzones pueden proporcionar medios alternativos para que los votantes emitan su voto, debo dar prioridad a la seguridad de nuestra comunidad en el clima político actual», dijo.
Sin embargo, Crocamo no tiene autoridad para retirar los buzones, dijeron los abogados de la ACLU, remitiéndose a la ley estatal que atribuye la facultad de comprar y mantener las urnas a las juntas electorales de los condados.
«La decisión unilateral de la administradora del condado de eliminar el despliegue de cuatro urnas electorales fue una violación de su autoridad y usurpó ilegalmente la autoridad y responsabilidad de la Junta sobre la administración de las elecciones del condado de Luzerne», dijeron los abogados en una denuncia presentada ante la Corte de Causas Comunes del condado de Luzerne.
La Junta Electoral del Condado de Luzerne autorizó en 2020 las urnas. Las cajas se utilizaron en las elecciones de 2020 y 2022, y en las primarias a principios de este año. Los miembros de la junta rechazaron una moción para eliminar las cajas en una reunión del 21 de febrero de este año.
Crocamo no es miembro de la junta y nunca llevó el asunto ante los miembros, por lo que su acción es ilegal, según los documentos.
La ACLU pide a la corte que ordene a Crocamo restablecer los buzones.
«Los buzones son una forma segura y fácil de garantizar que los votos por correo se devuelven a tiempo, y son especialmente importantes para las personas con discapacidad y para quienes tienen dificultades de última hora para acudir a las urnas el día de las elecciones», dijo en un comunicado Witold Walczak, director jurídico de la ACLU de Pensilvania. «La administradora del condado no tenía autoridad legal para eludir la decisión de la junta electoral de seguir ofreciendo a los votantes del condado de Luzerne … una opción segura y fácil de votar por correo, y esperamos que la corte restaure rápidamente los cuatro buzones».
La ACLU dice que se puso en contacto con Crocamo después de su anuncio, pero no recibió respuesta, lo que provocó la demanda.
La ACLU representa a otro grupo, In This Together NEPA, y a tres votantes que dicen haber votado por correo.
Jenny L. Wilczak, una de las votantes, afirma que tenía previsto votar por correo en las próximas elecciones presidenciales, citando una cirugía de espalda programada para el día de las elecciones. Wilczak «quiere tener la seguridad de que su voto se recibirá antes de la fecha límite, lo que no siempre es posible utilizando el Servicio Postal de EE. UU. para entregar a tiempo una boleta de voto por correo», dice la queja.
The Epoch Times se puso en contacto con Crocamo para pedirle comentarios, pero no recibió respuesta al momento de la publicación de este artículo.
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