El ex asesor de seguridad nacional John Bolton criticó el acuerdo temporal de rehenes y alto el fuego entre Israel y el grupo terrorista Hamás asegurado el 21 de noviembre, diciendo que «es un acuerdo muy malo» para Israel.
«Es otro intercambio de rehenes, víctimas inocentes, por criminales que están en las cárceles israelíes en una proporción de tres a uno a favor de los terroristas de Hamás», dijo Bolton.
En una entrevista con el presentador John Catsimatidis en el programa de radio «Cats & Cosby» el 22 de noviembre, Bolton dijo que, aunque el acuerdo tenía una finalidad humanitaria, ya que los rehenes serían liberados, la tregua en sí era muy mala para Israel.
El gobierno israelí anunció la tregua a primera hora de la mañana del miércoles, tras la aprobación del Gabinete israelí. En virtud del acuerdo, al menos 50 de los aproximadamente 240 rehenes, exclusivamente mujeres y niños, serán liberados en cuatro días de la custodia de Hamás. A cambio, 150 detenidos palestinos, también mujeres y niños, serán liberados de las cárceles israelíes.
El gobierno israelí dijo que se añadirá un «día de respiro» adicional por cada 10 rehenes liberados. El acuerdo también estipula que la pausa de cuatro días en los combates permitirá aumentar la ayuda humanitaria a Gaza.
Bolton cree que la principal razón por la que Israel aceptó el acuerdo fue la presión de la administración Biden. El ex asesor de seguridad nacional afirmó que la Casa Blanca estuvo dando marcha atrás en su apoyo inicial a Israel, como se vio con la tregua.
Además de la desfavorable relación de canje, la pausa en los combates cuando se liberan otros 10 rehenes es otro mal término para Israel. «¿Por qué darías a tu enemigo el voto decisivo sobre la duración de la pausa?». preguntó Bolton.
«No veo cómo esto en neto beneficia a Israel estratégicamente. Estoy seguro de que las Fuerzas de Defensa israelíes obtienen algún beneficio de la pausa», dijo Bolton.
«Pero, fundamentalmente, el tiempo juega a favor de Hamás», añadió. «Y cuanto más tiempo se les dé, más tiempo podrán hacer retroceder a su gente desde posiciones vulnerables, consolidarse y esconder a los demás rehenes aún más profundamente en el sistema de túneles».
El Sr. Bolton también señaló que las condiciones de los rehenes mejoraron en comparación con días anteriores cuando fueron capturados «porque está claro que los rehenes son monedas de cambio para Hamás». Dijo que el grupo terrorista sólo se asegura de «maximizar» el valor de los rehenes ya que «Hamás quiere tiempo de espera».
El acuerdo
El acuerdo fue el resultado de semanas de extensas negociaciones en las que participaron Estados Unidos, Qatar, Egipto, Hamás e Israel, según la Casa Blanca.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, agradeció al jeque Tamim bin Hamad Al-Thani de Qatar y al presidente egipcio Abdel-Fattah El-Sisi «su liderazgo» para alcanzar el acuerdo y prometió que «no se detendrá» hasta que todos los rehenes estadounidenses sean liberados.
Aunque el Gabinete de Israel respalda el alto el fuego y el acuerdo de liberación de rehenes con Hamás, «el gobierno israelí, las FDI y las fuerzas de seguridad continuarán la guerra para devolver a todos los rehenes, completar la eliminación de Hamás y garantizar que Gaza no renueve ninguna amenaza para el Estado de Israel», dijo Israel en el comunicado tras el anuncio del acuerdo.
Se calcula que Hamás se llevó 236 rehenes a Gaza tras su mortífero ataque transfronterizo contra israelíes el 7 de octubre, que desencadenó la guerra. Se cree que entre los rehenes hay casi una docena de ciudadanos estadounidenses.
Según la Casa Blanca, se espera que tres estadounidenses sean liberados como parte del acuerdo, entre ellos una niña de 3 años cuyos padres murieron el 7 de octubre.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, estuvo sometido a una intensa presión interna para que dé prioridad a los esfuerzos por rescatar a los rehenes capturados por Hamás.
Netanyahu prometió que la ofensiva israelí contra Hamás comenzaría en cuanto terminara la tregua. Antes de anunciar el acuerdo de liberación de los rehenes, convocó a su gabinete de guerra para votar el acuerdo.
Hamás lanzó ataques por sorpresa contra Israel el 7 de octubre, matando al menos a 1200 civiles israelíes, entre ellos 32 estadounidenses. El conflicto se intensificó rápidamente cuando las fuerzas israelíes tomaron represalias contra Hamás al declarar el país el estado de guerra. Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, dirigido por Hamás, la campaña mató a más de 14,000 palestinos.
Con información de Emel Akan y Caden Pearson.
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