Un abogado de uno de los coacusados del expresidente Donald Trump en el caso de Georgia afirmó en una nueva entrevista que la oficina de la fiscal de distrito del condado de Fulton, Fani Willis, grabó ilegalmente una llamada telefónica entre ella y un defensor.
Christopher Kachouroff, el abogado que representa al coacusado de Trump, Harrison Floyd, dijo al analista legal Phil Holloway que la oficina de la fiscal de distrito grabó una llamada entre ella y uno de sus colegas, sin su conocimiento o consentimiento.
«Ella se puso en contacto con nosotros, con uno de mis colegas en Maryland, y fue ruda, brusca con él por teléfono, y él se estaba ocupando del caso de Maryland y yo del caso de Georgia, y ella terminó grabándolo», dijo el señor Kachouroff en la entrevista a principios de esta semana.
Al abogado se le preguntó por la legalidad de la grabación de sus colegas, que tienen su sede en Maryland. «Oh, sí, este es un delito grave en Maryland», dijo el Sr. Kachouroff.
En respuesta a las afirmaciones, el Sr. Floyd escribió en las redes sociales que «no importa dónde se originó la llamada» porque el abogado se encontraba «físicamente en Maryland», y añadió que la Sra. Willis no obtuvo el consentimiento del abogado para grabarlo, así que «ha cometido múltiples delitos graves y tendrá que rendir cuentas».
Maryland cuenta con una ley de escuchas telefónicas que tipifica como delito la grabación de una comunicación electrónica o una llamada telefónica a menos que todas las partes den su consentimiento. Pero Georgia solo tiene una ley de «consentimiento de una parte» para realizar grabaciones, lo que significa que solo una persona o parte implicada tiene que dar su consentimiento.
En particular, el secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, supuestamente grabó su propia llamada telefónica con el expresidente Trump en la que el exmandatario le preguntó sobre el fraude electoral en el estado y si faltaban papeletas durante las elecciones de noviembre de 2020. Esa llamada telefónica está en el centro del caso de Willis contra el expresidente.
El Sr. Floyd, el presidente Trump y otras 17 personas fueron imputados en agosto por un gran jurado del condado de Fulton, acusados de participar en un esquema de amplio alcance para tratar de anular ilegalmente las elecciones de 2020 en Georgia. Cuatro acusados se declararon culpables tras llegar a un acuerdo con los fiscales y el resto se han declarado inocentes.
Los cargos contra el Sr. Floyd se derivan de acusaciones de acoso a Ruby Freeman, una trabajadora electoral del condado de Fulton, que fue acusada de fraude electoral. Los fiscales afirmaron que el Sr. Floyd participó en una conversación el 4 de enero de 2021 en la que se dijo a la Sra. Freeman que «necesitaba protección» y se la presionó para que hiciera declaraciones falsas sobre fraude electoral.
El Sr. Floyd negó esas afirmaciones y se declaró inocente de los cargos. Él ha mantenido en las redes sociales que cree que hubo fraude electoral durante las elecciones de 2020 en el condado de Fulton. Su abogado dijo en una reciente entrevista con el Sr. Holloway que la Sra. Willis tiene una venganza personal contra el Sr. Floyd.
Además de los cargos en Georgia, el Sr. Floyd se enfrenta a cargos federales, que lo acusan de enfrentarse agresivamente a dos agentes del FBI enviados para entregarle una citación del gran jurado.
El año pasado, los fiscales intentaron revocar su fianza debido a sus posteos en X, antes Twitter, alegando «un esfuerzo para intimidar a coacusados y testigos, para comunicarse directa e indirectamente con coacusados y testigos, y para obstruir de otro modo la administración de la justicia». Sus acciones constituyeron «violaciones intencionadas y flagrantes» de sus condiciones de fianza, escribieron los fiscales.
En ese momento, el Sr. Kachouroff dijo que el intento de la Sra. Willis de revocar la fianza de su cliente no tenía sentido. «Ella no va a conseguir que se la concedan», agregó el abogado, indicando que planea presentar una moción para descalificar a la Sra. Willis de la acusación «debido a su animadversión personal contra mi cliente».
The Epoch Times se puso en contacto con la oficina de la fiscal de distrito del condado de Fulton para recibir sus comentarios el jueves.
La Sra. Willis, mientras tanto, se ha enfrentado a importantes acusaciones que amenazaban con descalificarla del caso, derivadas de su relación con un exfiscal especial en el caso de Trump. Tanto la Sra. Willis como el fiscal Nathan Wade, confirmaron tener una relación, pero negaron haber incurrido en un conflicto de intereses que les permitiera beneficiarse económicamente de su empleo en la oficina de la fiscal del distrito.
El juez del caso, Scott McAfee, emitió una orden el mes pasado en la que decía a la Sra. Willis que renunciara o que el Sr. Wade tenía que abandonar el caso. Horas más tarde, el Sr. Wade dimitió de la oficina, diciendo en una carta que los acusados no pudieron probar las acusaciones de que incurrieron en un conflicto de intereses.
La Sra. Willis no dio muestras de que vaya a recusarse. Durante una entrevista con CNN después de la orden del juez, indicó que el caso sigue adelante contra el presidente Trump y los otros acusados.
Con información de The Associated Press
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
